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Las tormentas de la pasada semana aún marcan el día a día de los muchísimos afectados que limpian sin descanso los restos de lodo de sus casas y negocios. En zonas del sureste peninsular, el episodio de lluvias que trajo la DANA (la depresión que quedó aislada de la circulación general) sumado a las precipitaciones más débiles que no han dado tregua estos días, ha supuesto una acumulación de 546 l/m(2) en el aeropuerto de Alicante-Elche, el doble del promedio de todo un año, ha informado la Universidad de Alicante. En este escenario complicado a la espera de una mejoría que no llega, el Atlántico nos trae dos sorpresas que darán guerra entre desde la tarde del viernes.
Seguramente tu móvil te avisase el jueves del empeoramiento que se prevé para el fin de semana, cuando el mejor plan será quedarse en casa y evitar la carretera. La Agencia Estatal de Meteorología, que todavía hace balance de la reciente DANA, emitió el miércoles un aviso especial para advertir del episodio de tormentas que se va a producir desde el viernes.
El paso de vaguadas y un posterior frente atlántico van a alterar la atmósfera sobre nuestras cabezas. Las tormentas llegarán con granizo desde la tarde del viernes e irán remitiendo en buena parte del país a lo largo del sábado, a excepción de Cataluña, donde el episodio se prolongará más y se darán acumulaciones muy generosas de agua: la Aemet estima que podrán caer 70 l/m(2) o más en sólo una hora.
*Imagen: Situación atmosférica a 500 hPa prevista para el sábado, con una vaguada aproximándose al noroeste / Aemet
Cabe recordar que la temperatura del Mediterráneo sigue muy elevada en este final de verano, alrededor de los 25ºC en el entorno de Cataluña y norte de la Comunidad Valenciana, y va a coincidir con la llegada de frío en altura. Así, el mar volverá a contribuir a la inestabilidad que se va a gestar porque la humedad que inyecta favorece la convección, es decir, la formación de nubes que darán lugar a tormentas, seguramente con granizo.
Al tiempo que esta vaguada se aleja hacia el este afectando a la comunidad catalana, los cielos darán un respiro en el interior después de los estragos que podrá causar durante la víspera del fin de semana. Eso sí, la entrada de un frente por el oeste de la Península dará lugar a precipitaciones que en las costas gallegas podrán dejar hasta 60 litros/m(2) durante el día y un viento que soplará con mucha fuerza en el noroeste y el Cantábrico.
A su vez, las temperaturas van a experimentar un paulatino descenso, que ya se nota, hasta quedarse el domingo la máxima por debajo de los 20ºC en zonas del cuadrante noroeste peninsular y de los 24ºC en toda la Comunidad de Madrid.
No obstante, será precisamente durante el domingo cuando la cosa mejorará de manera generalizada, con la excepción de Pirineos y alrededores, y zonas del Cantábrico oriental. De cara a la próxima semana la estabilidad será más frecuente y las únicamente habrá que tener cuidado en el oeste de Galicia. Además el martes se prevé que las temperaturas máximas peguen un subidón que será bastante evidente después de unos días más fresquitos.
*Imagen: Probabilidad de precipitación entre el sábado 21 y el lunes 23, en la Península y Baleares / Aemet