Dos menores se graban mientras humillan a un hombre sin hogar quemándole el pelo en un pueblo de Sevilla: "Es una prueba de fuego"
La Guardia Civil ha identificado a uno de los menores implicados en el vídeo en el que se quema el pelo a un hombre sin hogar en Benacazón, Sevilla
Las imágenes, grabadas en un parque, muestran como uno de los menores quema el pelo a la víctima con un mechero mientras el otro graba la escena
SevillaLa Guardia Civil ha abierto una investigación después de recibir un vídeo en el que se aprecia cómo, al menos, dos menores se han burlado y han agredido a un hombre sin hogar hasta el punto de prenderle fuego al cabello. El vídeo, difundido en redes sociales, dura cerca de tres minutos y muestra la escena desde una distancia muy cercana, sin que ninguno de los agresores intente ocultar su rostro, nombre o voz.
Según fuentes del instituto armado, los agentes han identificado ya a uno de los menores que participa en la grabación. La víctima también ha sido identificada, aunque por el momento no ha podido ser localizada. La Guardia Civil mantiene aún sin confirmar la fecha exacta en la que se produjeron los hechos, a la espera de contrastarla directamente con el afectado.
Las diligencias han sido asumidas por el Equipo REDO, especializado en delitos de odio, dada la naturaleza del contenido del vídeo y las circunstancias de la víctima.
Un vídeo de extrema dureza
Las imágenes, de gran crudeza, muestran cómo uno de los menores se ha hecho pasar por un agente de policía mientras el otro ejecuta sus indicaciones. A lo largo de la grabación, el menor que sostiene el teléfono móvil va dando órdenes en tono de falsa autoridad, diciendo expresiones como: "Central, hay que quemar ya".
El otro chico obedece sin dudar, prende fuego al cabello de la víctima con un mechero y solo en una ocasión formula una pregunta: "¿Está bien, señor?". Pero la respuesta del menor que graba es tan firme como cruel: "Es una prueba de fuego, hay que quemar más".
En ningún momento se percibe reacción defensiva por parte del hombre, que permanece sentado en un banco mientras los menores continúan con la situación. "Con el poco pelo que tengo, encima me lo queman", acierta a decir, con tono tranquilo, en un momento de la agresión.
Investigación en marcha
La Guardia Civil está recopilando toda la información disponible para esclarecer los hechos, identificar al resto de implicados y ofrecer a la víctima asistencia y la posibilidad de denunciar formalmente.
Los menores de 14 a 17 años que cometen un delito de odio pueden ser sancionados con medidas judiciales en lugar de las penas de prisión y multa que se aplican a los adultos. Estas medidas varían según la gravedad del caso e incluyen opciones como internamiento, libertad vigilada, prestaciones en beneficio de la comunidad, tareas socioeducativas o amonestación