La Comunidad de Madrid, entre las que más estrés sufre durante la pandemia

  • Solo Canarias y las Islas Baleares superan a Madrid en estrés, con un 93% y 91,40%

El coronavirus ha tenido un gran impacto en uno de los aspectos más importantes de la salud, el bienestar psicológico. La covid19 puede afectar la salud mental de numerosos españoles. Ante esta situación, la aseguradora Aegon, ha celebrado la mesa redonda "la salud y el bienestar emocional, una prioridad global en la época actual" para tratar esta cuestión.

Y es que, actualmente, en la Comunidad de Madrid, solo un 44% de los residentes trabajan su salud emocional y nueve de cada 10 sufre o ha sufrido estrés en los últimos 12 meses, según revela el III Estudio de Salud y Vida Aegon, que se ha presentado en la mesa redonda y que se centra en el análisis del estado de salud, del estilo de vida y de los hábitos y conductas relacionados con la salud y el bienestar emocional de los españoles.

El mayor impacto emocional, en la Comunidad de Madrid

La Comunidad de Madrid ha sido una de las regiones que más ha sufrido los estragos de la pandemia y, también, a nivel emocional. El 91% de los residentes sufre o ha sufrido estrés en los últimos 12 meses, situando a la comunidad entre las que más padece este sentimiento dentro de España, según los datos del III Estudio de Salud y Vida Aegon. Solo Canarias y las Islas Baleares superan a Madrid en estrés, con un 93% y 91,40% de personas que lo padecen respectivamente.

A pesar de que el promedio del estado de salud en la Comunidad de Madrid sea positivo, el 25% de los encuestados dice tener una mala salud por culpa del estrés y la ansiedad. La situación laboral es el principal motivo de estrés de los madrileños y habitantes de la región. Un 54,9% señala que el trabajo es lo que más le preocupa y causa estrés actualmente, frente al 42,7% del resto de los españoles.

De cerca, le sigue el 49,5% de los residentes que indican como motivo de estrés el miedo al contagio personal o de algún familiar por el covid19. Además, llama la atención que un porcentaje significativo –34,1% de los encuestados– apuntan al confinamiento en el hogar como razón capital de estrés.

Además, el 93,5% indica que el estrés impacta directamente en su salud. En relación a los principales efectos del estrés, los habitantes de la Comunidad de Madrid indican tener, principalmente, problemas de sueño (53,8% de los encuestados) y ansiedad (48,4%), en línea con lo que destacaban los expertos en salud durante la mesa redonda. Otras consecuencias del estrés para los encuestados en Madrid son: la fatiga, cansancio o falta de energía; comer más o el aumento de peso; y la irritabilidad o ira (todas ellas con un 35,2%).

El ejercicio, un remedio natural contra el estrés

Para paliar el estrés, indican los especialistas, un 60,4% de los habitantes de la Comunidad de Madrid toma medidas, lo cual es un porcentaje bastante mayor si se compara con el resto de España, que está en el 54%. En este sentido, el ejercicio físico es la actividad favorita de los madrileños y residentes para despejarse y acabar con la ansiedad. Otros, por su parte, prefieren intentar dormir o descansar más (44,4%) o realizar actividades de ocio (41,7%).

Los expertos destacan la importancia de realizar prácticas de relajación y mindfulness o de acudir a un psicólogo para ayudar a controlar estos sentimientos negativos que se afrontan durante la pandemia. En este aspecto, destaca que los encuestados de la comunidad solicitan ayuda psicológica por encima de la media nacional (22,2% frente al 14,4%), aunque no incorporan con tanta asiduidad los ejercicios de relajación y mindfulness (30,6% vs. 38,6% nacional).

El impacto del confinamiento en la salud emocional

Si bien muchos habitantes de la región, según el estudio, indican que el confinamiento les ha permitido conciliar su vida personal y laboral (38%) y sentirse más relajados y en paz (28%), el 23% remarca los sentimientos de estrés y ansiedad y el agobio al no poder seguir su rutina diaria (23% en ambos casos). Esto preocupa especialmente por los estragos que las nuevas restricciones y limitaciones sociales que vive la comunidad puedan causar sobre la salud y el bienestar emocional de las personas.

La baja autoestima es un factor crítico que afecta al ajuste psicológico y social y que puede derivar en una serie de síntomas psicopatológicos, como reacciones de ansiedad, síntomas depresivos y conductas antisociales, entre otros, según señalaron los ponentes.

Objetivo 2021: priorizar la salud emocional

Los expertos ofrecieron algunos consejos para fomentar el cuidado del bienestar psicológico de cara a afrontar los impactos de la covid19 en la salud y empezar el año 2021 con buen pie. Según el III Estudio de Salud y Vida Aegon, el aspecto más importante para tener una vida feliz en la Comunidad de Madrid es gozar de salud y bienestar emocional.

El primero es aprender a conocer y acompañar nuestras emociones y relacionarnos positivamente con nuestros pensamientos. Según los especialistas, analizar la raíz de nuestros problemas es clave para aprender a relativizarlos. Muchas veces sentimos estrés o ansiedad sin saber por qué o porque no queremos hacer frente a lo que nos preocupa. No hay que luchar contra ellas, si no reconocerlas y saber por qué nos sentimos así.

El segundo es realizar ejercicios de mindfulness, meditación y relajación. Son también una buena herramienta para el equilibrio mental. Un 39% de los encuestados realiza estos ejercicios para evitar el estrés. La meditación ha demostrado científicamente su eficacia para prevenir los pensamientos negativos repetitivos y es capaz de disminuir el nivel de activación de la amígdala de forma duradera a largo plazo.

Por último, se recomienda la ayuda especializada. Acudir a un psicólogo que ayude a entender el funcionamiento de la triada pensamientos, emociones y conductas. Los especialistas enseñan a reconocer, validar y relacionarse con las emociones y distanciarse de los pensamientos que alimentan la preocupación. Gracias a ellos, se podrán conocer las herramientas para regular el sistema nervioso, estrategias de relajación, e incluso, trabajar esas heridas emocionales pasadas que se abren en el presente, que la medicación o el tiempo no cura por sí solo.