Tras constatar las "muy cordiales" relaciones entre España y Marruecos, Velázquez ha explicado que el miércoles se reunió con responsables de la Gendarmería y del Ministerio del Interior marroquí para resolver el conflicto, que "ya se ha solucionado". Precisamente, Rubalcaba y su homólogo marroquí, Taieb Cherkaoui, comparecerán el lunes en Rabat para explicar el contenido de la reunión que previamente mantendrán, en la que abordarán, además del conflicto en Melilla, la lucha contra el terrorismo, la inmigración ilegal o el tráfico de drogas.
Mientras, la frontera de Beniz-Enzar de Melilla con Marruecos ha recuperado la normalidad y se han retirado la veintena de pancartas críticas contra España, así como las banderas marroquíes que fueron colocadas por activistas de ese país.
El tráfico de vehículos y ciudadanos en dirección a Marruecos ha sido fluido, mientras que el del país vecino hasta Melilla ha sido denso en las primeras horas del día.
El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, sigue criticando la falta de "firmeza" y de "contundencia" del Gobierno ante la actuación de "cuatro desalmados" que han boicoteado el tránsito de mercancías en la frontera.
Imbroda ha reprochado también ha Rubalcaba que no "levantara la moral" de "su gente" y que no le haya llamado tras los incidentes, si bien ha deseado "fervientemente" al ministro de Interior que tenga éxito en la reunión del lunes con las autoridades marroquíes para resolver un "espinoso asunto".
Desde las filas socialistas, la secretaria de Política Internacional, Elena Valenciano, se ha mostrado convencida de que el Gobierno arreglará "las cosas" con Marruecos "a pesar" del PP y de "su deriva irresponsable", haciendo referencia a la visita de Aznar a Melilla.
El sindicato Unión Federal de Policía (UFP) ha registrado un escrito en el que pide que Rubalcaba visite el puesto fronterizo para ver directamente cómo está la situación y apoyar a las mujeres policías, a las que ha homenajeado el Sindicato Unificado de la Policía (SUP).
El lunes la Diputación Permanente del Congreso se reunirá para debatir la petición de algunos grupos de que comparezcan Rubalcaba y el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, para explicar los incidentes.
Más de diez puestos de pescado del Mercado Central, el más importante de Melilla, han permanecido cerrados por un problema burocrático con el que se ha encontrado una de las trece furgonetas que han pasado la frontera desde Marruecos cargadas con mercancía, únicamente por llevar más mercancía que la declarada.
La Delegación del Gobierno en Melilla ha asegurado que no existe ningún problema al respecto, ya que esta situación sólo ha ocurrido con una de las trece furgonetas que han pasado cargadas de pescado desde Marruecos.
Por este incidente, según ha explicado el portavoz de los pescaderos, ni él ni sus compañeros podrán poner a la venta los cerca de 70 kilos de pescado que ha comprado cada uno hasta mediodía por este problema.
Relativa normalidad en Melilla