Todo lo que debes saber para protegerte de la luz azul

  • La luz azul es un tipo de luz que forma parte del espectro visible y está formada por varias luces de diferentes colores

  • Es la luz que proviene de las pantallas de los dispositivos que usamos a diario, como la pantalla del teléfono móvil o el ordenador

Está estudiado que la luz azul tiene una irradiación con una longitud de onda similar a la luz ultravioleta. Esto supone algo negativo a largo plazo para la visión, pudiendo desencadenar así problemas como la miopía. Su uso en exceso a diario puede provocar dolor de cabeza y muchos otros síntomas:

  • Afecta al sueño y la digestión: se aconseja no usar dispositivos con luz azul antes de dormir, ya que puede provocar trastornos del sueño. Esto es debido a que la luz altera nuestro reloj biológico, descontrolando así el ciclo circadiano. Esta luz produce unos estímulos en nuestro organismo, que son los que hacen que se nos quite el sueño. También afecta a la digestión, ya que la luz azul produce cambios metabólicos en el organismo.
  • Repercute en el estado anímico: la luz azul se relaciona con los trastornos en el estado de ánimo. Como hemos mencionado anteriormente, repercute negativamente en el sueño, y esta alteración puede afectar de manera negativa en nuestro humor.
  • Puede dañar la piel y la salud del cuerpo y la mente: solo una pequeña fracción de luz azul es perjudicial. Sin embargo, tan solo esta pequeña fracción puede llegar a causar una disminución del colágeno y elastina de la piel, provocando así hiperpigmentaciones y rojeces cutáneas. Así pues, se aconseja utilizar medios de bloqueo de la luz azul para prevenir estos síntomas.
  • Produce perjuicios oculares: uno de los más conocidos es el síndrome visual informático. Este síndrome afecta a 2 de cada 3 personas entre 30 y 60 años, produciendo visión borrosa e irritabilidad. Se produce tras un largo periodo manteniendo la vista sobre una pantalla. Otro daño es el riesgo de degeneración macular, que puede derivar en una pérdida permanente en la visión. También fatiga ocular, que provoca dificultad para enfocar, escozor, dolor de cabeza e incluso vértigo. Y, por último, un desarrollo de la miopía. Además del factor hereditario, el esfuerzo desde edades tempranas y la sobreexposición a esta luz azul también potencian su aparición.

Si quieres más consejos sobre cómo combatir los excesos de estas fiestas con el mejor plan détox o informarte sobre lo último en cosmética BIO, no te pierdas el nuevo número de la revista 'Viva la vida'.

¡Ya a la venta!