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La imagen recuerda a la caída de Lehman Brothers en 2008. Ya exempleados con cajas fuera y lágrimas en el interior de la sede de Londres. Comienzan los despidos en Deutsche Bank. Desde este mediodía, los trabajadores de la City de Londres reciben una llamada que determina el riesgo de que sean despedidos. Después, el departamento de Recursos Humanos les da el día libre, según relata el Financial Times. Es el modus operandi de lo que muchos analistas consideran como la apuesta final por salvar la entidad que ha anunciado pérdidas de 2.800 millones de euros en el segundo trimestre engordadas, precisamente por los gastos de reestructuración.
A la central de Londres ha llegado un pedido de unas 700 pizzas para lo que se prevé un día muy largo.
En total, el gigante bancario alemán va a eliminar 18.000 empleos en tres años, uno de cada cinco de la plantilla. Fuera las oficinas de Asia y el departamento de banca de inspección. Deutsche Bank quiere ahorrar 17.000 millones de euros en 2022. Los despidos comienzan a hacerse efectivos también en Nueva York. Los empleados, incluso los que tenían el día libre, han sido convocados al auditorio de la central neoyorkina par comunicarles su futuro profesional.
En una carta dirigida a los empleados, Christian Sewing, consejero delegado del banco, les ha transmitido que "Personalmente, lamento el impacto que va a tener en algunos de ustedes. En el interés de nuestro banco a largo plazo no tenemos otra alternativa que efectuar esta transformación decisiva"
En abril no prosperó la fusión con el Commerzebank, en la que el estado alemán había depositado todas sus esperanzas para crear un gran gigante de la banca industrial. Finalmente los dos bancos dieron por cerradas las conversaciones porque la operación tenía mucho riesgo. Era el fin de la esperanza de terminar con años de caída de la banca de inversión del Deutsche.
A pesar del varapalo en el empleo de la firma, Deutsche Bank va a seguir adelante con los planes de construir su nueva sede central en Londres.
Con el cierre de la división de banca de inversión de Deutsche, Barclays se queda ahora como la única firma europea en el segmento, compitiendo con los gigantes americanos como Goldman Sachs, JP Morgan y Morgan Stanley.