Casa real

Los detalles de la recepción real de Felipe VI y Letizia en la Cumbre de la ONU en Sevilla: invitados, fallos protocolarios y el discurso del rey

El rey Felipe VI y la reina Letizia en la IV Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo de Sevilla. EFE
Compartir

Los reyes de España ofrecen en el Real Alcázar de Sevilla una cena a las autoridades y a los jefes de Estado o de Gobierno con motivo de la Cumbre de la ONU que se celebra en la capital andaluza. A la cena también asiste el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que mañana ofrecerá otra cena a los mandatarios extranjeros en el Palacio de Dueñas.

PUEDE INTERESARTE

El rey Felipe VI y la reina Letizia han recibido a los mandatarios antes de la cena de gala que se ha ofrecido a los líderes mundiales que asisten a la IV Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo.

La recepción real

Felipe VI y Letizia han ofrecido una cena en el Real Alcázar a los líderes mundiales que se han desplazado hasta la capital andaluza para asistir a partir de este lunes a esa conferencia que aspira a movilizar más recursos para el desarrollo y reafirmar el compromiso con el multilateralismo, precisamente el eje del discurso del rey.

PUEDE INTERESARTE

Los reyes han ido recibiendo a sus invitados en el Patio de las Doncellas del palacio, y a la cena han asistido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acompañado de su esposa, Begoña Gómez, que últimamente no había asistido a otros eventos oficiales.

A su llegada han sido saludados por don Felipe y doña Letizia, aunque por un fallo de protocolo no han posado junto a los reyes en ese momento y lo han hecho una vez que éstos han recibido al resto de invitados.

Con un vestido verde esmeralda con detalles dorados, la reina Letizia saludaba a los mandatarios entre los que se encontraban Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, el primer ministro egipcio, Mostafa Madbouly, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, el secretario general de la ONU, Atónio Guterres, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su mujer Begoña Gómez.

Por su parte, el rey Felipe VI llevaba un traje de color azul marino que combinaba con una corbata verde con detalles blancos con la que hacía un guiño a la bandera de Andalucía. Antes de la cena, el rey ha mantenido una serie de reuniones con líderes asistentes a la conferencia, entre ellos Guterres.

El discurso del rey Felipe VI

El rey ha considerado este domingo la IV Conferencia Internacional de la ONU sobre la Financiación para el Desarrollo de Sevilla como una prueba de que el multilateralismo es el mejor y más duradero camino hacia la paz y el progreso, y una fuente de esperanza ante los "aterradores" acontecimientos que vive el mundo.

El monarca, durante su intervención, ha subrayado que, con tantas voces acusando al mundo multilateral de ineficaz y de encontrarse en un punto muerto, esta cumbre es la demostración de que el multilateralismo "es todavía el mejor camino y el más duradero para lograr la paz y el progreso porque nos incluye a todos y da voz a todos" Ha recordado también las palabras atribuidas al filósofo musulmán nacido en Al Andalus Averroes, que considera ahora muy apropiadas: "La ignorancia conduce al miedo, el miedo al odio y el odio a la violencia, esta es la ecuación".

Al hilo de estas palabras, ha dicho estar seguro de que los asistentes, entre ellos el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, estarán de acuerdo con esta ecuación, "tanto simple como preocupante, que puede explicar algunos de los conflictos de nuestro tiempo y también en parte la erosión del mundo multilateral.

Precisamente, la Conferencia de Sevilla -ha subrayado- y lo que se espera de ella es que sea "una fuente tangible de esperanza en el futuro" ante los profundamente preocupantes y aterradores acontecimientos que el mundo está contemplando". Felipe VI se ha preguntado si se puede asegurar que no todo está perdido y que no se han desperdiciado décadas de auténtico progreso en la construcción de un mundo más estable, pacífico prospero y sostenible: "todos tenemos voz para responder, para hacer posible decir sí".

Ha insistido el monarca en que en este tiempo en el que a menudo se dice que los puentes de diálogo están rotos, esta Conferencia ha congregado a unas 12.000 personas de todo el mundo -con la gran ausencia de Estados Unidos- para discutir cómo modernizar el marco de desarrollo financiero, hacerlo más efectivo, ambicioso y resiliente ante los complejos retos de un mundo que cambia muy rápido.

En su defensa de la colaboración internacional y ante las acusaciones de que la ONU sufre de "fatiga crónica", esta cumbre -ha recalcado- pone de relieve la importancia de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que se adoptaron hace una década y para cuyo cumplimiento quedan cinco años. "Esta sigue siendo una medida de nuestra ambición y dedicación como ciudadanos del mundo", ha afirmado, reiterando que la ONU, con los valores de su Carta, sus reglas y su presencia en el terreno "es más vital que nunca".

Si el rey ha empezado su intervención mencionando al filósofo andalusí Averroes, ha escogido al poeta sevillano Antonio Machado para poner punto final a su discurso al recordar que escribió "hoy es siempre todavía", instando "a actuar ahora en lugar de más tarde". "Llevémoslo en mente, como un lema", ha señalado Felipe VI para avanzar en la financiación del desarrollo: "los ojos de millones están puestos en esta conferencia, sus esperanzas y necesidades merecen resultados, y ciertamente no merecen el fracaso y el engaño".