Un joven indio deja que 60.000 abejas cubran su rostro: "Son mis mejores amigas"

Un joven indio deja que 60.000 abejas cubran su rostro: "Son mis mejores amigos"
Nature M.S. con sus abejas. GWR
Informativos Telecinco
  • Lleva desde los siete años cubriendo ocasionalmente su cara con estos insectos

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Un apicultor indio de 24 años, identificado como Nature M.S, confía tanto en sus abejas que ha dejado a 60.000 de ellas cubrir totalmente su rostro. "Son mis mejores amigos. No son una amenaza", señala el joven, que lleva desde los siete años cubriendo ocasionalmente su cara con estos insectos. Sus amigos de la infancia en la localidad de Kerala quedaban impresionados, cuenta en una entrevista recogida por DailyMail.

Nature M.S. posee el récord mundial Guinness del tiempo más largo con la cabeza completamente cubierta de abejas: lo hizo durante cuatro horas, 10 minutos y cinco segundos en 2017. Incluso los apicultores experimentados pueden sufrir reacciones alérgicas peligrosas, pero el riesgo de picaduras en los labios o los párpados no preocupa a Nature -dice que él tiene la culpa de cualquier picadura en lugar de las abejas-.

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Su padre, conocido como Sajayakumar, un apicultor y productor de miel galardonado, le presentó por primera vez las zumbantes criaturas. Nature, que tiene un hermano que se llama Nectar, comentó que su primera experiencia de estar cubierto por las abejas fue cuando puso una reina en su mano. Su afecto por las abejas lo ha llevado a realizar estudios académicos en apicultura y actualmente está estudiando para ser maestro en una universidad de Bangalore, India.

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Incluso antes de saber que las picaduras de abejas son peligrosas, había desarrollado un vínculo especial con ellas. Sueña con obtener un doctorado en este campo para proteger a las abejas y aprender más sobre ellas, especialmente la cría de abejas.

"La primera vez cogí a la reina y se agolparon alrededor de mi brazo numerosos insectos en 15 minutos. Estaban buscándola para protegerla. Al día siguiente intenté un truco similar con la reina en mi cabeza y en cuestión de segundos toda mi cabeza quedó cubierta", relata.

"Mi padre siempre me ha aconsejado que elimine todo el miedo de mi mente, que no esté nervioso. Siempre he tratado con calma a las abejas, las trato como a un amigo. Mi padre también me aconsejó que respirara hondo y que nunca pierda la paciencia ni ceda ante el miedo", añade.

"No fue tan fácil las primeras veces, pero nunca me sentí incómodo. Me siento increíble. No tuve ningún problema nunca con ellas en mi cara. Puedo hablar e incluso caminar o bailar", asegura el joven, que junto a su padre ha lanzado una campaña en relación a la protección de estos animales y la importancia de la apicultura. "Sin las abejas, la tierra no podría sostenernos a todos", concluye.