Rodrigo Rato, de vicepresidente del Gobierno a imputado por el 'caso Bankia'

Informativos Telecinco 13/02/2015 18:40

La historia política de Rodrigo Rato comienza en 1979 cuando ingresa en Alianza Popular, antecesor del Partido Popular. Logra su primer escaño en el Congreso en 1980 con 35 años. Se convierte, además, en uno de los diputados que apoyaron el nombramiento de José María Aznar como candidato a presidente, junto a Federico Trillo o Juan José Lucas, convertidos luego en hombres fuertes de los gobiernos de Aznar, una vez que éste llega a La Moncloa. Rato, mano derecha de Aznar en la oposición, es nombrado vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda hasta el 2004.

A finales de 2003, su nombre fue barajado como posible sucesor de José María Aznar al frente del PP y como candidato a la presidencia del Gobierno, pero finalmente Aznar nombró a Mariano Rajoy como sucesor. Aun así, en el año 2012, Aznar desveló en su recientemente publicado libro de memorias, que Rato era su primera opción para sucederle en el PP, y que el hecho de decantarse finalmente por Rajoy fue porque Rato rechazó hasta en dos ocasiones la oferta por diversos motivos. Tras la salida del gobierno de éste para preparar las elecciones, Rato fue designado vicepresidente primero del gobierno.

En las elecciones del 14 de marzo de 2004, concurrió como número dos en las listas del PP de Madrid y resultó elegido diputado, cargo al que renunció poco menos de tres meses más tarde al ser nombrado Director Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI). Dimitió el 28 de junio de 2007 alegando razones personales.

El 4 de diciembre de 2007 se anunció su incorporación a la división internacional del Banco de Lazard, un banco de inversiones francoestadounidense establecido en Londres y con competencias en Europa y Latinoamérica. A principios de 2008 se incorporó como Consejero Asesor Internacional del Banco Santander.

Bankia

Rato fue presidente de Caja Madrid (desde enero de 2010) y de Bankia (desde diciembre del mismo año). El 7 de mayo de 2012 anunció su dimisión. Durante su gestión como presidente de Caja Madrid configuró Bankia como la fusión del negocio bancario de siete cajas de ahorros (Caja Madrid, Bancaja, La Caja de Canarias, Caja Ávila, Caja Segovia, Caixa Laietana y Caja Rioja) en lo que se convirtió en la mayor operación de integración financiera de España. En febrero de 2011 presentó oficialmente Bankia y cinco meses más tarde (el 20 de julio de 2011) la sacó a bolsa en la mayor Oferta Pública de Suscripción (OPS) registrada ese año en todo el sistema financiero mundial. En octubre de 2011 Bankia entró a formar parte del índice selectivo español Ibex 35, con una capitalización aproximada de 6.500 millones de euros; también formó parte del STOXX Europe 600. Bankia fue excluida del selectivo español (el 2 de enero de 2013) a causa de su proceso de reestructuración y fue finalmente sustituida por Jazztel (el 23 de abril de 2013).

En diciembre de 2011, Rodrigo Rato presentó el Plan Estratégico de la entidad hasta 2015, según el cual el Banco se situaría como unos de los cuatro líderes financieros españoles. Deloitte detectó en las cuentas de 2011 de Bankia un desfase patrimonial de 3.500 millones y optó por no firmar el informe de auditoría, lo que coincidió con la publicación de los salarios de los directivos de Bankia obligada por el Banco de España. Rato percibía una remuneración anual de 2,34 millones de euros, una de las más altas entre las cajas españolas. Cinco meses más tarde, Rodrigo Rato dimitió como presidente de Bankia tras haber presentado un plan para la entidad que fue rechazado por las autoridades.

Tras ser considerada por el FMI el principal riesgo para el sistema bancario español, en mayo de 2012 Bankia pasó a ser controlada por el Estado español tras la toma de control de BFA, la matriz de Bankia. La situación de Bankia ha sido considerada un punto de inflexión en la crisis financiera del país, situándolo a un paso de la intervención. Tras el rescate de este banco español, en junio del mismo año la UE decidió rescatar a la banca española, aportando un máximo de 100.000 millones de euros. El FMI apuntó a Bankia como el principal responsable del rescate.

Investigado por fraude, fijación de precios y malversación de fondos

A raíz de su gestión en Bankia es nombrado por la revista económica Bloomberg quinto peor CEO de 2012, al ser investigado por fraude, fijación de precios y malversación de fondos en relación a la caída y posterior rescate de Bankia.

En julio de 2012 es citado para declarar como imputado por la Audiencia Nacional por la gestión de Bankia junto con toda la cúpula directiva. Hay tres querellas presentadas, la de UPyD y 15MpaRato presentadas en julio de 2012 (admitidas a trámite). Ésta última recaudó la cantidad de 15.042 euros para costear el proceso judicial en contra de su gestión y se consiguió en menos de 24h en la plataforma de crowdfunding Goteo, colapsando la página web por el elevado número de donaciones en tan poco tiempo. La tercera querella, de IU, fue presentada en abril 2014.( )

Rodrigo Rato estuvo también implicado en el escándalo de las tarjetas opacas de la misma entidad. Entre el 24 de octubre de 2010 y el 28 de noviembre de 2011, Rato realizó 519 compras con cargo a la caja, por un monto de 99.041 €. Entre los gastos figuran compras en tiendas de ropa, bebidas alcohólicas, perfumes, instrumentos musicales o restaurantes de lujo.

Suspendido de militancia

En octubre de 2104 Rato fue suspendido de militancia en el PP después de que el partido abriera un expediente informativo al ex vicepresidente del Gobierno y a otros doce militantes del partido. El expresidente de Bankia había solicitado por carta a la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, su suspensión temporal de militancia en el partido hasta que la investigación del juez de la Audiencia Nacional aclarara los hechos que se le imputan.

Fianza millonaria

En diciembre de 2014, el juez Andreu, instructor del caso Bankia, explicaba en su auto que existen “fundados y racionales indicios de criminalidad contra Rodrigo Rato” por delitos relativos al mercado y los consumidores —artículo 282 bis del Código Penal: “falsear información económico financiera contenida en folletos de emisión de instrumentos financieros (...) castigado con penas de uno a cuatro años”— y delitos societarios — artículo 290: “falsear cuentas anuales u otros documentos que deban reflejar la situación jurídico o económica de la entidad (..) castigado con penas de uno a tres años—”. Pero la gravedad de estos hechos, sostiene el magistrado, “no puede amparar por sí sola la adopción de una medida excepcional como la prisión preventiva” contra Rato. De esta manera, el juez rechazó la petición de UPyD de ingreso en prisión incondicional de Rodrigo Rato al considerar que no existía riesgo de fuga. Eso sí, dos meses después ha impuesto una fianza de 800 millones de euros en concepto de responsabilidad civil solidiaria a varios ejecutivos de Bankia, incluido Rato quien, en la última semana ha sido visto realizando cursos de voluntariado en comedores sociales.