Nueve años de crisis para los pobres y solo tres para los ricos

  • Los hogares con niños tienen más riesgo de pobreza

  • Pese al crecimiento de la economía, la pobreza se mantiene

  • El aumento del empleo no contribuye a la disminución de la pobreza

La crisis se estira como un chicle para los que perciben menos ingresos. El cincuenta por ciento de los que más ganan tardaron apenas tres años en salir del bache económico. El 25% más pobre lleva el triple, nueve años. Y ahí sigue. "La recuperación es más lenta para los grupos más pobres que no llegan todavía a la renta media de 2008 en términos nominales. Si tenemos en cuenta el IPC, su situación es peor todavía" apunta Juan Carlos Llano, sociólogo autor del estudio ‘El Estado de la Pobreza. España 2019 IX Informe anual sobre el riesgo de pobreza y exclusión’ de EAPN España (Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, por sus iniciales en inglés).

Estamos lejos de decir adiós a la pobreza. Uno de cada cuatro españoles se encuentran en riesgo de pobreza o de exclusión social. En total son más de 12,3 millones de personas. En el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, los datos dejan poco espacio al optimismo. Según EAPN España la pobreza relativa ha aumentado ya que hay colectivos a los que no les llega una mejoría económica.

Tener un empleo "maquilla" los datos

El informe de EAPN España muestra la evolución de la pobreza y la exclusión social mediante el estudio AROPE (en riesgo de pobreza y de exclusión, por sus iniciales en inglés) y de sus componentes, entre los años 2008 y 2018. Para determinar la pobreza no se tienen en cuenta, únicamente, los ingresos. Además, en este indicador entran en juego la carencia severa de bienes o el acceso al mercado laboral de los hogares.

En 2018, el 26,1% de la población estaba en riesgo de pobreza y/o exclusión social. Es apenas medio punto menos que el año anterior.

Y esa pequeña diferencia la marca el tener un empleo o no tenerlo, sea cual sea. El AROPE es muy sensible y si, por ejemplo, una persona tiene un contrato precario, de apenas unas horas semanales, saldría del indicador de acceso al empleo. Y eso aunque su situación económica no mejorase apenas.

"El trabajo reduce su capacidad de proteger. Hay un 14% trabajadores pobres, unos 2,6 millones de personas, que tienen un empleo pero que no es inclusivo. No es sólo cuestión de trabajo, es cuestión de más política de salarios dignos y de mejores condiciones laborales" Explica Juan Carlos Llano. Estamos por encima de la media europea y solo Bulgaria, Rumanía, Grecia, Lituania, Italia y Letonia superan nuestro índice AROPE.

La tasa de pobreza

El indicador económico de pobreza no ha variado apenas.

Algo más de 10 millones de personas están en riesgo de pobreza en España. La tasa apenas se ha recuperado, además, ocho décimas desde su peor momento en la crisis. Una recuperación casi inapreciable y que deja otro dato de alarma: entre 2014 y 2018, el PIB creció un 17,5%. La riqueza nacional aumentó en 3.840 millones de euros en ese período y la pobreza apenas descendió unas décimas.

"El crecimiento económico, por sí sólo, no trae consigo una reducción de la pobreza y se necesitan políticas de redistribución de la riqueza"

En 2018, más de la mitad de la población tenía algún tipo de dificultad para llegar a fin de mes. Por comunidades, las desigualdades son evidentes y Madrid marca la frontera norte - sur que divide la pobreza

Las familias con niños, las peor paradas

Las familias con hijos asumen un factor de riesgo que les da más papeletas para ser pobres. "Tener menores en casa es un factor de riesgo de pobreza. Todos los que tienen hijos están en peor situación que los que no tienen. La protección de la infancia es muy importante" recalca Juan Carlos Llano.

Según el informe:

  • Uno de cada cuatro niños en España vive en riesgo de pobreza, en un hogar donde se ha producido algún retraso en el pago de la hipoteca o el alquiler y con grandes dificultades para llegar a fin de mes.
  • Uno de cada cinco niños vive en una casa que no puede mantener una temperatura adecuada y que no puede permitirse un ordenador.
  • Uno de cada diez niños no puede consumir proteínas de carne, pollo o pescado cada dos días.
  • El 6,5% no tiene Internet en casa.

Sacar hasta 1,5 millones de personas de la pobreza y de la exclusión social (según el indicador AROPE) antes del año 2020 será "muy difícil de cumplir". Y eso que el objetivo marcado por la Unión Europea no era muy ambicioso. Haría falta reducir la tasa de pobreza en más de cinco puntos puntos en un años. Y eso, no ha sucedido nunca.

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