Lola y Palito, muertas de miedo al toparse con un banco de medusas: "¿Por qué hay tantas?"

  • Las concursantes han ido a buscar alimento a la playa vecina

  • Allí se han encontrado una desagradable sorpresa

  • Lola y Palito han encontrado una gran fuente de alimento dentro de un árbol

Lola y Palito han acabado con las existencias de Playa Destierro. Las concursantes están hambrientas, y tras rastrear cada esquina de la localización, no han encontrado víveres. Por eso, la extronista y la sobrina de Miguel Bosé han decidido explorar otras partes de la isla en busca de alimento.

Las supervivientes han bautizado la playa contigua a Playa Destierro como Playa Almendra, debido a la gran cantidad de frutos secos que contiene. Dentro del tronco de un árbol, Lola ha encontrado una impresionante número de almendras. "¡Parece el árbol de Pipi Langstrump!", gritaba muy emocionada la exparticipante de 'La isla de las tentaciones'.

Muy contentas, Lola y Palito han emprendido el camino de vuelta a Playa Destierro. Sin embargo, las concursantes no se esperaban la desagradable sorpresa que les tenía preparada el atardecer. En la orilla más cercana a su querida playa, las habitantes se han visto acorraladas por un enorme grupo de medusas. "¿Por qué hay tantas?", se quejaba Palito aterrada. "Que no cunda el pánico", ha dicho intentado tranquilizarse. Finalmente, las desterradas han conseguido llegar sin problpemas a la playa.

Lola asustada al encontrarse una barracuda

Este no es el primer encontronazo que las desterradas protagonizan con la fauna de los Cayos. En 'Conexión Honduras', Lola salió aterrorizada del agua tras encontrarse con una barracuda.

"Me acaba de pasar una movida... Aquí cuesta mucho pescar y he pescado uno pequeño. Ridículo. Entonces pensé en pescar otro y cuando he cogido uno ha venido una barracuda como una flecha de la nada y en lo que iba a coger el pez se ha llevado al pez, lo ha mordido moviéndose de un lado a otro. Y me he asustado y he salido del agua", contaba. "Cuando he vuelto a mirar con las gafas, el pez estaba muerto flotando y la barracuda mirando. He roto el sedal porque si me acerco me ataca. ¡Si lo llego a tener en la mano me arranca un dedo!", añadió.