La pulsera de las Queridas que Georgina estrena en su 'reality' de Netflix salió de un taller de Valencia

Cuando apenas han pasado cuatro días desde el estreno de la segunda temporada de “Soy Georgina”, el reality de la WAG más famosa del planeta ya se posiciona entre los más vistos de la plataforma audiovisual.

Su gran repercusión llega también a quienes aparecen en esta serie, que narra la vida cotidiana de la joven “madre e influencer”. Marcas que de la noche a la mañana ven cómo aumentan sus seguidores por haber aparecido, de manera directa o indirecta, aunque solo sea durante un minuto, en el reality.

Esto es lo que le ha ocurrido a Marga Martínez, fundadora de True Love, una joyería con base en Valencia, que ha sido la encargada de diseñar la pulsera de corazones que las Queridas -así es como se autodenomina el grupo de amigas de Georgina- han elegido para obsequiar a la pareja de Cristiano Ronaldo.

Un regalo con un enorme significado emocional, ya que la joya está compuesta por seis corazones de oro, decorados con un brillante y las iniciales de cada uno de sus vástagos.

El encargo, cuenta Marga, se lo hizo Iván García, periodista y amigo de Gio, y en ese momento le plantearon la gran pregunta: ¿Qué regalar a alguien que lo tiene todo? “Qué difícil, ¿verdad?”, exclama Marga en conversación con NIUS.

“Ellos buscaban algo que se pusiera siempre, a lo que tuviera mucho cariño y que tampoco les costase mucho dinero”, explica. En este sentido, y de manera consensuada “decidimos que fuera en oro liso, de corazones, que a ella le gustan, y que el corazón tocara su piel, porque simboliza a sus hijos”, cuenta la valenciana.

La estrella de Ángel

La joya se puso a punto y las Queridas se la regalaron a Georgina, pero en ese momento todavía no habían nacido los bebés que esperaba junto a Cristiano Ronaldo, por lo que la pieza solo tenía grabadas las iniciales de los cuatro hijos que ya tenían.

Cuando Georgina se puso de parto, y uno de los bebés -Ángel- falleció durante el proceso, Marga preguntó qué hacer, y tras consultarlo con la propia Georgina, decidieron poner una estrella en el brillante que decora el corazón con la 'A' en recuerdo a su hijo fallecido, ya que la influencer “dijo que ella quería tenerlo siempre con ella”.

“Todos los corazones llevan un brillante y el de Ángel lleva una estrellita que simboliza que está en el cielo, con las estrellas”, afirma Marga. Una anécdota que la protagonista de “Soy Georgina” ha desvelado y que para la joyera “parece que le hace un poco más humana”.  

El impacto de 'Gio' 

A raíz de la emisión del reality, Marga asegura estar notando que su marca True Love está teniendo más afluencia en sus redes sociales. “Estamos muy contentos”, afirma.

La joyera valenciana comparte con Georgina sus inicios en la moda, ya que cuando era más joven trabajó en la boutique de Alberta Ferretti en Londres. “Compartimos esa faceta, por eso me da mucha ternura”, señala, y se alegra de que haya tenido suerte en la vida porque sabe lo que es “tratar con gente que tiene mucho dinero y que a veces te trata bien, pero otras veces no”, añade. “Me alegro mucho y si encima es una true lover mejor que mejor", destaca.

Marga proviene de una familia de joyeros de Valencia, su padre ya lo era y de él dice haber heredado la honestidad en este negocio. “Al final los joyeros somos tenderos, solo que vendemos cosas maravillosas, oro, diamantes, nuestro objetivo es que el cliente se vaya satisfecho, que lo tenga para toda la vida”, afirma, mientras recuerda lo mucho que cuesta alcanzar el éxito.

“Ella inspira lujo y las joyas son lujo”

A la pregunta de si le gustaría conocer a Georgina, Marga no duda: “Sí rotundo”. Y tiene claro qué tipo de joya podría diseñar especialmente para ella. “Ella inspira lujo y las joyas son lujo”, señala, al tiempo que añade que al diseñar para 'Gio' “te puedes ir a lo que te dé la gana, ella se lo va a poner", añade, “en eso no tiene problema, va con chándal y lleva 100.000 euros en las orejas”. “Todo lo que no puedes hacer para la gente de diario, lo puedes hacer con ella”, añade. Quién sabe, quizá sea este el inicio de una bonita amistad.