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La superficie de la Luna es cada vez más visible y dentro de nada tendremos el primer plenilunio del otoño. Concretamente, la noche del 1 al 2 de octubre, la del jueves, será la primera que podamos disfrutarla. Aunque no en toda España. En algunas zonas las nubes taparán la llamada ‘luna llena de cosecha’. Te contamos todo sobre el evento y dónde sí se dejará ver con seguridad.
Todas las lunas llenas del año esconden una historia. Tradicionalmente, los agricultores y cazadores se fijaban en el cielo nocturno para dar por comenzada la mejor época para sembrar, recolectar, o salir en busca de animales. De ahí que reciban nombres como ‘de cosecha’, ‘del maíz’, ‘de cazadores’, ‘de las flores’, etcétera. Otras se bautizan por otros motivos: luna azul, luna del castor, luna de la nieve…
En el caso de la luna de cosecha, no siempre se refiere a la misma. Mientras que unas veces da nombre al plenilunio de septiembre, otras lo hace en octubre. Todo depende de cuál se produzca más próxima al equinoccio de otoño, momento para los agricultores de recoger lo sembrado. En este caso se verá anaranjada porque se producirá cerca del horizonte poco después de ponerse el sol.
Este octubre hay dos lunes llenas, una al comienzo del mes y otra a finales, el día 31: la luna azul, que coincidirá con Halloween y se verá especialmente pequeña (contrario a una superluna) porque se encontrará en su apogeo (punto de su órbita elíptica más alejado de la Tierra).
Lo más seguro, según pronostica el modelo meteorológico europeo (ECMWF), es que las nubes cubran el cielo en el noroeste peninsular, y de hecho es probable que llueva en zonas de Galicia y Asturias la noche del jueves al viernes. Una borrasca se situará en el oeste de Francia, y alargará un frente, provocando fuerte oleaje en las costas de Galicia y el Cantábrico, y extendiendo las ráfagas de viento intensas tierra adentro hacia el resto de España.
En el resto del país lo más probable es que pueda verse la luna de cosecha, aunque en algunos momentos de la noche el cielo estará cubierto en el resto del Cantábrico, en zonas de Canarias y en el noreste peninsular.
Eso sí, abrígate si vas asomarte a la terraza porque el bajón de temperaturas será considerable y en algunas zonas la mínima no llegará siquiera a los 10 grados.