Dieta Perricone: Así es el régimen que seguiría la Reina Letizia para perder kilos sin pasar hambre

Con la Semana Santa ya terminada y las temperaturas disparadas, la operación bikini de cara a este verano coge cada vez más fuerza. Cada año, son múltiples las dietas que se ponen de moda para reducir los kilos de más y ganar en salud. Los especialistas alertan del peligro de no alimentarse bien y reclaman más atención al ejercicio físico. Por eso, una de las que más adeptos sigue ganando es la conocida como dieta Perricone, quizás porque una de sus principales seguidoras sería la reina Letizia que cada día muestra un envidiable aspecto físico completado con una piel suave y muy bien cuidada.

Nicholas V. Perricone es un famoso médico y empresario estadounidense de 74 años que da su apellido a este célebre dieta a la que se suman muchos famosos año tras año. Desde su especialidad como dermatólogo se ha dedicado a escribir libros que ayudan a las personas a perder peso al tiempo que luchan contra las señales del envejecimiento logrando conservar una aspecto juvenil a pesar del paso de los años. 

Los alimentos antiinflamatorios constituyen la base de la dieta Perricone

Está basada en la teoría de que la inflamación es la causa principal de muchas enfermedades, además del envejecimiento. Por ello se centra en alimentos antiinflamatorios y antioxidantes, y es popular entre las personas que buscan mejorar su piel y su salud en general. Como informan en su página web, se trata de una sistema de alimentación que se desarrolla a lo largo de 28 días, aunque también es posible empezar por un periodo más corto de solo un fin de semana. En ambos casos, se trata de una alimentación regulada que se complementa con suplementos nutricionales.

¿Qué alimentos incluye la dieta Perricone? Principalmente utiliza alimentos frescos, naturales y orgánicos, y se enfoca en alimentos ricos en ácidos grasos esenciales, proteínas de alta calidad y nutrientes antiinflamatorios. Algunos de los alimentos que se incluyen en la dieta Perricone son:

  • Pescado azul: como el salmón, el atún, las sardinas y el arenque, que son ricos en ácidos grasos omega-3.
  • Frutas y verduras: especialmente aquellas con alto contenido en antioxidantes, como las bayas, las manzanas, los aguacates, los espárragos, el brócoli y las espinacas.
  • Frutos secos y semillas: como las nueces, las almendras, las semillas de lino y las semillas de chía, que son ricas en ácidos grasos esenciales y antioxidantes.
  • Proteínas magras: como el pollo, el pavo, el huevo y la proteína en polvo de alta calidad.
  • Grasas saludables: como el aceite de oliva virgen extra, el aceite de coco y la mantequilla clarificada.

Por el contrario, hay alimentos que está vetados en la dieta Perricone. Entre los que no se pueden incluir en nuestras comidas destacan los alimentos procesados, los ricos en grasas saturadas y trans, los que presentan un alto contenido de azúcar y los que tienen alto contenido de carbohidratos refinados. Por ello, a la hora de empezar con la dieta Perricone, estos son los alimentos que debes evitar en la medida de lo posible:

  • Carnes rojas y procesadas: como la carne de ternera o el cerdo y sus derivados ya que son ricos en grasas saturadas y trans.
  • Productos lácteos: como la leche, el queso y el yogur, que pueden causar inflamación en algunas personas.
  • Azúcar refinada: como el azúcar blanco y la miel, que pueden aumentar la inflamación y los niveles de azúcar en la sangre.
  • Carbohidratos refinados: como el pan blanco, el arroz blanco y los alimentos procesados con harina blanca, que pueden aumentar los niveles de azúcar en la sangre y contribuir a la inflamación.

¿Cómo es el día a día de la dieta Perricone? La dieta Perricone se basa en una alimentación saludable y equilibrada, y se recomienda comer cinco o seis comidas pequeñas al día para mantener los niveles de energía y evitar los antojos. Un ejemplo de un día típico en la dieta Perricone podría ser:

  • Desayuno: batido de proteínas con bayas, semillas de chía y aceite de coco.
  • Media mañana: un puñado de almendras acompañadas con una manzana.
  • Comida: ensalada de salmón con aguacate, espinacas y aceite de oliva.
  • Merienda: batido de proteínas con espinacas, plátano y semillas de lino.
  • Cena: pollo a la parrilla con espárragos y brócoli al vapor.
  • Postre: Frutos rojos con yogur griego sin azúcar.

¿Cuáles son los principales beneficios y peligros de seguir una dieta como la Perricone?

Siempre que empezamos una dieta, hay que hacerlo bajo vigilancia médica. Nuestra salud es algo muy preciado que no debemos poner en peligro por perder unos kilos de más. La diete Perricone, como todas las demás deben de estar guiadas por expertos en nutrición para adaptarla a nuestro organismo y nuestra posibilidades. En términos generales, este sistema de alimentación se ha asociado con varios beneficios para la salud, incluyendo una piel más saludable, una reducción en la inflamación y la prevención de enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardíacas o, incluso, el cáncer. Como consecuencia, puede ayudar a perder peso y mejorar los niveles de energía.

Sin embargo, como con cualquier dieta, la dieta Perricone puede tener algunos riesgos potenciales, especialmente si se sigue a largo plazo. Por eso ha que dejarse asesorar por especialistas que eviten que el déficit en la ingesta de determinados alimentos no sea bien compensada con el objetivo de evitar deficiencias nutricionales, ya que, si no se planifica adecuadamente, la dieta Perricone puede llevar a deficiencias de nutrientes importantes como el calcio, el hierro y las vitaminas del complejo B. En relación con todo ello, también hay que vigilar las excesivas restricción calórica lo que puede llevar a una falta de energía y fatiga.

Otro de los elementos negativos de este tipo de dietas tan selectivas con el tipo de alimentos que ingerimos tiene que ver con el alto precio de algunos de sus propuestas alimenticias ya que se basa en alimentos frescos y orgánicos, lo que puede ser costoso para algunas personas.

Finalmente, no hay que olvidar que como cualquier dieta es difícil de completar ya que requiere una planificación y preparación cuidadosas, y puede ser difícil de seguir a largo plazo.