El euríbor se dispara y pone fin al debate de las hipotecas con intereses negativos

  • A fecha de hoy, 29 de marzo, el euríbor a 12 meses se encuentra en un -0,259% de media tras dispararse un 23% desde febrero (-0,335%)

  • El euríbor, el índice de referencia de las hipotecas variables más utilizado en España, lleva seis años en negativo

  • Una hipoteca es negativa cuando la suma entre euríbor y diferencial está por debajo de cero

El euríbor, el índice de referencia de las hipotecas variables más utilizado en España, lleva seis años en negativo. En febrero de 2016 (-0,008%) bajó por primera vez del cero e, incluso, durante el 2021 llegó a superar la barrera del -0,5% en tres ocasiones: enero (-0,505), febrero (-0,501%) y diciembre (-0,502%). Esto provocó que algunas entidades bancarias ofertaran hipotecas variables a sus clientes en las que era el propio banco el que debería pagar intereses al cliente, y no a la inversa, como suele ser habitual cuando se concede cualquier préstamo.

Para entender esta situación anómala hay que saber que la fórmula para calcular los intereses a pagar por las hipotecas variables es euríbor + diferencial. El primero es volátil y todos los meses se actualiza, y el segundo se pacta con el banco a la hora de firmar el préstamo hipotecario y es igual para toda la vida.

Por ejemplo, como se explica en el Índice iAhorro, informe publicado el pasado mes de enero por el comparador hipotecario, “si hubiéramos negociado un diferencial del 2% y en diciembre, cuando el euríbor se encontraba en -0,502%, el tipo de interés al que pagaríamos la hipoteca sería del 1,498% en ese momento”. Eso sí, hay que tener en cuenta que las cuotas (amortización + intereses) que se pagan por una hipoteca variable se revisan normalmente de forma anual, aunque también se puede pactar una revisión semestral a la hora de firmar el préstamo hipotecario, y cambian en función de los valores que marque entonces el euríbor a 12 meses.

¿Cuándo una hipoteca es negativa?

Una hipoteca es negativa cuando la suma entre euríbor y diferencial está por debajo de cero. Es decir, si el cliente hubiera contratado una hipoteca a un diferencial del 0,5% y le correspondiera hacer la revisión anual de las cuotas el pasado mes de diciembre (con un euríbor del -0,502%), los intereses que le tocaría pagar serían de un -0,002%. Al ser estos negativos, no solo no abonaría intereses al banco, sino que sería

el banco quien le tendría que pagar intereses al cliente.

Fue precisamente el año pasado, cuando el euríbor alcanzó los valores más bajos de su historia, cuando se abrió el debate de si, en caso de resultar la hipoteca negativa, el banco debería pagar o no intereses al titular del préstamo en cuestión.

La mayoría de las entidades bancarias negaban la posibilidad de remunerar al cliente en estos casos, al considerar que el interés que cobran por conceder un préstamo hipotecario es, precisamente, la contraprestación por usar una cuantía de dinero que la entidad previamente ha cedido. Así, argumentaban, si tuviesen que devolver los intereses, el contrato quedaría privado de causa válida, dado que no pueden verse obligados a pagar por prestar dinero. Sin embargo, en aquellos contratos en los que no había una cláusula en la que se especificara que el tipo límite era cero, los clientes sí que tenían la posibilidad de reclamar por el dinero que les correspondía.

¿En qué situación estamos ahora?

“Posiblemente este 2022 lleguemos a cero e, incluso, podríamos terminar el año en positivo”, asegura el director de Hipotecas de iAhorro, Simone Colombelli. Es por ello que la situación de anomalía para las hipotecas negativas parece haber terminado.

A fecha de hoy, 29 de marzo, el euríbor a 12 meses se encuentra en un -0,259% de media tras dispararse un 23% desde febrero (-0,335%), casi un 50% desde diciembre de 2021 y más de un 47% desde marzo del año pasado (-0,486%). Por ello, quienes tengan que hacer ahora la revisión anual de sus hipotecas variables verán cómo su cuota sube de forma significativa, entre 15 y 30 euros al mes, lo que estaría entre unos 170 y 340 euros anuales.

Es más, siguiendo con el ejemplo anterior, con un diferencial de 0,5% pactado con el banco y un euríbor como el actual del -0,259%, el cliente pagaría un 0,241% de intereses por su hipoteca cuando hace unos meses le saldría a devolver.