Requisitos a cumplir para recibir entre 800 y 5.000 euros de ayuda para cambiar de coche

  • El parque automovilístico español tiene una media de 13 años

  • Para acceder a las ayudas habrá que achatarrar un vehículo de más de 10 años

  • Los ayuntamiento podrán liberar parte de su superávit en comprar nuevos vehículos

El Gobierno dará ayudas para la compra de vehículos de todas las tecnologías por valor de 1.050 millones de euros, de los que 550 millones corresponden a ayudas directas. El anuncio lo ha realizado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la presentación este lunes de un plan integral para el sector de la automoción, dotado con 3.750 millones de euros, que incluye ayudas para la renovación del parque de vehículos y tendrá entre sus metas avanzar en la transición ecológica y la creación de puestos de trabajo.

Las ayudas y sus condiciones

Serán entre 800 y 5.000 euros de ayuda para cambiar el coche. El plan aprobado por el Gobierno para la compra de vehículos de todas las tecnologías prevé ayudas que oscilan entre 400 y 4.000 euros para la compra de turismos por parte de particulares y autónomos en función de las etiqueta ambiental de la Dirección General de Tráfico (DGT) (Cero, Eco o C) y su clasificación ambiental (A y B). Estas cuantías se incrementarán en 500 euros en el caso de que el destinatario sea una persona física con una renta inferior a 1.500 euros o con movilidad reducida, o el vehículo a achatarrar tenga más de 20 años.

Además, las empresas se han comprometido a dar un descuento de la misma cuantía que la ayuda estatal, excepto en caso de los vehículos de etiqueta CERO, en que será de 1.000 euros, según el plan de ayudas, previsto para vehículos de hasta 35.000 euros (45.000 euros en caso movilidad reducida o rentas menores). Según recoge la memoria del plan, en el caso de particulares y autónomos, las ayudas de cuantía más elevadas, 4.000 euros, serán para vehículos con etiqueta "Cero" (eléctricos), mientras que para el resto (híbridos o combustión) se prevén ayudas de 1.000 euros (Eco-A), 800 euros (C-A), 600 euros (ECO-B) y 400 euros (C-B

Eso sí habrá una serie de condiciones. Para poder acogerse al plan habrá que enviar al desguace un coche con al menos de 10 años de antigüedad. Y que el modelo que se compre tenga unas emisiones de CO2 inferiores a los 120 gramos por kilómetro, con etiquetas de eficiencia energética A o B (las concede el Idae y las puede consultar aquí), y C, Eco o Cero de la DGT. El vehículo a adquirir podrá tener un precio máximo de 35.000 euros en el caso de los turismos, aunque esa cifra se eleva a los 45.000 euros para las personas con movilidad reducida o vehículos con etiqueta CERO.

En el caso de las pymes, las ayudas para la adquisición de turismos oscilan entre 3.200 y 350 euros, mientras que en el de las grandes empresas van desde 2.800 a 3.200 euros. En cuanto a vehículos comerciales ligeros de menos de 2.500 kilos, las ayudas a particulares y autónomos será de 4.000 (Cero), 1.200 (Eco) y 1.000 euros (C), las de pymes oscilarán entre 3.200 (Cero), 950 euros (Eco) y 800 euros (C) y las de grandes empresas entre 2.800 (Cero), 850 (Eco) y 700 (C) euros.

Para los vehículos comerciales de más de 2.500 kilos de MMTA, las ayudas para particulares y autónomos serán de 4.000 (Cero), 2.100 (Eco) y 2.100 (C) euros, las previstas para pymes de 3.200 (Cero), 2.200 (Eco) y 1.700 (C) euros y las fijadas para grandes empresas de entre 2.800 (Cero), 1.900 (Eco) y 1.500 (C) euros.

Francia y España encabezan las ayudas de Europa al sector de la automoción. El presidente francés, Emmanuel Macron, presentó el 26 de mayo un plan de ayuda al sector dotado con 8.000 millones, en el que se incluía un aval estatal para que Renault obtuviera un préstamo de 5.000 millones, lo que no evitó que tres días después la compañía planteara suprimir 15.000 empleos, el 8 % de su plantilla mundial. A cambio del respaldo estatal, los fabricantes franceses (PSA y Renault) se comprometieron a invertir 1.000 millones para fijar en Francia las actividades de más valor añadido de los eléctricos.

Hoy Sánchez ha hecho lo propio. Las ayudas para la compra de coches serán efectivas desde mañana. Los compradores para beneficiarse de los incentivos tendrán que entregar un vehículo de más de 10 años para su achatarramiento y que el nuevo esté entre los más eficientes del mercado. Los incentivos a la compra forman parte del plan de impulso al sector de la automoción presentado este lunes en Moncloa, está dotado de 3.750 millones de euros, de los que 300 millones irán a la renovación del parque público, infraestructuras de recarga, adaptación de las ciudades a nuevas necesidades de movilidad y la electrificación del transporte .

El plan incluye 20 medidas de tipo económico, fiscal, normativo, logístico, de formación y cualificación profesional, de compra pública sostenible y de planificación estratégica que dan cobertura a toda la cadena de valor de la industria.

Del monto total, 100 millones estarán destinados a la puesta en marcha del Programa de Impulso a la Movilidad Eléctrica y Sostenible (Moves), orientado a incentivar la compra de coches de energías alternativas y eléctricos, lo que supone un incremento presupuestario en comparación con la intención anterior que era de 65 millones de euros.

Según cálculos del Gobierno, cada millón destinado al Plan Moves supondrá la generación de entre 3,6 y 4,1 millones de euros adicionales al Producto Interior Bruto (PIB) nacional y un aumento de los ingresos fiscales de entre 1,5 y 1,6 millones de euros.

Por su parte, el paquete de medidas habilita 250 millones de euros para la renovación del parque hacia uno más "sostenible y eficiente", con ayudas a la adquisición de modelos "más limpios y más seguros", pero aplicando el criterio de "neutralidad tecnológica".

Asimismo, se movilizarán 2.650 millones de euros para inversiones en la cadena de valor de la industria entre 2020 y 2022, mientras que se destinarán 415 millones para investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) y 95 millones para generar nueva mano de obra cualificada y adaptar la ya existente a las nuevas necesidades.

"Se trata de hacer lo que haga falta para amortiguar las enormes pérdidas del sector en el ejercicio 2020 mientras sentamos las bases de la industria del mañana: una industria que saldrá fortalecida de la mano de la electrificación y la digitalización y que contribuirá a que nuestro país avance en la senda de la transición ecológica justa", ha indicado Sánchez.

El paquete de medidas pretende atraer las inversiones necesarias para adaptar y orientar la industria hacia las nuevas demandas de los mercados y los objetivos de sostenibilidad, por lo que, por ejemplo, se adaptarán las condiciones de la línea de préstamos del Plan de Reindustrialización modificando a la baja los tipos de interés de los préstamos (0,1% para pymes y 0,19% para las grandes empresas, el primer año), y ampliando los conceptos elegibles a las inversiones y retroactividad para los proyectos iniciados desde el 1 de marzo de 2020.

La flota de la Administración también se renovará

La renovación del parque de vehículos también incluye la renovación de la flota de vehículos de la Administración General del Estado por vehículos con etiqueta 'Cero' y el despliegue de infraestructura de recarga de vehículo eléctrico.

El plan incluye medidas de financiación "especialmente" para vehículos eléctricos y ayudas para que las familias con menos recursos no se queden "atrás", mientas que empresarios y trabajadores autónomos se beneficiarán a través de "ahorros en combustible", ya que se facilitará la renovación del parque de vehículos para que sea más eficiente.

Sánchez ha destacado que el Gobierno ha trabajado con el sector para elaborar un plan que pretende dar respuesta a sus necesidades y avanzar en la transición ecológica, es decir, que pretende "acompañar" a la industria en su adaptación a la movilidad sostenible manteniendo la competitividad.

El presidente ha destacado que de esta manera se defiende un sector que supone una décima parte del PIB y emplea a unos dos millones de trabajadores de forma directa o indirecta.

"Los vehículos del futuro se parecerán muy poco a los del pasado en lo que se refiere a la incidencia en el medio ambiente", ha señalado, al tiempo que ha subrayado que este plan va en línea con el objetivo de lograr cero emisiones en 2050.

El sector ha defendido hasta ahora la necesidad de que las ayudas respeten la neutralidad tecnológica -es decir, que no discrimine los vehículos de diésel o gasolina- y ha reclamado que se pueda acceder a ellas desde su publicación en el BOE, ya que muchos consumidores están retrasando la decisión de compra para poder acogerse a la medida.

El sector pide urgencia en las ayudas

Por su parte, el sector del automóvil ha pedido que el plan integral para el sector de la automoción se implemente de forma "rápida y sencilla" para poder activar cuanto antes los mercados y la actividad en las fábricas, y, en concreto, los fabricantes han pedido que no se dude del compromiso de las diferentes marcas con España.

En el acto en el que se ha presentado este lunes el plan, dotado con 3.750 millones de euros, en el Palacio de la Moncloa, el presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles (Anfac), José Vicente de los Mozos, ha insistido en la necesidad de que el plan se implemente de forma rápida y sencilla para conseguir la reactivación del sector.

De los Mozos, que también es presidente de Renault España, ha dicho que no hay que dudar del compromiso de las diferentes marcas con el país y ha añadido que "estamos y queremos seguir estando" en España.

José Vicente de los Mozos, que ha recordado que la competitividad es lo único que nos defiende fuera de España, también ha señalado que desde que el sector de la automoción presentó el pasado 2 de marzo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la pandemia del Covid-19 ha cambiado la situación de los mercados, reduciéndose en un 50 % las ventas respecto al año anterior.

Ha explicado que, aunque la situación no cambia la visión que el sector presentó en el plan que presentó a primeros de marzo para el periodo 2020-2040, hay que adaptarla, en el corto plazo, a esa nueva situación de los mercados.

Además, ha recordado que el problema de sobrecapacidad instalada que tiene la industria del automóvil se ha visto incrementada con la crisis generada por la pandemia.

De los Mozos ha dicho que el plan que se presenta hoy muestra que España es un país que lucha por mantener la industria del automóvil y ha subrayado que el plan da respuesta a la renovación del parque automovilístico, lo que acelera la descarbonización, y además ha destacado que impulsa el vehículo eléctrico.

Por su parte, el presidente de la patronal de concesionarios oficiales, Faconauto, Gerardo Pérez, ha afirmado que el plan va a traer muy buenas noticias en los próximos meses.

Gerardo Pérez, que ha recordado que las 2.200 empresas concesionarias de automóviles emplean de forma directa a 161.500 trabajadores, ha añadido que necesitan recuperar a todo su personal, que es cualificado y al que no van a "dejar escapar".

El presidente de Faconauto se ha mostrado seguro de que con la dinamización que se conseguirá con el plan se conseguirá recuperar el empleo que había anterior a la crisis, después de que tuvieran que acogerse a ERTE por causa mayor para proteger el empleo.

Pérez ha dicho también que el plan dado a conocer hoy acerca más el vehículo eléctrico a la demanda de los clientes y es un plan que "no deja a nadie atrás", con un incentivo acelerado para las rentas bajas, al tiempo que ha agradecido al Gobierno que haya aprobado un plan Renove de 8 millones de euros para la renovación del parque de vehículos agrícola español.

Por su parte, la presidenta de la patronal de componentes de automoción Sernauto, María Helena Antolín, ha valorado que el plan incentive fiscalmente la innovación de procesos y ha dicho que permitirá traer más modelos a España y que la industria de componentes española sea más competitiva, al tiempo que ha señalado que sería un mecanismo muy potente la flexibilidad en la amortización de inversiones.

El director general de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso al Vehículo Eléctrico (Aedive), Arturo Pérez de Lucia, ha dicho que España cuenta con una base de fabricación de vehículos eléctricos, pero no es suficiente, y uno de los retos que hay es reforzar esa apuesta.