Fregonas con sangre, las gafas de Janet rotas: las imágenes del sumario que implican a Aitor en su muerte

  • Aitor intentó tirar a la basura todas las evidencias

  • En el día de su desaparición hubo llamadas entre Janet y Aitor

  • El móvil económico se abre paso, aunque los investigadores son prudentes

Dos meses y medio después, uno de los elementos más enigmáticos de 'caso Janet', ha sido resuelto. El cuerpo de la mujer ha sido encontrado. Para ello, dado el estado del cuerpo, ha sido vital una prótesis en la pierna y las huellas dactilares.

Ahora queda que los culpables confiesen o, al menos, que las pruebas que tienen los investigadores pongan encima de la mesa lo que ocurrió el pasado 13 de marzo en Cornellà (Barcelona). Y no son pocas. Está claro que hubo un encuentro en la casa de Aitor entre este y Janet. Y que antes hubo llamadas entre ellos. Aitor aseguró que el día de los hechos salió de trabajar a las 8 de la mañana y estuvo durmiendo hasta las 13. El teléfono de Jumillas desmiente esta información, ya que existen cuatro llamadas entre ellos desde las 8:39 hasta las 10:22.

Y están otras imágenes que comprometen y mucho a Aitor. La de dos fregonas manchadas de sangre (correspondiente a Janet), la de esas gafas de Jumillas rotas, (presumiblemente en un enfrentamiento), la de esa hierba que se corresponde con la que tiene en su casa Aitor. No faltan una cuerda con pelos y varios guantes de látex.. Todo ello lo intentó Aitor tirar a la basura. Pero ya estaban tras él.

Informativos Telecinco ha tenido acceso al sumario donde se encuentran las imágenes en las que se ve a Aitor echando a la basura bolsas en las que se han encontrado precisamente gran parte de los elementos que le apuntan. Era un intento vano y pueril de eliminar las pruebas, pero los investigadores ya tenían pinchado su teléfono y le tenían en el punto de mira. Habían pasado ocho días desde la desaparición de Janet. Su familia siempre tuvo claro que la joven no había desaparecido de forma voluntaria.

Ahora lo que se investiga es el móvil del crimen. Nada confirmado aunque todo apunta a una cuestión de dinero. La víctima y el presunto asesino se conocían porque, y ahí es donde se está investigando, él había contraído una deuda con ella. El día de la desaparición la mujer se había acercado al domicilio de él y, por ese motivo, el vehículo de la víctima se encontraba muy próxima a la vivienda del detenido. Queda por ver si fue ese, el dinero, el motivo de una discusión que acabó en asesinato.

Encontrar el cuerpo ha sido también una cuestión tanto de perseverancia como de suerte. Los investigadores esperaron hasta poder confirmarlo al 100% aunque ya su abogado señalaba nada más conocer el hallazgo que había un 99% de posibilidades de que fuera ella, de que la tragedia se consumara. el encontrado en una zanja de cuatro metros de profundidad en un descampado en El Prat.

Lo encontraron dos operarios desbrozando una zona en la que la policía científica ha buscado sin descanso pruebas que puedan ser cruciales para la investigación. Los agentes han escarbado entre las hierbas, no han dejado un rincón sin rastrear. El hecho de que fuera un solar abandonado del Prat de Llobregat, un lugar muy conocido por Aitor y su amigo, en estos momentos considerado presuntamente colaborador, es un dato más que les relaciona con los hechos. La familia ahora solo pide una cosa: justicia y que sobre los responsables de la muerte de Janet caiga todo el peso de la ley.