{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
La mala mar no ha dado tregua en el Cantábrico durante casi una semana, donde las olas de más de 6 metros no han parado de complicar las trayectorias de las embarcaciones y la marejada ha inundado paseos marítimos en Galicia y el País Vasco. Este fin de semana, vientos asociados a la borrasca Dennis, van a encargarse de empeorar el temporal costero y de prolongarlo como mínimo hasta el martes. Precaución: seguimos en aviso por riesgo extremo.
El temporal marítimo en el norte peninsular ha dejado imágenes desoladoras de destrozos, coches arrastrados y naufragios en medio del océano. Y no hay previsión de que el episodio amaine: se espera que el viento pueda ir cobrando fuerza durante las próximas jornadas, lo cual dificultará más el oleaje.
Los planes para este fin de semana, cuanto más lejos de la costa, mejor. Hasta el domingo, todo el litoral estará bajo aviso por olas que oscilarán entre los 4 y los 6 metros de altura. Si aún así quieres arriesgarte a ver la belleza natural del mar, te contamos lo que NO tienes que hacer bajo ningún concepto.
Asimismo, el ambiente será menos llevadero por los fuertes vientos que azotarán a Galicia y el Principado de Asturias. Podrán alcanzar los 90 km/h, en los litorales especialmente, así que mucho cuidado. Registraremos ráfagas de 80 km/h en zonas de A Coruña, y de unos 70 km/h en Navarra.
Lo que vamos a registrar durante el fin de semana tan solo será un pequeño aperitivo de lo que esperamos el lunes. La costa cobrará más peligrosidad a medida que se adentre una masa de aire frío, que vendrá acompañada de un frente que rozará Galicia, y que impulsará vientos de gran calado.
El resultado será un temporal aún más recrudecido. Esperamos mar combinada de entre 6 y 9 metros de altura y que se podrá extender durante toda la jornada.
De cara al martes el mar pasará a agitarse más en el nordeste peninsular, pudiendo ir a menos a medida que avanzan las horas. Por el contrario, después de una semana alcanzando olas de más de 6 metros en el Cantábrico, empezaremos a ver cómo el mar se va calmando poco a poco. De todas formas, no es recomendable despistarnos en exceso.