{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Ya lo habrás notado: el calor se ha instalado en nuestro país con temperaturas que poco tienen que ver con lo que deberían marcar los termómetros a estas alturas del año y las nubes brillan por ausencia. Pero el 'veranillo de San Miguel' no es para todos, en el norte el Atlántico contagia su inestabilidad y las lluvias, aunque poco cuantiosas, van a ser frecuentes lo que queda de semana. Por allí las máximas, como en el resto de Europa, serán además más llevaderas e incluso más frías de lo habitual para la fecha (promedio del periodo 1981-2010). Tanto contraste viene dado por las altas presiones, que reinan en el sur, y todo lo contrario en Galicia y el Cantábrico, que estarán en el paso de un tren de frentes que va a pasearse por nuestro país desde el viernes.
El huracán Lorenzo que ha acaparado titulares toda la semana –el más potente tan al este en la cuenca del Atlántico– se encuentra ya en las islas británicas como ciclón extratropical, después de haber ido perdiendo sus características por el camino. Esta transición ha sido tardía, en una latitud bastante elevada de unos 50ºN. A pesar de haber dejado atrás su condición de 'tropical', su impacto en Irlanda, con vientos de más de 130 km/hora –ha informado Met Éireann– y lluvias muy intensas, se prevé bastante inquietante. De hecho, todo el país se encuentra bajo aviso y la agencia meteorológica informa de que se podrán producir inundaciones, especialmente en zonas de costa.
*Imagen: Mapa con frentes previsto para el viernes, con Lorenzo ya de lleno en Irlanda / Aemet
Fruto del ahora ciclón extratropical Lorenzo nos llegará un frente frío muy desgastado, que se dejará sentir en la costa de Galicia desde aproximadamente las 20:00 horas del jueves hasta la mañana del viernes, cuando el mar se irá calmando. Este coletazo del exhuracán avanzará, después de mojar la comunidad gallega, por el norte peninsular e irá dejando precipitaciones débiles a su paso –que podrán ser más intensas en Pirineos–, hasta despedirse el sábado por el nordeste.
*Imagen: Precipitación media prevista para el viernes en la Península y Baleares / Aemet
Los termómetros no se librarán de la influencia de este frente, que va a desplomar las máximas en Galicia y Asturias al tiempo que siguen subiendo ligeramente en buena parte de la Península.
El sábado otro frente irá aproximándose por el oeste, asociado a una borrasca en el Atlántico Norte, y todo apunta a que podrá adentrarse en la Península el domingo. A su paso, se prevé que afecte más, de nuevo, al norte del país, donde podrá restar algún grado a las máximas, que caerán por debajo de los 20ºC en las comunidades del Cantábrico e incluso La Rioja y el norte de Castilla y León.
Además de su influencia en el mercurio, este frente enturbiará los planes al aire libre con lluvias que no serán demasiado generosas en el Cantábrico, Cataluña y Baleares, aunque lo mejor no despistarse en la provincia de Gerona y en regiones del Golfo de Vizcaya, donde podrán ser más cuantiosas.