El Supremo empieza a deliberar nada más escuchar a las partes en el caso de La Manada

  • Las acusaciones piden que se eleve la pena al considerar agresión

  • Los condenados, ser absueltos

Los cinco magistrados que conforman la Sala del Tribunal Supremo que revisa el caso de 'La Manada' ha comenzado a deliberar nada más finalizar la vista oral en la que acusaciones y defensa han expuesto sus argumentos. La Fiscalía apunta a que cometieron un "delito de violación continuada con fuerza intimidatoria". La defensa ha insistido en que "ella sí quería".

La vista ha comenzado a las 10.30 horas y cada acusación --Fiscalía, víctima, Ayuntamiento de Pamplona y Gobierno navarro-- ha tenido unos 15 minutos para argumentar por qué solicitan que la sentencia se eleve a 18 años de prisión para cada uno de los acusados por delito de agresión sexual y no de abuso.

El Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) confirmó en noviembre de 2018 condenas de 9 años de prisión para los miembros de 'La Manada por delito de abuso sexual con prevalimiento en los Sanfermines de Pamplona de 2016. Los cinco condenados se encuentran en libertad en espera de la resolución que dicte el alto tribunal.

Para la Fiscalía, José Ángel Prenda, Antonio Manuel Guerrero, Jesús Escudero, Ángel Pozas y Alfonso Jesús Cabezuelo cometieron un delito continuado de violación, ya que recurrieron a una "fuerza intimidatoria suficiente".

"No consta en los hechos probados que la víctima consintiera o accediera; no consta que los acusados preguntaran. Con su sola presencia y su actitud constriñeron la actitud de la víctima", ha explicado el Ministerio Público.

El resto de acusaciones han compartido estos argumentos, aunque el Ayuntamiento de Pamplona ha ido más allá de la intimidación al considerar que los acusados sí aplicaron "violencia" sobre la víctima que, aunque fuera "poca", sí sirvió para "doblegar" su voluntad.

Por su parte, la defensa de 'La Manada' ha pedido la libre absolución para sus clientes y ha cuestionado el relato de los hechos de la sentencia inicial de la Audiencia Provincial de Navarra.

El letrado Agustín Hernández ha dicho que "ella sí quería hacerlo. Denunció porque le sustrajeron el móvil". Ha terminado su alegato diciendo que "son absolutamente inocentes".

El tribunal que examina el caso está presidido por el magistrado Andrés Martínez Arrieta, que formó parte del tribunal que concluyó el pasado miércoles el juicio por el 'procés' independentista en Cataluña, al igual que la magistrada Ana Ferrer. Completan la Sala Francisco Monterde, Ana Ferrer, Vicente Magro y Susana Polo, ésta última como ponente.

Las primeras resoluciones de este caso provocaron una notable indignación en ámbitos feministas y de lucha contra la violencia de género, dando pie a numerosas manifestaciones de protesta en las calles.

La clave, la intimidación

La clave de este caso se encuentra en la tipificación que el Código Penal hace de los delitos de abuso y agresión sexual, pues para que concurra este último, deben darse factores de intimidación y/o violencia que el tribunal no apreció. La sentencia de la Audiencia de Navarra confirmada después por el TSJN dio por probado que los encausados, en una posición de prevalimiento, practicaron a la víctima actos "vejatorios" de contenido sexual sin su consentimiento, asentimiento o participación activa, aunque sin "ningún gesto que acredite una acción intimidatoria".