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Desde que arrancó noviembre el pasado viernes, el tiempo parece haber dado un giro de 360º. La puerta ha quedado abierta a la entrada de inestabilidad por el Atlántico y lejos quedan ya los días en que la terracita al sol era nuestro mejor plan. Ganan así terreno las tardes refugiados en el cine o en casa, especialmente desde el jueves 7, cuando el chorro polar decidió adentrarse en nuestras latitudes con un episodio de tiempo invernal que durará hasta el comienzo de la semana que viene. Y lo peor no ha pasado: prepárate porque el domingo una nueva irrupción polar que va a desplomar los termómetros (y la cota de nieve).
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha informado del episodio de tiempo invernal, como lo ha calificado, a través de notas informativas que ha ido actualizando. Según se prevé, las nevadas serán las grandes protagonistas y el frío se quedará en la superficie durante unos cuantos días. Concretamente, en la recta final de la semana el chorro polar volverá a incidir sobre la Península con un "empeoramiento de la situación", enuncia el comunicado de la Aemet.
El chorro polar, muy activo actualmente, está tomando una disposición norte-sur y no la habitual oeste-este. Así, con la entrada de temperaturas gélidas en altura, las diferentes capas de la troposfera se enfrían, como explicó el jueves el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, a través de Twitter.
Con la ligera tregua del viernes y sábado, cuando se producirán lluvias muy extendidas y nevadas todavía en las cumbres de la mitad norte, tendrá lugar un "deshielo de la nieve caída en las horas previas". No obstante, se prevé que el episodio invernal se reactive el domingo con un nuevo enviste polar.
La cota de nieve será relativamente baja y las heladas muy frecuentes en zonas elevadas, donde las mínimas van a caer en algunos casos por debajo de los 0ºC. Así, tocará extremar la precaución al volante ante los posibles resbalones. En las montañas de la mitad norte veremos nevar por debajo de los 1000 metros de altura y las acumulaciones al final del episodio alcanzarán en algunas regiones el metro de espesor.
El viento fuerte será un factor constante entre el viernes y el domingo especialmente en el norte peninsular y Baleares, dejando además un mar muy agitado en la cornisa cantábrica y los respectivos avisos naranjas de la Aemet por riesgo costero.