Así, durante una entrevista concedida a EFE, Méndez aseguró que los problemas "razonables" que plantea la CEOE "estaban resueltos", mientras que en determinadas cuestiones que había que precisar algo más "los sindicatos estábamos en disposición de hacerlo".
Como ejemplo citó que, entre otros aspectos, los sindicatos estaban dispuestos a analizar cómo dar más flexibilidad a las cláusulas de aplicación salarial.
Según Méndez, los sindicatos no son los que están demorando el Acuerdo para la Negociación Colectiva (ANC) y el problema, tanto en este ámbito, como en el del Diálogo Social, se ha producido porque la CEOE ha pretendido incorporar en esas discusiones varios objetivos estratégicos.
Entre ellos citó el abaratamiento del despido, el control del absentismo por parte de las mutuas o la rebaja "generalizada y muy fuerte" de las cotizaciones sociales.
Los empresarios plantearon "una especie de vinculación a la totalidad", explicó Méndez, es decir, vincularon el diálogo tripartito (las mesas del Diálogo Social entre Gobierno, patronal y sindicatos) con el bipartito (la negociación colectiva entre empresarios y sindicatos).
En este sentido, el líder de UGT dejó clara la postura de su sindicato frente al ANC y su "radical desacuerdo" con que el Gobierno intervenga en la negociación colectiva.
Méndez defendió la labor llevada a cabo hasta el momento para luchar contra la crisis y aseguró que ningún gobierno europeo ha puesto en marcha un paquete de medidas tan numerosas como las diseñadas por España.
No obstante, a juicio de Méndez, el Ejecutivo debe definir con mucha mayor nitidez los mensajes y "probablemente" tenga que ampliar los márgenes de la política económica.
El Gobierno, añadió, necesita un impulso político "pero eso no tiene por qué ser sinónimo de cambio en las personas", subrayó.
Para Méndez, se está produciendo una situación "paradójica" ya que mucha gente tiene la sensación de que "no se ha hecho nada", cuando el Ejecutivo español es uno de los gobiernos europeos "que más ha hecho contra la crisis" y, sin embargo, "hay una carencia de conexión entre lo que se hace y el mensaje político".
El secretario general de UGT también se refirió al absentismo, uno de los problemas en los que no hay acuerdo con la patronal, porque, dijo, los empresarios en vez de intentar atajar sus causas "lo que quieren es que las mutuas ejerzan de policía contra los trabajadores", algo que desde el punto de vista legal Méndez considera "discutible".
En su opinión, el absentismo tiene que ver con los "deficientes modelos de la organización del trabajo", ya que, según explicó, el problema de la economía española es la productividad y criticó que "muchísimas empresas que pretenden solucionarlo con el alargamiento de la jornada".
"La discusión de absentismo-presentismo sería muy interesante" añadió, y abogó por abrir una discusión de fondo sobre este asunto ya que España es uno de los países de Europa con mayor jornada laboral y, sin embargo, de los menos productivos.
A pesar de todo, Méndez espera recuperar las negociaciones en las próximas semanas, una vez pasadas las elecciones de la CEOE y la casi segura reelección de Gerardo Díaz Ferrán como presidente.
Aunque advirtió de que "observará los comportamientos y las propuestas de los empresarios" tras la elecciones en la patronal, Méndez confió en la apuesta por el diálogo social que sindicatos y empresarios europeos y españoles, incluidas CEOE y CEPYME, hicieron la semana pasada en la Cumbre Social tripartita de Bruselas.
Si la patronal distingue lo que es "su programa de máximos" de lo que son medidas contra la crisis, para evitar la destrucción de empleo, para la reactivación económica o para el cambio de modelo productivo "creo que podemos llegar a acuerdos", añadió.