Paula, una niña con leucemia, recibe el alta tras un trasplante de médula: "Lágrimas de felicidad"
Paula Bañez, una niña de 11 años con leucemia, ha recibido el alta tras un trasplante de médula
Paula recibió el trasplante de médula el pasado agosto y ha pasado un mes aislada
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Paula Bañez, una niña de 11 años natural de Almonte, Huelva, ha recibido el alta hospitalaria después de 39 días ingresada tras recibir un trasplante de médula. La pequeña padece leucemia linfoblastica aguda y gracias al trasplante ahora tiene por delante "una nueva vida".
El pasado mes de junio Paula recibía la noticia más esperada: había un donante compatible con ella. La 'maratón' de búsqueda dio dado resultado y la familia recibió la "gran noticia" con esperanza y entusiasmo.
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Paula recibió el trasplante de médula el pasado agosto
El pasado 24 de agosto, Paula recibió su ansiado trasplante de médula: "55 minutos ha durado. Un procedimiento tan sencillo, que si Dios quiere le devolverá la vida a nuestra pequeña Dory", explicaba su familia en redes, donde crearon la campaña 'Sigue nadando Dory' para apoyar a la pequeña.
Ahora, un mes después, la pequeña ha recibido el alta y ha puesto fin a su aislamiento tras el trasplante: "Después de 39 días ingresadas. ¡¡Volvemos a casa!! No podemos estar más contentos de dar la noticia. Con lágrimas en los ojos aún, pero lágrimas de felicidad. Volvió a suceder la magia y hubo ese reencuentro tan esperando con su padre y su hermano", compartían en redes.
"No podemos dejar de dar las gracias a todo el personal del Hospital Infantil Virgen del Rocío, desde hematólogos, enfermería, auxiliares, técnicos, cocina, limpiadoras, mantenimiento, farmacia... Todos y cada uno que nos habéis cuidado como una más", continuaban.
Tras la alegría del alta, la familia compartía la llegada de la menor a casa, donde la esperaban con regalos y sorpresas por su vuelta: "Esta siendo un fin de semana de maravilla, en casa, en familia, disfrutando del descanso", explicaban.
Ahora, "toca tener cautela" e ir avanzando poco a poco, con muchas pruebas y revisiones por delante, por con mucha más esperanza y tranquilidad. Como su familia siempre concluye: "Sigue nadando Dory".