Un bebé lucha por su vida tras coger un herpes por culpa de los besos en su bautizo

  • El pequeño contrajo el virus conocido como 'beso de la muerte'

  • La madre quiere concienciar a la gente de no besar a los bebés recién nacidos

Un bebé recién nacido está luchando por su vida tras contraer un herpes en el ojo a causa de los besos que recibió en su bautizo. Noah Tindle tenía solo cuatro semanas de edad cuando su madre, Ashleigh White, de 21 años, notó que el ojo derecho de su hijo se había inflamado, tenía ampollas y no dejaba de llorar. Ashleigh se sintió devastada cuando los médicos le dijeron que su hijo probablemente había contraído el virus del herpes simple 1 (HSV-1), conocido como el 'beso de la muerte'.

La madre se ha embarcado en una cruzada para concienciar y advertir a la gente de que no besen a los recién nacidos, que pueden morir a causa de la enfermedad. Noah, que actualmente tiene nueve meses, estuvo a punto de quedarse ciego de un ojo y, tras dos meses en el hospital, aún está en proceso de recuperación.

La madre ha contado en declaraciones recogidas por 'Metro' que "muchos amigos lo abrazaron y lo besaron en el bautizo; podría haber sido cualquiera de ellos". "Solo quiero que más gente se dé cuenta de los riesgos y las consecuencias de besar a un bebé, especialmente a un recién nacido cuando sufres de herpes labial porque sé lo desgarrador que puede ser ver a tu bebé tan mal".

"Casi nadie había visto las fotos de Noah cuando contrajo el virus hasta que publiqué las fotos online, pero pensé que era importante crear más conciencia", ha explicado Ashleigh, de Barnsley, South Yorkshire, quien compartió su historia en Facebook y desde entonces se ha vuelto viral.

Inicialmente el médico creyó que el ojo irritado de Noah se debía a un conducto lagrimal bloqueado que normalmente se aclara por sí solo. Como no tenía fiebre y comía correctamente, Ashleigh no se preocupó, pero unos días después advirtió que unas ampollas brotaban alrededor del ojo. Entonces leyó en internet algo acerca de un bebé con síntomas similares que habían contraído un herpes. "De lo que no me di cuenta es que incluso si no tienes un herpes labial activo, aún tienes el virus en tu sistema y saliva, lo que significa que nunca se es demasiado cuidadoso", señala.

El virus no es dañino para los adultos, pero puede ser letal para los bebés

Llevó al bebé al médico el pasado mes de septiembre y fue remitido a una sala de niños para pruebas, inyecciones y antibióticos. Unos días después, el resultado fue positivo para el HSV-1, también conocido como el virus del herpes labial. Este virus no es dañino para los adultos.

"El virus estaba en su párpado, pero logramos detectarlo antes de que pudiera entrar en el torrente sanguíneo, aunque no pudo abrir los ojos durante días", cuenta Ashleigh. Durante dos semanas le inyectaron antivirales tres veces al día, antes de cambiar a un ciclo de seis meses de diferentes medicamentos. Tuvo una recaída el pasado marzo y hubo de pasar por lo mismo otra vez. Ahora no dejará de tomar sus medicamentos hasta marzo de 2020.

Ashleigh admite que "todavía tenemos un largo camino por recorrer antes de que salgamos de la oscuridad; tenemos continuamente controles con sus médicos y oftalmólogos". "Tuve la suerte de alcanzarlo a tiempo y todavía tener a mi niño aquí conmigo hoy, pero algunos podrían no ser tan afortunados", concluye.