Sin rastro de Alejandro Aranda en Valladolid más de una semana después: batidas masivas, un brote psicótico y una maleta en la calle
Alejandro Aranda Lasheras, un joven de 30 años natural de Alcalá de Moncayo, desapareció en Valladolid hace más de una semana
La Asociación SOS Desaparecidos, por su parte, ha activado la red de cajeros automáticos Euronet ATM para difundir la alerta de búsqueda
La desesperación de la familia de Alejandro Aranda, desparecido en Valladolid: "Sufre esquizofrenia y podría haber dejado de tomar la medicación"
Ha pasado más de una semana desde que Alejandro Aranda Lasheras, un joven de 30 años natural de Alcalá de Moncayo, desapareciese en Valladolid, donde se encontraba trabajando como guía turístico del Imserso. De momento, y a pesar de las batidas masivas realizadas este fin de semana tanto por el barrio de Delicias como por el medio rural, no le han encontrado, así que este lunes han vuelto a salir a buscarle. La Asociación SOS Desaparecidos, por su parte, ha activado la red de cajeros automáticos Euronet ATM para difundir la alerta.
Alberto, uno de sus amigos, ha confirmado a EFE que permanece activo un dispositivo "muy reducido" para continuar con la búsqueda y, como ha señalado Isabel Aranda, hermana de Alejandro, todavía queda una veintena de personas que van a seguir y tanto su padre como ella van a quedarse en Valladolid "hasta que aparezca", porque aunque el sábado y el domingo hicieron batidas masivas, no le encontraron.
Dos batidas masivas sin éxito
En la batida del sábado, que partió de Laguna de Duero, a unos 10 kilómetros de Valladolid, participaron 139 voluntarios, muchos de ellos venidos de la comarca zaragozana de Tarazona y Moncayo desde donde se fletó un autobús, que centró su búsqueda en el entorno de la capital, especialmente en el barrio de Delicias, el más grande de la ciudad.
Este domingo, aunque el punto de encuentro volvió a ser Laguna de Duero, el objetivo se centró en el medio rural del alfoz vallisoletano: pueblos como Zaratán, Arroyo de la Encomienda o la propia Laguna de Duero, ya que Alejandro Aranda es muy aficionado a la naturaleza.
¿Qué se sabe de la desaparición de Alejandro Aranda?
Alejandro Aranda Lasheras desapareció la noche del sábado 22 de marzo. El joven llegó al Hotel Olid el sábado por la mañana y, a media tarde, algunos testigos observaron que parecía encontrarse alterado, aunque sin mostrar comportamientos agresivos.
“Alejandro sufrió un brote psicótico y empezó a comportarse de forma extraña”, explica su hermana Isabel a ‘El Norte de Castilla’, señalando que el joven sufre esquizofrenia que le fue diagnosticada hace cinco años y temen que pudiese haber dejado de tomar la medicación.
Esa misma noche, el joven abandonó el hotel y no se volvió a tener noticias suyas. Su teléfono móvil quedó en la habitación y su maleta fue encontrada en la Calle San Quirce, cerca del Museo Nacional de Escultura.
No obstante, Adrián Villalba, un amigo íntimo suyo, asegura al mencionado medio que una nueva pista le sitúa en la ciudad el lunes 24.
Desde su desaparición, Policía Nacional y Guardia Civil buscan al joven, se ha activado un señalamiento policial en toda España y se han dispuesto unidades de drones de ambos cuerpos para rastrear las riberas del río Pisuerga.
Sin embargo, según informó el subdelegado del Gobierno, Jacinto Canales, a EFE, "no hay ninguna pista ni ningún indicio y es una desaparición que nos preocupa bastante porque el joven -profesor e historiador- está en condiciones físicas importantes y podría haber recorrido mucho camino desde el domingo que desapareció".
La descripción física de Alejandro Aranda responde a la de un chico alto, de 1,88 metros, de complexión normal, pelo castaño y ojos verdes, vestido con una chaqueta de cuero.
En el cartel de búsqueda, se difunde una fotografía para ayudar a localizarle. Sin embargo, la imagen actual de Alejandro no corresponde exactamente, porque el mismo día de su desaparición se cortó el pelo muy corto por los laterales.
En caso de ser localizado o avistado, se recomienda actuar con calma y llamar inmediatamente a los teléfonos del servicio de Emergencias Castilla y León (112), de la Policía Nacional (091) o de la Guardia Civil (062).
Además, desde SOS Desaparecidos piden que cualquier persona que pueda aportar información se ponga en contacto con los teléfonos 649 952 957 o 644 712 806.
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