Lo que puede aprender la izquierda del 28M en las capitales aragonesas: cómo penaliza la división

  • En Huesca y Teruel, cuatro formaciones de izquierdas no han conseguido concejales porque no han llegado al 5% requerido para entrar en los ayuntamientos

  • En Zaragoza, han obtenido dos que podrían haber sido cinco, y en las Cortes de Aragón CHA, IU y Podemos suman cinco de los 67 diputados autonómicos

  • Claves de un adelanto electoral a la desesperada de Sánchez

Que el sistema electoral español castiga a los partidos más minoritarios es una realidad que el domingo se volvió a confirmar en los resultados de las elecciones municipales y autonómicas del 28M. La división de la izquierda a la izquierda del PSOE tuvo consecuencias para ella y para la configuración de algunos territorios, como las tres capitales aragonesas, donde el PP ha ganado con claridad. El caso más duro para la izquierda es el de Huesca, donde solo han sido elegidos concejales del PP, el PSOE y Vox. Cuatro partidos a la izquierda del PSOE, que se presentaron por separado, no consiguieron ni un sólo escaño porque ninguno llegó al 5% necesario para tener representación. Juntos, sumaban casi un 18% de los votos, que no solo les habrían dado cinco concejales sino que habrían facilitado una mayoría de izquierdas.

En Zaragoza, la candidatura unitaria de la izquierda no habría dado un vuelco a la izquierda, pero se convertiría en la tercera fuerza, por delante de Vox. En la capital aragonesa ha ganado el PP, que suma con Vox para tener la mayoría absoluta. Allí sí que ha entrado Zaragoza en Común, con dos concejales, pero si esa formación hubiera ido unida a Podemos y Chunta, habrían sido cinco. Por separado, Podemos y la Cha se quedaron cerca del 5% y sin llegar al consistorio.

En Teruel, los partidos a la izquierda de la izquierda habrían conseguido algo que el domingo no lograron: hacerse un hueco entre PP, Teruel Existe, PSOE, Vox. De haber concurrido juntos, habrían arañado un concejal, que no quitaría la mayoría a PP y Vox, pero al menos tendrían representatividad.

Para hacer las cuentas de Aragón hay que tener en cuenta el caso de la Chunta Aragonesista, un partido mucho más antiguo que Podemos y que llegó a tener su propia voz, la de José Antonio Labordeta, en el Congreso entre los años 2000 y 2008. Fundada en 1986, la Chunta ha hecho su propia andadura y nunca se ha presentado junto a Podemos y el resto de formaciones de su entorno. Sin embargo, sí que es uno de los partidos que han mostrado su apoyo a Sumar de cara a las generales. Está por ver si tras estas municipales, en las que no han conseguido ningún concejal propio en las capitales, aunque sí tres diputados a las cortes aragonesas, todo sigue igual.

Donde ya se ha puesto a trabajar para que la división no les pase factura en las generales del 23 de julio es en Podemos y Sumar, que aseguran haber tomado nota. Pocos son los que no han hecho las cuentas para ver si la unidad de Podemos y Sumar puede permitir a Pedro Sánchez mantenerse en La Moncloa. Los analistas coinciden e que eso es incierto, porque los resultados de unas municipales no se pueden extrapolar a unas generales. Pablo Simón, Politólogo de la Universidad Carlos III, sí tiene claro que la división de Podemos y Sumar sería "letal" para ellos.

El caso de Huesca

Así ha quedado Huesca, donde PP y Vox suman 15 de los 25 concejales:

  • PP, 11 concejales
  • PSOE, 10 concejales
  • Vox 3

Podemos con un 4,7%; IU, con un 4,5%; Equo con un 4,3% y Chunta un 4,4%: no han conseguido representación municipal, pese a sumar casi un 18% de los votos. Si se hubieran presentado de manera conjunta, y les hubiera votado exactamente la misma gente, este habría sido el resultado:

  • PP, 10 concejales
  • PSOE 8 concejales
  • Podemos+IU+Equo+Chunta: 5 concejales
  • Vox 2 concejales

Es decir, la suma de los partidos más a la izquierda y la del PSOE sería mayor que la de PP y Vox, y por lo tanto podrían gobernar. Sin la Chunta, el resto de partidos habría estado representado pero el poder seguiría siendo de la derecha.

Zaragoza

En la capital aragonesa, Zaragoza en Común ha conseguido dos concejales, pero si a esa formación se hubieran unido Podemos y la Chunta, serían cinco. Insuficiente para una mayoría de izquierdas, pero más que suficiente para darles representatividad. Estos han sido los resultados, con mayoría del PP, aunque no absoluta:

  • PP: 15 concejales
  • PSOE: 10 ediles
  • Vox: 4 escaños
  • ZEC: 2 representantes

Si se uniera la izquierda, los resultados serían estos:

  • PP: 13
  • PSOE: 9
  • Vox: 4
  • ZEC+Podemos+CHA: 5

Los 14 escaños que sumarían esos tres partidos y el PSOE seguirían estando por detrás de los 17 de PP y Vox, pero la fuerza de esas formaciones en el Ayuntamiento sería mayor.

Teruel

En Teruel la suma de partidos de izquierdas les daría para un concejal que no han llegado a obtener. Aquí está el importante factor de Teruel Existe, que ha sido la segunda fuerza más votada y que siempre defiende que su ideología es su territorio. A este partido de la España Vaciada no se le puede enmarcar en ningún bloque, aunque sí hay un partido con el que nunca compartiría gobierno: Vox. Aclarado este punto, estos han sido los resultados del 28M:

  • PP: 11
  • Teruel Existe:5
  • PSOE:3
  • Vox: 2

Por la izquierda, había otros tres partidos que se han quedado sin representación: GT-IU, CHA y Podemos. Solo sumando sus fuerzas habrían conseguido un concejal, que habrían arrebatado a Vox, dejando este reparto:

  • PP: 10
  • Teruel Existe:5
  • PSOE:3
  • Vox:2
  • GT/IU+CHA+Podemos: 1

En esta versión de las votaciones, y siempre suponiendo que la unidad no aleje a votantes que no la quieren, el PP ya no tendría mayoría absoluta y necesitaría a Vox para formar gobierno. En cuanto a esos partidos, tendrían un concejal.

Todos representados en las Cortes de Aragón

Eso sí, en las Cortes de Aragón, la cosa cambia, porque el mínimo de votos necesarios para obtener un representante es del 3%, y no del 5% como en las municipales. Ese 3% se ha de conseguir en las provincias de donde salen elegidos los diputados regionales. En el Palacio de la Aljafería, el hemiciclo tendrá representados a PP, PSOE, Vox, Aragón Existe, y el PAR, pero también a la CHA, Podemos e IU, que sí han alcanzado el 3% necesario en alguna de las tres provincias aragonesas. Entre los tres suman cinco escaños de los 67 que tiene la cámara.

¿Cómo afecta la división a las generales?

72 horas llevan los expertos advirtiendo de que los resultados en unas municipales no son extrapolables a las generales por muchos motivos: no se presentan los mismos partidos; muchos electores no votan lo mismo en unas elecciones u otras, por ejemplo por el tirón de un candidato; además, como ocurre en las autonómicas, en las generales el porcentaje mínimo para contar es del 3% en la circunscripción de la que son candidatos, que es la provincia por donde se presentan..

Pero hay otro factor, las provincias tienen un límite de diputados que enviar, por lo que en en lugares como Ceuta y Melilla solo va el más votado; en otros sitios como Soria, los dos candidatos más votados (que pueden ser del mismo partido); y en otros como Madrid y Barcelona hablamos de 37 y 32 diputados respectivamente. Así que la unidad puede ser clave en algunas provincias, y no tanto en otras. Pablo Simón, habla de un efecto mecánico "letal" en las provincias con menos de 10 representantes.

Precisamente, pone el ejemplo de Zaragoza, donde en 2019 Unidas Podemos sacó a su único diputado aragonés con 57.875 votos y estuvo a punto de quedarse sin ese escaño, pero lo consiguió: "Sin esa concentración, ese escaño habría acabado en otro partido", explica Pablo Simón poniendo Zaragoza como ejemplo circunscripción mediana, ya que elige a siete diputados.

En las circunscripciones más grandes, un Podemos sin Sumar, lo tendría algo más fácil, según Simón, aunque puntualiza que por ejemplo en Barcelona, tiene que competir con Los Comunes, así que a su juicio, la unidad es vital para Podemos y Sumar este 23 de julio.

Pablo Simón añade que también pesa el efecto psicológico, que puede hacer buscar al votante al partido con más posibilidades entre sus afines y que los electores vayan todos a una detrás de ese. Pero al mismo tiempo, admite que eso es algo "que no suele ocurrir".

En cualquier caso, Podemos y Sumar tomaron nota y tras los resultados electorales aseguraron que ya estaban trabajando en una candidatura unitaria. Ahora tienen dos semanas para confeccionar unas listas que no van a ser fáciles de hacer, a tenor de las tensiones mantenidas hasta el momento.