Las embarazadas y las personas en edad de riesgo, entre los empleados que no tienen que trabajar el lunes

  • El lunes se reincorporan los empleados de actividades no esenciales

  • El Ejecutivo publica una guía de buenas prácticas

  • Se debe facilitar el teletrabajo o condicones laborales de bajo riesgo

El lunes se reincorporan a sus centros de trabajo los empleados de actividades no esenciales que no puedan teletrabajar y que permita el primer Real Decreto que se aprobó tras la declaración del estado de alarma por la crisis del coronavirus No obstante, el ministro de Sanidad ha recordado hoy que tampoco algunos de ellos deben acudir, entre otros, las embarazadas o las personas vulnerables.

Así se recoge en la guía de buenas prácticas en centros de trabajo para prevenir contagios por el coronavirus publicada por el Ejecutivo, que destaca que no se acuda al centro de trabajo si se presentan síntomas o si se hubiera tenido contacto "estrecho" con personas infectadas, hasta confirmar que no hay riesgo para uno mismo o los demás.

Tampoco deberán acudir las personas más vulnerables por edad, por estar embarazadas o padecer afecciones médicas que, en caso necesario, "pueden contactar con su médico para que acredite su necesidad de aislamiento y que, si así fuera, se considerará a efectos laborales una situación asimilada a accidente de trabajo para la prestación económica de incapacidad temporal".

Por su parte, las empresas deberán facilitar el teletrabajo o condiciones laborales de bajo riesgo, aunque en los casos que no sea posible los empleados. "De no ser posible, los empleados en estas circunstancias podrán solicitar una valoración de su facultativo de atención primaria", asegura el texto, por lo que contempla que estos podrían no acudir tampoco.

Transporte hacia el trabajo

Además, todos los que acudan deberán, en la medida de lo posible, evitar medios de transporte que supongan la agrupación de personas y, en caso de utilizar el coche o un VTC, extremar las medidas de limpieza del mismo y evitar que viaje más de una persona por cada fila de asientos.

En los viajes en autobús, metro o tren, se recomienda guardar la distancia interpersonal con otros viajeros y, en el caso del transporte público, la guía recomienda usar una mascarilla higiénica, no médica.

El Ejecutivo aconseja planificar toda la operativa para que los empleados puedan mantener la distancia interpersonal recomendada y también las zonas comunes.

Centros de trabajo

Cuando se trate de empresas o establecimientos abiertos al público, deberán implementarse medidas para minimizar el contacto entre personas trabajadoras y el público, como establecer un aforo máximo, habilitar controles de acceso o facilitar equipos de protección individual cuando los riesgos no puedan evitarse.

Igualmente, cuando el espacio de trabajo no permita mantener la distancia interpersonal en los turnos ordinarios, los horarios de trabajo se procurarán escalonar en la medida de lo posible, lo que también evitará aglomeraciones en el transporte.

Se tendrán que realizar tareas diarias de higienización "reforzada" con productos autorizados y se deberá suministrar material higiénico y de protección suficiente para evitar los contagios entre los trabajadores.

La guía aconseja la ventilación periódica en las instalaciones al menos de forma diaria y por espacio de cinco minutos.

Para ayudar a la buena renovación del aire y hacerlo de manera habitual, es recomendable reforzar la limpieza de los filtros de aire y aumentar el nivel de ventilación de los sistemas de climatización.

Además se considera conveniente reforzar las tareas de limpieza en todas las estancias, con especial incidencia en superficies, especialmente aquellas que se tocan con más frecuencia como ventanas o pomos de puertas, así como todos los aparatos de uso habitual por los empleados, desde mandos de maquinaria a mesas y ordenadores. En cada cambio de turno es necesario limpiar el área de trabajo usada por un empleado.