Muere a los 15 años la prometedora patinadora italiana Matilda Ferrari al ser atropellada por un camión hormigonera

Muere a los 15 años la prometedora patinadora italiana Matilda Ferrari al ser atropellada por un camión
Imagen de Matilda Ferrari. RRSS
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El mundo del patinaje artístico llora la repentina pérdida de Matilda Ferrari, una joven italiana de apenas 15 años cuyo sueño era algún día representar a su país en unos Juegos Olímpicos. La adolescente falleció el pasado lunes en Giustino, un pequeño pueblo del Valle de Rendena, en Trentino, tras ser atropellada por un camión hormigonera cuando se dirigía al instituto.

El accidente ocurrió a primera hora de la mañana, cuando Matilda cruzaba la carretera por un paso de peatones para llegar a la parada del autobús escolar. Según informaron los medios locales, el camión circulaba con el semáforo en verde y el conductor no tuvo tiempo de frenar para esquivarla.

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Pese a la rápida ayuda de dos médicos del pueblo y la intervención del equipo de rescate que llegó en helicóptero, nada pudo hacerse para salvarle la vida. El conductor, en estado de shock, también tuvo que recibir asistencia médica y psicológica. Las autoridades han abierto una investigación para esclarecer con exactitud las circunstancias del suceso. Así lo apuntan fuentes locales como 'Tgr Rai'.

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Una joven dulce, alegre y valiente, siempre dispuesta a trabajar duro y a no rendirse

Matilda formaba parte del Sporting Ghiaccio Artistico Pinzolo, club en el que se había convertido en un referente para sus compañeras gracias a su constancia y dedicación. Su sueño olímpico se traducía en una entrega diaria sobre el hielo, incluso después de haber estado de baja recientemente por un problema de rodilla. A pesar de ello, logró subir al podio en su categoría y la temporada pasada conquistó un meritorio tercer puesto en la final de la Copa de Italia de Oro.

Además de su carrera individual, en el último año había pasado a formar parte del equipo sincronizado Ice Secret, con el que compartió actuaciones, entrenamientos y momentos de alegría. Sus compañeras y entrenadores la describen como una joven dulce, alegre y valiente, siempre dispuesta a trabajar duro y a no rendirse ante las dificultades.

En un emotivo comunicado publicado en redes sociales, su club la recordó con palabras cargadas de cariño: "Fuiste una patinadora increíble, con tanta pasión y determinación, tenías grandes sueños y nunca perdiste tu sonrisa. Siempre patinaremos por ti, recordándote cada día por tu energía y dedicación". Para los más jóvenes del club, y en especial para su hermana pequeña Greta, Matilda era un ejemplo a seguir. Su ausencia deja un vacío enorme en la pista de hielo, pero también el recuerdo imborrable de una chica que vivió con intensidad cada entrenamiento, cada reto y cada sueño.