Los estados republicanos impulsan leyes para restringir el voto

  • Los legisladores republicanos buscan la restricción del voto, especialmente en estados péndulo como Arizona o Pensilvania, que cambian su voto cada cuatro años

La lucha por el voto ha comenzado de nuevo para los políticos estadounidenses. Cinco meses después de que Biden alcanzara la presidencia, hasta catorce estados han emitido 22 leyes nuevas para verificar el derecho al voto, en todo el país, con el objetivo de dificultar el voto ausente y por correo, que facilitó la victoria demócrata.

Además, justificando una búsqueda de seguridad electoral, puesta en duda por Trump en los anteriores comicios, los legisladores republicanos han presentado 361 proyectos de ley en 47 estados de los 50 que tiene el país, de los que de momento han prosperado 61, según el Centro Brennan por la Justicia, especializado en temas de política y derecho.

Los republicanos argumentan que los cambios tendrán un impacto mínimo en los votantes y están destinados a aumentar la confianza del público. “Va a seguir siendo muy fácil votar después de que esta legislación se convierta en ley”, asegura el representante de Iowa Bobby Kauffman: "Este proyecto de ley protege el derecho al voto de los habitantes de Iowa y le agrega certeza y seguridad".

Limitaciones para votar

Algunos estados incluyen con la nueva legislación la solicitud de identificación de los votantes a pesar de que los estadounidenses no disponen de un carné de identidad ni cédula de identificación para ello, más allá de la licencia de conducir, algo de lo que carecen los ciudadanos de rentas más bajas.

Y es que en Estados Unidos no existe un organismo independiente que regule las elecciones, por lo que son los estados los responsables de ello. Algunos como Montana, Iowa, Texas, Florida y Georgia ya han aprobado medidas para restringir el acceso a las votaciones, a través de la limitación del uso de buzones y la prohibición de ofrecer agua o comida a los votantes, mientras esperan su turno al voto en una cola.

Record de participación, covid y estados péndulo

No hay que olvidar que las pasadas elecciones estuvieron marcadas por un récord histórico de participación que benefició a Biden. Debido a que la pandemia había confinado en sus casas a millones de estadounidenses, algunos estados promovieron la ampliación de las posibilidades del voto por correo, algo que finalmente resultó en contra de los intereses de Trump.

Por ello los legisladores republicanos buscan su restricción, especialmente en estados péndulo como Arizona o Pensilvania, que cambian su voto cada cuatro años y suelen ser definitivos en procesos electorales de resultado ajustado. Pero la batalla se está jugando en numerosas partes del país. De hecho, no está claro que esta legislación no termine por perjudicar también a los republicanos, y algunos de sus líderes alertan sobre ello, como el representante de Texas Lyle Larson quien ha asegurado que "Las tácticas de represión incluidas en este proyecto de ley dañarían al Partido Republicano tanto o más que a su oposición"

Texas

Este es el estado que ha aprobado las propuestas más restrictivas. El domingo pasado, tras ocho horas de debate, los republicanos consiguieron sacar adelante una ley que directamente elimina algunas maneras de votar (como hacerlo desde el coche o los centros de votación abiertos durante 24 horas) y sanciona penalmente a funcionarios electorales por el envío de papeletas electorales a quienes no las haya solicitado.

Empresas como American Airlines o Dell, con sede en Texas, han mostrado su rechazo por el daño que ello puede hacer al clima político y las consecuencias económicas que pueden derivarse de ello.

Florida y Georgia

También Florida, estado gobernado por Ron de Santis, un posible futuro candidato presidencial republicano, firmó el mes pasado una ley que reduce el número de buzones de voto por correo y prohíbe el uso de fondos privados para gastos electorales. La firma de la ley se produjo cerca de la residencia de Trump, en un acto con simpatizantes republicanos y con la exclusiva de la cadena Fox, que fue el único medio al que se permitió la entrada.

Brian Kemp, el gobernador de Georgia, también ha firmado una ley estatal que añade nuevos requisitos para poder votar en las próximas elecciones como la reducción del horario y los lugares de votación, restricción del acceso al sufragio por correo (con el establecimiento de menos buzones para ello) o la reducción de la autoridad electoral del Secretario de Estado. Este estado fue uno de los que cambiaron su voto tradicionalmente republicano a demócrata, en las últimas elecciones, con solo 11.779 papeletas de diferencia.

Reacción demócrata

El propio Biden se ha pronunciado ante estas medidas calificándolas como “un asalto a la democracia”, al referirse al proyecto de ley de Texas. Y llamó a “defender el voto a los estadounidenses de todos los partidos y creencias”, el sábado pasado, ante el ataque “al sagrado derecho al voto” de dicha medida, según la agencia EFE.

También se refirió a las propuestas aprobadas en Georgia y sobre ambas, en un comunicado difundido por la casa Blanca, señaló que son “parte del asalto a la democracia que hemos visto con demasiada frecuencia este año”. El presidente considera que estas medidas dificultan el derecho al voto “de manera desproporcionada de los afroamericanos” y llamó al Congreso para evitarlo a través de la aprobación de una ley federal llamada Ley por la Gente y el progreso del derecho al voto John Lewis, en honor al defensor de los derechos civiles del mismo nombre.