Elisa Mouliaá

Los audios entre Elisa Mouliaá y Soraya, una testigo del caso Errejón: "No digas cosas que puedan ir en mi contra"

Elisa Mouliaá. ep
Compartir

Soraya, una de las organizadoras de la fiesta en la que el exdiputado Íñigo Errejón habría supuestamente agredido sexualmente a Elisa Mouliaá, pidió a la actriz en una conversación privada que dejase de "inventar" y ésta le advirtió de cara a su declaración como testigo: "Si luego vas y dices que yo estaba súper happy me jodes viva".

Así se desprende del oficio elaborado por la Policía Nacional, en el que se recogen las conversaciones contenidas en el teléfono que la actriz aportó al Juzgado de Instrucción Número 47 de Madrid, que investiga a Errejón por un presunto delito de agresión sexual.

PUEDE INTERESARTE

La conversación entre Soraya y Elisa Mouliaá

La conversación entre Soraya y Mouliaá se remonta a febrero de 2025, meses después de que la actriz hubiese denunciado a Errejón. Ambas llevaban sin hablar desde 2022 por una serie de desavenencias hasta que la artista preguntó a la que fue su amiga si había hablado con la defensa de Errejón y si había pedido a otro testigo que le bloquease.

"Si me citan me ceñiré a los hechos que yo vi y viví, no a lo que otros piensan o dicen de Errejón. Esto no va de ver si el chaval es buena o mala persona, esto va de una denuncia de acoso sexual que tú has puesto y a eso me ceñiré. Plantéate porque no hay nadie de esa fiesta que esté de acuerdo con tu testimonio en vez de intentar convencer a todos de que Errejón es un monstruo. Eso si quieres lo dejas para los platós de televisión. Nosotros somos personas con integridad", le indicó Soraya.

PUEDE INTERESARTE

Mouliaá envió varios mensajes a Soraya pidiéndole que dijese "la verdad" y asegurando tener "pruebas de todo". "No amenaces, Elisa. Yo responderé a lo que me pregunten que viví y sé. Punto. No más y no menos. Es mi deber como ciudadana. Lo que le haya hecho a otras, no lo sé. Y tampoco es el caso", le espetó la testigo.

En medio de ese cruce de mensajes, la actriz advirtió a Soraya sobre su declaración: "No digas nada que me contradiga (...). Yo ya me estoy defendiendo con pruebas. Si luego vas tú y dices que yo estaba súper happy me jodes viva. Porque no lo estaba, yo estaba ilusionada y confundida. No entendía mucho que el tío fuese tan guarro sin haber hablado conmigo (...) Limítate a decir lo que te conté".

Un mes después, la actriz volvió a mensajear a Soraya. "Solo te escribo para decirte que en esa fiesta además de la coca que todos se pusieron, bebimos. Yo me bebí tres copas servidas por Errejón. Si no os acordáis no es mi problema, este señor ha violado a más de 6 mujeres que yo sepa porque me han llorado al teléfono, y yo tengo la obligación de contar lo que me hizo esa noche", aseguró.

La testigo, sin embargo, pidió a Mouliaá que dejase de enviarle ese tipo de mensajes y de convencerla "de nada". "A mí me llamarán para declarar mi testimonio sobre los hechos, no sobre mi opinión de lo que Íñigo Errejón ha hecho o dejado de hacer en otros momentos con otras mujeres (...) Lo segundo, las copas no las servía Iñigo (...) Dedícate a decir tu verdad y yo diré la mía. Y que juzgue quien tenga que juzgar sobre lo que pasó aquella noche", contestó.

Mouliaá acusó a Soraya de tener "una distorsión de todo" y de sufrir un "problema mental" por "dejar de apoyar" a su amiga. "Que te entren a saco no es un delito. Te entró a saco y no te gustó, a mi tampoco me gustaría. Pero de ahí a un delito y meter a alguien en la cárcel es un salto cualitativo", afirmó la testigo.

Las explicaciones de Elisa Mouliaá: "Se aprovechaba de la situación en la que estaba"

En los audios, Elisa Mouliaá explicaba su punto de vista sobre lo ocurrido y el motivo de su denuncia sobre Errejón: "Yo no le estoy denunciando porque crea que sea un delito, yo tampoco creo que fuese un delito, pero yo tuve que contar lo que a mí me hizo porque todo explotó por miles de denuncias anónimas. El 25 de octubre todo explotó por muchas denuncias anónimas contra este tío y entonces él dimitió. Al haber dimitido, yo recordé lo que a mí me hizo", explica Mouliaá.

"Recordé que fue un tío que, sin hablar prácticamente conmigo, sin tontear, sin hacer nada, ya directamente por ser quienes y por haber quedado con él, me encerró en una puta habitación y luego me llevó a su casa y me volvió entrar a saco. Pero no es entrar, no es dar un beso, me tocó por todos lados, me lamió por todos lados y fue asqueroso. Y yo en ese momento, pues yo no lo consideraba un delito, ¿sabes? Ni lo consideraba, ni igual ahora tampoco. Porque estamos demasiado acostumbradas a los babosos. Lo que pasa es que este tío ha hecho abuso de poder. Se aprovechaba de la situación en la que estaba. A mí no me ha dado por denunciar a este tío así porque sí, de repente", continúa explicando.

"Yo no me tengo que inventar nada, no me voy a inventar nada. Si hubiese querido inventar algo, hubiese dicho que me había violado. Pero yo no me he inventado nada. Nada", zanja la actriz.