Fórmula 1

Nuevo revés judicial para el circuito de Fórmula 1 en Madrid: un juzgado admite el recurso ecologista que cuestiona la licencia

El circuito de Fórmula 1 de Madrid ya tiene nombre: ‘Madring’
El recurso, presentado el 23 de junio, se dirige contra la licencia concedida por el Ayuntamiento para la construcción de la pista de Fórmula 1. Europa press
  • La Plataforma Ecologista Madrileña asegura que utilizará todas las vías legales para detener lo que considera “una amenaza ecológica y social” para la capital

  • Otras asociaciones ecologistas denuncian que la tramitación del circuito “refleja una grave falta de rigor urbanístico y ambiental”

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El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 22 de Madrid ha emitido un decreto por el que admite a trámite el recurso contencioso-administrativo presentado por la Plataforma Ecologista Madrileña, a través de la asociación Liberum Natura, contra la licencia otorgada para el circuito de Fórmula 1 en Ifema Madrid.

Requerimiento al Ayuntamiento

El recurso, presentado el 23 de junio, se dirige contra la licencia concedida por el Ayuntamiento para la construcción de la pista de Fórmula 1 y de sus instalaciones complementarias, según el decreto al que ha tenido acceso Europa Press.

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El juzgado ha solicitado al Consistorio que entregue el expediente administrativo completo relacionado con la licencia impugnada en un plazo máximo de 20 días. “La Administración comunicará a este Juzgado al remitir el expediente administrativo, si tiene conocimiento de la existencia de otros recursos contencioso-administrativos en relación con la misma actuación administrativa impugnada en este”, indica el decreto.

Un proceso urbanístico polémico

Antes de este recurso, la Plataforma ya había recurrido el Plan Especial que modifica la ordenación del recinto ferial de Ifema Madrid. Este primer recurso fue presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y admitido a trámite el 27 de mayo.

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Según denuncia la Plataforma, el procedimiento para autorizar el circuito ha sido “complejo, fragmentado y poco transparente”, con dos tramitaciones urbanísticas distintas pero simultáneas. Por un lado, se reordenó el espacio interno y externo de la parcela sur de Ifema, modificando aspectos clave como la edificabilidad, la eliminación de arbolado y la autorización de uso deportivo.

Circuito y licencia temporal

En paralelo, se ha tramitado el proyecto del circuito propiamente dicho, que afecta tanto a la parcela sur como a la norte (destinada a la ampliación futura de Ifema desde 2021) y al viario público. En conjunto, “el circuito atraviesa ámbitos urbanísticos distintos, con normativas y condiciones específicas, lo que genera un escenario legal muy complejo. Un auténtico puzle de difícil encaje jurídico y urbanístico”, subraya la plataforma.

La licencia recurrida corresponde a la primera fase del proyecto, que incluye la construcción de la pista, la urbanización de las parcelas afectadas y el acondicionamiento de los viales públicos.

Costes y críticas ambientales

A esta complejidad se suma el carácter temporal del circuito, que “deberá desmantelarse dentro de diez años”, según lo previsto. Para ello, el Ayuntamiento ha otorgado una licencia temporal de actividad, “similar a las que se otorgan para la instalación de carpas durante fiestas de barrio”, critican los ecologistas.

El coste total del proyecto asciende a 189,8 millones de euros, sumando los 142,3 millones del circuito y los 47,5 millones del plan especial. La licencia definitiva no se concederá hasta pocos meses antes del Gran Premio de Fórmula 1, previsto para el 26 de septiembre de 2026.

Continuarán las acciones legales

Las asociaciones ecologistas ARBA, El Soto, GRAMA, Jarama Vivo y Liberum Natura denuncian que la tramitación del circuito “refleja una grave falta de rigor urbanístico y ambiental” y critican que se esté ejecutando mediante licencias “fragmentadas y provisionales, sin una evaluación integral del impacto ni una garantía real de reversibilidad”.

La Plataforma Ecologista Madrileña, integrada en Stop F1 Madrid, ha asegurado que seguirá recurriendo “lo que considera una amenaza ecológica, urbanística y social para la ciudad de Madrid”.