Marisa Martín Blázquez impacta con una sorprendente revelación: "Escribo cartas a un muerto"

  • Marisa Martín Blázquez ha compartido uno de sus secretos más íntimos con sus seguidores

  • La colaboradora de 'Viva la vida' practica un ritual cada mes que le hace estar más cerca de una de sus personas más especiales

Existen muchas formas de amar y Marisa Martín Blázquez lo ha demostrado con una inesperada confesión que ha hecho que se nos encoja un poco el corazón. La colaboradora de 'Viva la vida', que es muy celosa de su vida privada ha compartido uno de sus grandes secretos. Algo que ha sorprendido a casi todos y que está relacionado estrechamente con su padre. Una demostración que cuando se ha hecho pública, la han definido como "un gesto de amor verdadero".

Tras perder a su padre, la periodista no se resignó a que no le podría volver a hablar y decirle lo mucho que le quería o contarle sus cosas. Es por ello que Marisa optó por continuar su relación a través de las cartas. Para ello ha utilizado de ejemplo a la editora Belén Bermejo a la que admira y la que ha hablado en alguna ocasión acerca de este tipo de comunicación con las personas que ya no están con nosotros. Bajo ese contexto, la colaboradora de 'Viva la vida' ha liberado su gran secreto: "Tengo que confesar que yo escribo a un muerto".

Este no se trata de un personaje ficticio o a alguien famoso a quien admire mucho. Es una persona "muy particular", tal como ella misma ha definido y que está mucho más viva y presente que otros que siguen en este mundo. "El destinatario, en cuestión, es mi padre. Desde que se marchó, físicamente, de nuestro lado le escribo una carta por mes", ha confesado a sus seguidores liberando así su secreto. Así es como ella ha encontrado una válvula de desahogo para seguir en contacto con una de las personas de las que más le ha costado despedirse.

Un ritual que lleva años haciendo cada mes la periodista para poner a su progenitor al día de todo. "Padre hace muchos, muchos, años que se fue de estas latitudes, así que, entenderéis que tengo centenares de cartas guardadas. Tienen su sobre, su nombre escrito con mi caligrafía, en el reverso el mío, con mi dirección (ha ido cambiando a lo largo de los años) y hasta sus sellos", ha revelado la periodista que demuestra con esto lo que le importan cada uno de los detalles.

La comunicadora se ha sincerado tanto que hasta ha querido compartir un detalle muy concreto que es especialmente conmovedor. Tras hacer una limpieza y poner en orden sus recuerdos Marisa Martín Blázquez ha confesado que ella misma daba respuesta a muchas de esas cartas para sentir a su padre a su lado:

"El otro día, intentando poner orden en una habitación de mi casa, saqué las cajas (de zapatos –del suelo, al cielo–) con toda la correspondencia escrita a padre. Empecé a leer las primeras y me acordé de cómo me inventaba sus respuestas en cartas que, imaginaba, me devolvía él. Estoy absolutamente segura de que acertaría en cada una de sus palabras".

Antes de terminar su publicación, la colaboradora de 'Viva la vida' ha querido dar un detalle más del que se ha enterado hace poco. Resulta que su ritual de las cartas a su padre no es algo exclusivo de ella. Su madre también escribe a su padre fallecido: "Me sorprendió que ambas estuviéramos haciendo lo mismo ocultándonoslo”, ha comentado finalmente en su reveladora publicación.

La otra confesión de Marisa Martín Blázquez: su enfermedad genética

Marisa Martín Blázquez ha encontrado una vía en la que se está liberando. Pese a ser una mujer reservada ha compartido mucho de ella en las redes sociales y también en el programa donde colabora. Precisamente allí, junto a Emma García y arropada por sus compañeros, la periodista quiso responder a todos aquellos que dan a entender que se ha sometido a operaciones estéticas en la cara para verse más joven. Visiblemente emocionada, Marisa explicó que padece una enfermedad que le quita movilidad, entre otras partes, en el rostro.

“Hay mucha gente que en mis redes sociales, y sin conocimiento de causa, hace sorna y burla acerca de algo que se ve en mi cara. Me dicen que deje de operarme, que qué me he hecho en la cara. Incluso, si googleas mi nombre, una de las primeras cosas que encuentras es ‘Marisa M-B, ojo", expresó la periodista a lo que añadió el nombre de su enfermedad. Miastenia Gravis, un diagnóstico que Marisa tiene desde los 23 años y con el que convive "relativamente bien", tal como ella misma ha dicho.