Aunque no lo creas, aire frío planea sobre nuestras cabezas. No está lo suficientemente bajo como para que lo notemos, pero demasiado como para que se formen esas nubes de evolución diurna, los cumulonimbos, que son las que producen esos tormentones tan fuertes y eléctricos.
Junto a ellas está el calor de superficie, cada vez mayor, que no solo hace que esas nubes crezcan hacia arriba, sino que se puedan producir situaciones de bochorno dignas de una sauna. El miércoles será el día que más lo notaremos, con valores entre 5ºC y 10ºC por encima de lo normal en amplias regiones del país.
Para entonces, nos situaremos con temperaturas en torno a los 30ºC en el interior este. Por ejemplo, en Madrid, Albacete y Zamora, tendremos máximas de 28ºC; en Sevilla y Valladolid, de 27ºC; en Zaragoza y Murcia, de 30ºC; en Lérida, 29ºC…
*Imagen: anomalía de temperaturas máximas previstas para el miércoles / @crballesteros
En fin, una serie de valores que confirman que tendremos un día de verdadero calor. Sin embargo, a partir del jueves la situación se enfriará, sobre todo en la mitad este peninsular, cuando una bolsa de aire frío, que se desgajará en los próximos días y que pululará por nuestros cielos a mediados de semana. Eso rebajará el ambiente cálido que hasta entonces tendremos, pero obviamente no volveremos al 'invierno'.
*Imagen: anomalía de temperaturas máximas para el jueves / @crballesteros
Más tormentas
Por otro lado, las predicciones apuntan a que el jueves y el resto de la semana continuará las tormentas, que tanto el viernes como el fin de semana veremos sobre todo en el oeste y norte peninsular, y después en el centro.
Las temperaturas, a partir del viernes, se mantendrán sin apenas cambios, y es probable que en regiones como el extremo norte y Cataluña sigan siendo altas para la época del año, con valores que superarán ampliamente los 25ºC.