En un desesperado intento por recuperar a Mariana, Sergi se apunta a un concurso de pesca con ella en el que acaba cometiendo un sacrilegio contra San Godofredo, el santo del pueblo, sin saber que existe la tradición de que el que ofende al santo es víctima de tres terribles desgracias. El cocinero se mofa del asunto, pero pronto empieza a sospechar que la leyenda se está haciendo realidad de la manera más inquietante.