La borrasca Odette trae de golpe frío polar con nieves, vientos de 100 km/h y bajón de temperaturas

  • Este drástico cambio del tiempo finalizará el domingo

  • La nieve llegará a las zonas de 1.600 metros de hasta 10 y 20 centímetros

  • El día más frío será el viernes, excepto en el sur de Andalucía y Murcia, donde hará más frío el sábado

Vientos de hasta 100 km/h, un bajón de temperaturas de entre 10 y 15 grados y parajes nevados más allá de los 1.600 metros, Un frente atlántico, bautizado como 'Odette', comenzará a atravesar la Península Ibérica desde el noroeste y durante el primer fin de semana del otoño provocará una estrepitosa caída de las temperaturas. Llega el invierno de golpe ahora que acaba de empezar al otoño con temperaturas por debajo de lo normal para estas épocas del año, además de dejar lluvias y en las zonas montañosas del norte, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Trece comunidades estarán en alerta por viento, oleaje y nevadas.

La borrasca Odette procedente de las Islas Británicas dejará este viernes las primeras nevadas apreciables del otoño en cotas bajas del Pirineo, en torno a los 1.600 metros, es decir, en puntos como los pasos fronterizos de Somport (no así el túnel), Portalet o Bielsa o el balneario de Panticosa, donde se podrían acumular 10 cm, según los pronósticos de la Agencia Estatal de Meteorología.

La borrasca Odette procedente de las Islas Británicas dejará este viernes las primeras nevadas apreciables del otoño en cotas bajas del Pirineo, en torno a los 1.600 metros, es decir, en puntos como los pasos fronterizos de Somport (no así el túnel), Portalet o Bielsa o el balneario de Panticosa, donde se podrían acumular 10 cm, según los pronósticos de la Agencia Estatal de Meteorología. En cotas más altas se podrían superar los 20 cm, especialmente en las zonas occidentales. , especialmente en las zonas occidentales.

La Aemet también ha emitido para este viernes un aviso por lluvias en el Pirineo con 40 litros de precipitaciones acumuladas en apenas 12 horas y otro por vientos fuertes con rachas máximas de 90 kilómetros por hora, aunque en cotas altas podrían rebasarse los 100 km/h.

Los vientos afectarán también a gran parte de Aragón. En las comarcas turolenses de Gúdar y Maestrazgo se esperan rachas de 90 km/h, mientras que en el centro y sur de Huesca, en las Cinco Villas y la Ribera del Ebro de Zaragoza y en el Bajo Aragónde Teruel, se alcanzarán los 80 km/h.

El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, explica que el episodio de tiempo adverso terminará el domingo, aunque el sábado se iniciará una ligera mejoría. Galicia y las comunidades cantábricas y Pirineos y serán las más afectadas por este cambio brusco de temperaturas, con lluvias localmente intensas y persistentes, sobre todo en el Cantábrico Oriental. .

La situación meteorológica estará marcada, por un lado en el Atlántico por un anticiclón de las Azores que se va a ir robusteciendo y se acercará a España y, por otro lado, un área de bajas presiones sobre las Islas Británicas, que se irá desplazando hacia Europa Continental.

Un pasillo que traerá vientos polares potentes

De ese modo, entre ambos sistemas de presión se ocasionará una gran diferencia baromética, de presión, por lo que se crea un pasillo por el que se canalizan vientos muy intensos del noroeste, que serán "húmedos y fríos para la época", porque los vientos arrastrarán una masa de aire polar procedente de latitudes muy altas, más allá del Círculo Polar Ártico, que "va a llegar directamente hasta hasta la Península Ibérica".

En general, las montañas de la cordillera Cantábrica, norte de los Pirineos y también norte del Sistema Ibérico retendrán la mayor parte de la nubosidad. Al otro lado de esas "murallas orográficas", las lluvias serán menos frecuentes, aunque aún así el viernes también podrá llover "algo" en puntos de Castilla y León y podría haber algunas tormentas en Cataluña y Baleares. También lloverá en el entorno del Sistema Ibérico, en el norte de Burgos, La Rioja, pero en el resto del país el ambiente será seco, con intervalos nubosos como mucho.

El sábado, también se producirá un descenso térmico acusado y generalizado en la Península y Baleares, especialmente en el nordeste, donde la bajada puede ser de hasta 10 grados centígrados respecto al viernes. El domingo seguirá lloviendo en el Cantábrico y en Pirineos, aún de forma persistente, pero probablemente ya se acumulará menor cantidad de precipitación que los dos días anteriores.

Igualmente también se quedarán frías las temperaturas mínimas, ya que por la noche se esperan heladas en cotas altas de Pirineos, de la Cordillera Cantábrica y en el sistema Ibérico. Precisamente, las precipitaciones serán sólidas, es decir, en forma de nevada a partir de 1.400 a 1.800 metros de estos sistemas montañosos e incluso se podrán acumular hasta 10 centímetros de nieve en el Pirineo de Huesca y de Lérida a partir de 1.400 metros.

El sábado la temperatura bajará en Andalucía y Baleares

Se trataría, según el portavoz de una "cantidad inusual a cotas tan bajas en un otoño recién estrenado", --comenzó este martes a las 15.31 horas-- . El día más frío será el viernes, excepto en el sur de Andalucía y Murcia, donde los vientos terrales colocarán el termómetro por encima de 30 o de 32 grados centígrados. En esas áreas todavía se registran noches tropicales. Pero a partir del sábado sucederá "lo contrario", ya que bajarán los termómetros en estas zonas y en Baleares, aunque tanto en el sur de Andalucía como en Baleares, las temperaturas todavía serán más altas de la normal.

Mientras descienden en ese área, por el contrario subirán en el resto del la Península, aunque el sábado y el domingo todavía los termómetros en general alcanzarán valores frescos para la época, pero serán de entre 3 y 5ºC por debajo de lo normal, sobre todo en el norte.

Un fin de semana con vientos potentes

Otra de las características meteorológicas que marcarán el fin de semana será el viento, que el viernes soplará con rachas muy fuertes del noroeste en la mayor parte del país y se espera fuerte oleaje en el Cantábrico, donde el viento puede provocar olas de cinco a siete metro y las rachas en tierra podrán superar los 90 kilómetros por hora.

Por su parte, en el valle del Ebro soplará el cierzo, que seguirá acelerando desde la cabecera hasta la desembocadura, de modo que las rachas alcanzarán los 70 a 90 kilómetros por hora en Álava, Navarra y La Rioja e incluso serán algo más altas en zonas de montaña. En el resto de Aragón y Cataluña se podrán registrar rachas de viento de 100 kilómetros por hora.

En la comunidad catalana y en Baleares las rachas serán de similar intensidad y las olas podrán alcanzar hasta cuatro metros de altura. En Menorca hasta podrán registrarse olas de cinco metros y las rachas de viento podrán superar los 100 kilómetros por hora e incluso no se descarta alguna racha huracanada, es decir, que supere los 120 kilómetros por hora en puntos expuestos de las islas, sobre todo en los picos montañosos y en los cabos, el viernes.

El sábado el viento todavía soplará con fuerza en el noroeste peninsular y en Baleares, mientras que el domingo, aunque habrá rachas intensas se irán en general amainando de cara a la primera mitad de la próxima semana. La situación tenderá a remitir, aunque continuarán las lluvias en el extremo norte peninsular. En el resto, el tiempo será "seco" en general, con cielos soleados y temperaturas que subirán hasta que se acerquen a los valores normales.

La próxima semana comenzará con las temperaturas en ascenso y se recuperarán los valores normales para esta época, incluso el martes o el miércoles hará calor en el tercio sur peninsular.

En el País Vasco habrá que sacar las mantas

El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco ha activado la alerta naranja por riesgo marítimo-costero para la navegación (a partir de las dos primeras millas de la costa) entre las 06:00 y las 21:00 horas y los avisos amarillos por impacto en costa, viento y precipitaciones intensas y persistentes en zonas expuestas del litoral. El fin de semana habrá que sacar las mantas e incluso las estufas en zonas de 300 metros de altura.