Este es el pueblo de Cataluña que debe su origen a una diosa de la mitología
Aiguamúrcia es un pueblo tarraconense con diversas teorías sobre el origen de su nombre, entre ellas una relacionada con la mitología romana.
La segunda parte del nombre del pueblo sería en honor a la diosa de la mitología romana Murtra, relacionada con Venus, la diosa del amor y la belleza.
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TarragonaCon el auge del turismo rural, podemos descubrir pueblos que sean un tesoro por muchos posibles aspectos. Desde su belleza natural, construcciones antiguas, sus gentes y costumbres... o incluso por lo peculiar que puede ser sus orígenes y el nombre con el que se conoce a dicha población. Este es el particular caso de Aiguamúrcia, el pueblo tarraconense que debe su origen a una diosa de la mitología romana.
Un pueblo catalán con agua de diosa
Situado entre el monte de Montagut y la Sierra de Montmell, la zona montañosa que separa el Penedès del Camp de Tarragona, el municipio de Aiguamúrcia es el más grande e importante de esta zona. Si buscamos en los orígenes de este peculiar nombre para un municipio que ni está en Murcia ni cerca del mar como para estar encabezado su nombre por la palabra agua, encontraremos dos posibles teorías para haber evolucionado hasta el nombre actual. Ambas, eso sí, tiene que ver con las aguas del Río Gaià.
La primera de estas teorías tiene que ver con la parte más geográfica de la ubicación de esta localidad de unos 1.000 habitantes. Cuando las aguas del río llegan a la altura del pueblo, se estancan, lo que en latín se consideraban aguas estancadas, derivando al catalán aigua morta (aguas muertas), un término que evolucionaría hasta el actual Aiguamúrcia.
El otro posible origen del nombre tiene que ver con una diosa de la mitología romana. Concretamente Murtra, también denominada con otros nombres como Murcia, Murtia, Murtea, Myrtea o Mirtea y más conocida por Venus, siendo otra forma de conocer a la diosa del amor y la belleza, la equivalente a Afrodita de la mitología griega. En este segundo posible origen, Aiguamúrcia vendría del latín Aquae Murtra, siendo a la diosa a quienes habrían consagrado las aguas del río Gaià.
Esta diversidad de teorías sobre el origen del nombre de este pueblo incluso figura en el libro titulado 'Toponimia de España: Estado actual y perspectivas de la investigación', coordinado por María Dolores Gordón Peral. En su página 317 se expone este particular caso sobre el que han hablado otros autores. “Menéndez Pidal en 1951 y en vista de la existencia de diversos nombres homónimos [al topónimo murciano] en la Península (especialmente el tarraconense Aiguamúrcia), estableció como origen un latinismo, Aqua Murcida, 'agua perezosa, quieta, detenida' (consultar el apelativo gallego murcio). Avala esta etimología del maestro de la Filología Álvaro Galmés de Fuentes (2000), (…) también frente a la postulada por González Blanco, quien ve en el nombre de la ciudad la continuación de una forma latina, Murtea, 'lugar poblado de mirtos' (interpretación que defienden también otros autores recientes, como Fernández López. Para otros, el nombre de la ciudad remonta a la denominación de un predio romano basado en el antropónimo Murtius (Fernández Nieto/Molina Gómez, 2006), interpretación perfectamente plausible desde el punto de vista histórico y lingüístico”. Como se puede apreciar, ni entre expertos ha habido consenso.
Un monasterio que no te puedes perder y turismo enológico
Si te animas a hacer turismo por Aiguamúrcia, puede que el origen de la diosa de la mitología romana, incluso si estuviera 100% confirmado como el real, no fuera suficiente para visitar esta localidad. Sin embargo, no faltan atractivos turísticos para ir allí a hacer una visita. El pilar de Aiguamúrcia es el Monasterio de Santes Creus, declarado Monumento Nacional y uno de los más importantes de Cataluña y reflejo de una arquitectura perfecta para observar la transición del románico al gótico.Si te gusta el turismo relacionado con el vino, deberías hacer parada obligatoria en la bodega cooperativa modernista de Cèsar Martinell. Este edificio del Sindicato Agrícola de Aiguamúrcia atrae por igual a los amantes de la cultura vinícola junto con los del estilo modernista. Si te gustan ambos, estás de enhorabuena. Además de esta, cuenta con otras bodegas productoras de cava y vino de la Denominación de Origen Penedès.
Este monasterio cisterciense, hoy en día ya no dedicado al ámbito religioso (en 1835 se produjo la exclaustración), forma parte de la Ruta de los Reales Monasterios de Cataluña junto con los de Poblet (en Conca de Barberà) y Vallbona de les Monges (Urgell). Forma un magnífico conjunto arquitectónico en el que también destacan el Palacio del Abad del siglo XVII, la plaza de Sant Bernat y la fuente del mismo nombre, que contrastan con el monasterio mostrando su estilo barroco. Todo ello rodeado de naturaleza entre las aguas del río, las tierras de secano y las frondosas arboledas, destacando la Arboleda de Santes Creus y su árbol monumental "El Pollancre", nombre catalán para “el chopo”.
Si te gusta el turismo relacionado con el vino, deberías hacer parada obligatoria en la bodega cooperativa modernista de Cèsar Martinell. Este edificio del Sindicato Agrícola de Aiguamúrcia atrae por igual a los amantes de la cultura vinícola junto con los del estilo modernista. Si te gustan ambos, estás de enhorabuena.