Toxo y Méndez consideran "lamentable" que solo 11 senadores hayan apoyado la convocatoria de un referendum

Los secretarios generales de CC.OO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, han considerado "decepcionante" que solo 11 senadores, de los 26 que eran necesarios, hayan apoyado la convocatoria de un referendum para decidir sobre la reforma de la Constitución para limitar el déficit que el Congreso previsiblemente convalidará mañana.

Ambos líderes sindicales realizaron estas afirmaciones durante una rueda de prensa junto a representantes de la Universidad y la Cultura para presentar un manifiesto en contra de la reforma de la Constitución pactada por PSOE y PP para limitar el déficit público y en apoyo de la convocatoria de un referéndum.

Durante el acto, celebrado en un Círculo de Bellas Artes de Madrid cercado en ese momento por manifestantes en contra de los recortes en la educación pública, Toxo consideró que esta situación es "un poco lamentable" y cargó especialmente contra CiU, a quien acusó de hacer "cálculos" sobre el apoyo que tendría la iniciativa antes de decidir si la apoyaba o no. Por su parte, Méndez consideró que el resultado de la votación ha sido "muy decepcionante", aunque consideró que "era previsible".

Además, los líderes sindicales han cargado contra PSOE y PP por pactar la pactar una reforma "exprés" de la loConstitución "perpetrando" así un "asalto" a la Carta Magna sin contar con la opinión de los ciudadanos.

Toxo señaló que "se ha hurtado" el derecho de la población a pronunciarse y ha advertido de que esta maniobra está a favor de la intención del PP de "renegar" de los espacios de participación ciudadana.

En esta línea, ha asegurado que la reforma ya ha tenido como resultado un cierto efecto legitimador de los recortes en la educación en comunidades autónomas gobernadas por el PP. "Se aprovecha este momento de gran consenso aparente para meter la tijera en elementos sensibles, capitales para el desarrollo futuro del país , como la educación o la sanidad", apostilló.

Por lo demás, el líder de CC.OO aseguró que la reforma "ha sido inútil" para calmar a los mercados e incluso ha dicho que España "está en una situación peor después del atropello". "Es el tiempo de rebelarse sabiendo que no es una tarea de cuatro días", añadió para zanjar que es preciso "construir una gran plataforma de defensa de los servicios públicos".

Por su parte, Méndez ha asegurado que la reforma constitucional "ha cambiado el eje" de la Carta Magna y ha incumplido del tratado de la UE, que, según dijo, en ningún momento habla de políticas nacionales.

Méndez justificó la necesidad de recurrir al déficit en tiempos de crisis del mismo modo que "las familias también viven a crédito". Tras las exigencias de los organismo internacionales, añadió, "hay un objetivo poco disimulado que es el de salvar la posición de los bancos franceses y alemanes de la crisis griega", algo que, recordó, "no se ha conseguido" de momento.

Así pues, para el líder de UGT los argumentos sobre el déficit son "argumentos desautorizados por la realidad y desgastados por el tiempo". "Ya no nos los podemos tragar y el colmo es que se utilicen para cambiar la Constitución", sentenció.

Por último, tras llamar a la movilización contra la reforma constitucional, Méndez señaló que "mantener esta reforma va a significar que los costes sociales aumenten" y pidió a los partidos que se comprometan a plantear un suelo mínimo de gasto social en la Constitución parar que se pueda en la medida de lo posible recuperar "el equilibrio roto".

LA UNIVERSIDAD Y LA CULTURA HABLAN.

Según consta en el manifiesto, la modificación constitucional "es una exigencia inconsistente con un nivel muy razonable de endeudamiento público, causado precisamente por el soporte financiero a la banca en crisis", y supone una medida que "sigue colocando en segundo lugar, lo que debe ser la prioridad entre las prioridades, el empleo".

Por otro lado, el documento apunta que la limitación del déficit en la Carta Magna "impedirá en la práctica la satisfacción eficaz de muchos derechos sociales reconocidos en la Constitución", a lo que añade que "adoptar esta modificación implica una actitud inequívocamente antidemocrática, que rompe el pacto constituyente que dio origen a la Constitución y busca expresamente que no se pueda producir la participación popular a través de referendum".

"Esa una reforma que sofoca la democracia y desconfía claramente del fundamento democrático y popular que sostiene el andamiaje de la Constitución española", sentencia el manifiesto.