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Villana a su pesar

Patricia es una villana por reacción al ataque escasamente justificado de sus compañeros. Su historia de villana involuntaria resulta emocionalmente trágica.

Patricia escuchando a sus compañeros. telecinco.es

Analizar ‘realities’ es para el gato tan satisfactorio como formar parte de ellos para sus concursantes. El placer de ver frente al de ser visto.

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Patricia no es villana en esencia, las cosas la han llevado por ahí. Diría que es villana a su pesar. Como dice Jessica Rabbitt en ‘¿Quién engañó a Roger Rabbit?’: “No soy mala, me dibujaron así”. Aunque se me asemeja más en esto a ‘El Monstruo de Frankenstein’, personaje creado por Mary Shelley al que le convierte en “villano” la sociedad con el rechazo o su propio creador con el abandono al rechazar su apariencia y evadir su responsabilidad. El monstruo no tiene intención de hacer daño, quiere aprender, necesita afecto y observa el mundo con curiosidad infantil. La tragedia es que la sociedad decide quién y cómo es antes de poder decidirlo él mismo.

Son “villanos por reacción”, que cambian cuando sus intentos de integrarse fracasan sistemáticamente. Esto los acerca al espectador, dotándolos de un atractivo mayor que el de los “villanos por naturaleza”. Patricia me genera empatía. Sus decisiones, aunque equivocadas, me parecen comprensibles y su historia de villana involuntaria me resulta emocionalmente trágica. De cualquier modo, confieso que la prefiero así y no me hubiera interesado por una concursante diferente a la que hemos conocido. El giro que ha tomado su concurso la hace más humana y compleja, además de convertir su destino en impredecible.

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La villana no nace, se hace

Una lástima tener poco tan tiempo para seguir viendo la evolución de Patricia. No sabemos si terminará redimiéndose, traicionándose a sí misma, cambiando otra vez de grupo o caerá todavía más en la oscuridad, siendo aceptada por la mayoría como la gran villana de la edición. La villana no nace, se hace. Puede remitirse al principio de su concurso todo aquel que me discuta esta tesis. O pararse a hacer una reflexión sobre por qué Edurne solo confío en ella para contarle su ya desvelado secreto. También me parece destacable que esté siempre abierta a tender una mano a aquel con quien tuvo desavenencias. Lo hizo con Almudena, sin que esta lo aceptase. Más éxito ha tenido con Aroa porque ambas coincidieron en superar sus diferencias para intentar zanjar cualquier desacuerdo. Patricia se vio sorprendida cuando la mayoría de sus compañeros arremetía contra ella sin apenas esgrimir razones claras para hacerlo. Eso hizo que llevase su concurso por otro lado.

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Se muestra Patricia extremadamente susceptible ante la traición, lo cual también es entendible. Por el robo de leche se quiso vengar de Almudena, quien a su vez la consideró traidora por nominarla. Y no ha superado que Cristian lamentase la expulsión de José Manuel, de lo cual hablaré más tarde. Creo que tiene un concepto idealizado de la amistad. De hecho, se equivoca si confunde a sus rivales en el concurso con amigos. La mayor parte de decisiones que han cuestionado sus compañeros fueron por poner el listón de la lealtad demasiado alto considerando las circunstancias. Con todo esto no quiero decir que haya acertado o se haya equivocado, lo cual no tiene tanta importancia en el fondo.

Quien no parece villana de nacimiento ni se ha mostrado como tal es Belén. La expulsada anoche se tomó este contratiempo como el resto de su concurso, con alegría y positividad. Se marchó a bordo de un sidecar, como nunca había hecho. Pero lo hizo con una sonrisa, como casi siempre. Tengo la sensación de ir contracorriente en este Gran Hermano, pero no termino de entender que despierte tantas críticas la felicidad plena de Belén por vivir esta experiencia. O la peculiar manera de solventar sus diferencias (que las ha tenido). No todo el mundo tiene la mecha tan corta como Aroa o Patricia. Por suerte, hay quien se toma las cosas con otro espíritu.

Las malas (o no) influencias

Mucho se habla de que Joon ejerce sobre Cristian una influencia determinante a la hora de elegir con quién relacionarse e incluso al nominar. Algo parecido se dice de Desi y Rocío, pintando a esta última poco menos que como una marioneta en manos de su amiga. Pero poco o nada se habla de que Jonay y Edurne no discuten nunca la opinión del otro, o que anoche mismo nominaron exactamente igual. Si se trata de hablar de concursantes influenciables, veo mucho más en esa tesitura a estos dos últimos. Edurne negaba ayer que Desi y Rocío no tuvieran personalidad, explicando que la primera nominó a Íñigo y su amiga no. Con parecido argumento, serían ella y Jonay quienes no la tendrían por repartir sus votos de idéntica manera.

Patricia carga ahora contra el grupo de facto formado por Desi, Rocío, Joon y Cristian. Con ellos pudo hacer piña en su momento, pero un comentario de Cristian la echó para atrás de manera posiblemente definitiva. Tras la expulsión de José María el jueves pasado, lloraba Cristian mientras comentaba que el Míster era como un hermano pequeño suyo. A Patricia no le gustó que en lugar de alegrarse porque ella se salvase estuviera lamentando la expulsión de ese otro compañero. Esto ha hecho que Patricia se alejase de Cristian y compañía para ser la tercera pata en la relación entre Edurne y Jonay.

Patricia dice ahora que Rocío es muy posesiva con Desi hasta el punto de controlar sus acercamientos a los chicos. “Están en su círculo privado, en el que han metido a Joon y Cristian”, afirmó. No concibo que nadie pueda pensar en la idea de que Joon, Cristian y Desi se plieguen a los deseos de Rocío. Es cierto que veo a esta más espabilada de lo que aparenta y quiere hacer ver, pero de ahí a llevar por donde quiera a tantos compañeros creo que es simplemente una exageración. Sus nuevos mejores amigos, Edurne y Jonay le dan la razón a Patricia. Edurne cree que Cristian “tiene una relación rara con Joon” y Jonay cuenta que Desi le dijo que ella, Rocío, Joon y Cristian “son un pack”. Los cuatro del pack se salvaron anoche. Joon no obtuvo votos suficientes para salir a la palestra; Rocío y Desi ninguno, mientras Cristian era salvado. Pero esto va bajo el epígrafe siguiente.

Observatorio de nominaciones

Todos nominaron en el confesionario por primera vez en esta edición. Rocío arrancó la ronda y pudo ver después lo que hacían sus compañeros. Al final comunicaría los nominados según sus cuentas y hasta el jueves no sabrán el resultado real de lo sucedido anoche. Por otra parte, Edurne y Quili, como ganadores del baile por parejas, tuvieron un privilegio que estaba escrito en un sobre. Ambos se repartieron ambos sobres y el de Edurne permitía dar dos puntos extras mientras el de Quili solo dejaba añadir un punto. Así transcurrieron estas nominaciones, las más clásicas hasta ahora:

Rocío > Aroa (1), Jonay (2) y Patricia (3)

Patricia > Aroa (1), Quili (2) y Raúl (3)

Raúl > Patricia (1), Joon (2) y Cristian (3)

Jonay > Aroa (1), Quili (2) y Cristian (3)

Joon > Aroa (1), Quili (2) y Raúl (3)

Cristian > Jonay (1), Aroa (2) y Raúl (3)

Edurne > Aroa (1), Quili (2+2) y Cristian (3)

Aroa > Joon (1), Patricia (2) y Cristian (3)

Desi > Raúl (1), Patricia (2) y Jonay (3)

Quili > Joon (1), Jonay (2+1) y Patricia (3)

Nominados provisionales: Cristian (12), Patricia (11), Quili (10) y Raúl (10). Rocío no hizo bien la cuenta de los votos y pensaba que estaban nominados todos menos ella misma, Desi, Edurne y Cristian. No obstante, la tarjeta dorada le daba el poder de salvar a uno de ellos y se decantaba por Cristian. De forma que los nominados definitivos terminaron siendo: Patricia, Quili y Raúl.

La racha de Patricia se debió acabar el pasado jueves porque anoche resultó ser la más votada de los nominados definitivos y tiene muchas papeletas para ser expulsada a pesar del atractivo del que hablé antes. Además, Aroa volverá a sufrir al ver que tras la salida de Belén están en la palestra Quili y Raúl, aunque repito que eso no lo sabrán de cierto hasta el jueves. A pesar de la noche horribilis de Jonay y Cristian, se salvaron ambos una noche más.

Moleskine del gato

Todo el empeño que puso José Manuel (igual que Mamadou y Paula) en hundir a Jonay sirvió para poco en comparación con lo dicho por la inocente (entre comillas) Belén hablando del Míster que más ha exhibido la banda del concurso de belleza en toda su historia. Así, como quien no quiere la cosa, Belén comparaba José Manuel con su perra que “se come la basura”. Viene a ser una manera más o menos disimulada de llamarle “come mierda”.

Junto a la comparación de Belén me quedo con esa frase que he escuchado más de una vez utilizar a Cristian para expresar que alguien ha pasado de él o no ha querido darle conversación. Refiriéndose a Jonay asegura lo siguiente: “Le he dicho algo y me ha dejado en visto”. De doble check ni hablamos, claro.

Me parece sacar las cosas de quicio criticar a Aroa por decir que antes de entrar pidió a su padre no participar en el programa porque no tiene los dientes arreglados. Ahora no otorga importancia a eso y daría lo que fuera por abrazarlo o escuchar su voz desde plató. Con un poco de empatía es fácil ponerse en el lugar de Aroa e interpretar que estaba protegiendo a su padre para que no sintiera vergüenza por culpa suya. Me quedo con esa interpretación y no la que prefiere presuponer egoísmo o superficialidad por este motivo.

“Cuenta lo que me dijiste esta tarde de Íñigo” pidió Patricia a Edurne durante la última fiesta. Ella no se hizo de rogar y lo soltó todo, no diré que con pelos y señales porque tratándose de lo que se trata quedaría confuso y hasta ofensivo. Contestaba Edurne, aparentemente despreocupada: “Él me tocó el ***mino y entonces yo le agarré la **lla. Advertencia: no hacer el ejercicio de adivinar lo que esconden los asteriscos, y en caso de hacerlo se ruega no juntar en ningún caso esas cinco letras. ¡Gracias!

[Todas las imágenes de este texto han sido capturadas por el autor]