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Aumenta la preocupación por los supuestos nuevos casos de intento de sumisión química en nuestro país. En Lloret de Mar, en Gerona, se han disparado las denuncias. También en otros puntos de Cataluña, aunque no se ha proporcionado más información. Las denuncias también aumentan en el País Vasco. En la localidad guipuzcoana de Zarautz, dos menores han sido trasladadas al hospital tras sentir sendos pinchazos. Sin embargo, de momento, en estos casos, no consta denuncia.
Hasta el viernes, los Mossos d'Esquadra han recibido 17 denuncias por pinchazos en discotecas de Lloret de Mar (Gerona) y Barcelona. En este contexto, la consellera de Igualdad y Feminismos de la Generalitat, Tània Verge, ha pedido "mantener la calma" en un tuit, informando de que la Generalitat ha actualizado los protocolos sanitarios para atender a las víctimas y ha intensificado la vigilancia policial.
A su vez, ha llamado a la responsabilidad a la hora de informar sobre los hechos, preservando la libertad sexual y no crear "un clima de terror sexual", huyendo de mensajes informativos alarmantes, morbosos y que responsabilicen a las víctimas.
Ha recordado que en los casos de pinchazos denunciados "no se han producido agresiones sexuales" y ha explicado que, en caso de notar un pinchazo, las afectadas deben pedir ayuda a las amistades o en los espacios habilitados y evitar ir a su casa directamente, dirigiéndose antes a un hospital.
Asimismo, se ha dirigido a las personas que salen de fiesta: "Si identificas una conducta sospechosa, o ves a una persona que no se encuentra bien, avisa a los responsables del local o del punto lila", les ha pedido, así como que no dejen sola a la afectada y, en casos urgentes, llamen al 112. También ha pedido tener "cero complicidad con colegas que usen drogas o alcohol para conseguir acercarse a alguien" y ha advertido de que se trata de un delito grave, por lo que hay que confrontar a los agresores, explicarles las consecuencias y ser contundentes en el rechazo.
Por último, Verge ha instado al personal de los espacios de ocio, a taxistas y a personal del transporte público a ponerse a disposición de las víctimas si lo necesitan, siguiendo los protocolos y llamando al 112 en caso de ser necesario.
Por su parte, el Ayuntamiento de Barcelona ha comunicado que trabaja en la ampliación del número de itinerarios seguros, además de otros recursos para prevenir y detectar violencias sexuales en los entornos de ocio nocturno, como mejorar la señalización desde estos locales hasta el transporte público. También prevé mejorar otros aspectos urbanísticos que favorezcan la sensación de seguridad, ampliar y revisar el protocolo 'No callem' para la atención de violencias sexuales, y contempla la colaboración con Metro de Barcelona y con el sector del taxi.
Así lo han anunciado en una sesión de trabajo con periodistas la subinspectora de la Guardia Urbana, Gemma Alfonso, y la gerente del área de Seguridad y Prevención, Maite Casado, acompañadas de responsables del proyecto del área de Feminismos y de Ecología Urbana, así como de representantes del sector del ocio nocturno y de la seguridad privada. Todos ellos se han mostrado preocupados por los pinchazos a mujeres que se han registrado en discotecas de Lloret de Mar (Gerona) y Barcelona.
Por otro lado, también en las últimas horas dos menores han asegurado haber sufrido pinchazos sobre las 22 horas del viernes y poco después de las 00.30 horas del sábado, durante y después de la celebración de un concierto multitudinario en el malecón en Zarautz (Guipúzcoa).
Aunque la Ertzaintza no ha registrado por el momento ninguna denuncia por parte de las víctimas, sí tiene constancia de ambos sucesos y de que las chicas han sido atendidas, una en un centro hospitalario y la otra en un ambulatorio.