Europa contará con un masivo fondo de reconstrucción poscrisis

  • Bruselas acuerda movilizar al menos 1,5 billones de euros. De ese dinero habrá un porcentaje que se destine a ayudas directas

  • El total de los planes europeos pueden superar los 3,5 billones de euros, el 25% del PIB de la UE

Europa se construye paso a paso. Los dirigentes nacionales ahogaron este jueves a las casandras del pesimismo y dieron su visto bueno a la creación de un masivo fondo de reconstrucción post-crisis para paliar los efectos económicos de la crisis del coronavirus.

Los 27 están de acuerdo en lo esencial y esperarán a que la Comisión Europea presente el próximo seis de mayo una propuesta detallada. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, reconoció que se movilizarán “billones” y que habrá “un equilibrio inteligente” entre préstamos al estilo del fondo de rescates y ayudas directas como los fondos de cohesión.

Lagarde cree que la recesión puede llegar al 15%

La sensación de urgencia y de contar con un fondo masivo es unánime. Más de 100.000 muertos europeos después, la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, advirtió al inicio de la cumbre que la economía europea podría llegar a caer este año un 15% y que se corría el riesgo de hacer “demasiado poco, demasiado tarde”. Su peor año desde la Segunda Guerra Mundial, 2009, vio una contracción del 4,3%. Merkel había dado su visto bueno por la mañana al advertir al Bundestag que Alemania estaba dispuesta a aumentar “considerablemente” su contribución a los presupuestos europeos y que el fondo europeo de reconstrucción debía ser “enorme”.

Aumento del presupuesto europeo y emisión de deuda por parte de la Comisión

La idea, adelantada ayer, consiste en aumentar el techo de gasto del presupuesto europeo del 1,2% al 2,0% del PIB de la UE y de apalancarse en los mercados con una emisión de deuda de la UE (que no es lo mismo que deudas nacionales mutualizadas) por valor de 323.000 millones de euros, la mayor de la historia de la UE. Los Estados miembros podrían acceder a ayudas directas (que no se devuelven) y a préstamos, que gracias a la calificación crediticia AAA de la Unión Europea (la más alta), serían a intereses más baratos que los que pueden esperar en los mercados países como España o Italia.

Muchos analistas empiezan a advertir que no habrá demanda suficiente si todo se limita a préstamos. Gregory Claeys, de Bruegel, explicó que “dada la profundidad de la recesión necesitaremos política fiscal, gasto, para alimentar directamente la demanda agregada en la primera fase de la recuperación”.

La emisión de deuda por parte de la Comisión Europea le serviría para apalancarse en los mercados y conseguir movilizar una cantidad que sería de un mínimo de 1,5 billones de euros o algo superior. Sumado al aumento del presupuesto comunitario el plan se acercaría a los dos billones de euros.

Bruselas y el equilibrio casi imposible

La Comisión Europea debe trabajar ahora para contentar a todos los países con su plan definitivo. Su primera misión será encontrar ese “equilibrio inteligente” entre ayudas directas y préstamos. La segunda decidir cuál debe ser el montante del entramado que organice, pero su intención es que supere los 1,5 billones.

El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo tras la cumbre que la respuesta debe incluir ayudas directas y no sólo préstamos. Es la idea que lanzó hace unos días España pues hasta ahora la única propuesta de fondo de recuperación, la francesa, sólo incluía préstamos.

Protección del mercado común

Se trata de evitar lo sucedido tras la crisis financiera de la pasada década, cuando algunos países salieron de la misma con un formidable aumento de deuda pública. Los países del Sur no quieren engordar mucho más sus deudas y los del Norte no quieren entregar muchas más ayudas directas. Pero no todo es negro y blanco y en esos grises Von Der Leyen deberá encontrar el equilibrio. Al Norte le interesa mantener un mercado común potente y en el sur hay países como Italia que son contribuyentes netos al presupuesto europeo, o como España, que podría serlo en pocos años.

La propuesta busca también que no se produzcan diferencias muy grandes entre las ayudas que cada país puede dar a sus empresas después de haberse flexibilizado la normativa de control de ayudas de Estado. Von Der Leyen dijo que habrá “efectos masivos sobre la igualdad de condiciones salvo que tomemos medidas para contrarrestarlo”. La estabilidad del mercado común es de interés primordial para los países del Norte, los grandes beneficiarios del mismo.

Hasta 3,5 billones de euros

Los dirigentes también dieron su visto bueno a los otros tres planes aprobados ya por el Eurogrupo, que movilizarán 540.000 millones de euros:

  • 200.000 millones del Banco Europeo de Inversiones para prestar a pymes.
  • 240.000 millones para prestar a través del MEDE sin la condicionalidad de la troika.
  • 100.000 millones para respaldar el gasto de los ERTE.

Además, el Banco Central Europeo tiene, sólo para este año, 1,1 billones de euros para comprar emisiones de deuda pública y privada sin apenas limitaciones después de que en las últimas semanas decidiera que se saltará su norma de no comprar más de un tercio de cada emisión y este miércoles anunciara que los Tesoros nacionales podrán usar como colateral todos sus bonos, aún los calificados como “basura” por las agencias de calificación de deuda.

La suma de los planes ya aprobados, de los fondos movilizados por el Banco Central Europeo y del dinero que pude inyectar con el futuro fondo de reconstrucción puede sumar aproximadamente 3,5 billones de euros, el equivalente al 25% del PIB de la UE.

¿Ayudas a terceros países?

España, según fuentes nacionales, pidió un apoyo especial a la agricultura y que Europa piense en sus vecinos con menos capacidad, como había hecho ya hace semanas el Alto Representante, Josep Borrell. Madrid insistió en que se avance en la moratoria del pago de la deuda de los países en desarrollo que se discute en el marco del G20 y que el FMI les facilite liquidez. Más de 90 países han acudido en las últimas semanas a la ventanilla del Fondo. También pidió España una mirada especial para América Latina.