Los dos detenidos por el crimen de Matilde Muñoz, la española hallada muerta en Indonesia, se acusan mutuamente
Los detenidos por el crimen, dos hombres de 30 y 34 años, están acusados de homicidio premeditado y robo con violencia
Los detenidos por el asesinato de Matilde Muñoz en Indonesia tenían relación con el hotel donde se alojó: uno trabajaba allí y otro era exempleado
Los detenidos por el crimen de Matilde Muñoz, la turista española hallada sin vida en Indonesia, son dos hombres de 30 y 34 años. Ambos han confesado el crimen crimen como un intento de robo y se acusan mutuamente. Uno de ellos era trabajador del hotel donde se hospedaba y otro extrabajador.
Los dos presuntos autores de la muerte de la española Matilde Muñoz en Lombok están acusados de homicidio premeditado y robo con violencia y, según la Policía indonesia.
Hasta llegar a este punto de la investigación, la dejadez, inacción cuando no la torpeza habían sido el día a día de la investigación, según denuncia el entorno de la fallecida. "Allí, esa habitación ha estado abierta hasta que han aparecido las cosas de Mati, un mes y medio. No sabemos cuánta gente ha entrado", señala su amiga Marta Garrido.
El cuerpo, hallado tras dos meses
Las autoridades han tardado dos meses en encontrar el cuerpo semienterrado en una playa a apenas 500 metros del hotel de donde desapareció.
El hallazgo se produjo el sábado después de que familiares y amigos denunciaran a los medios de comunicación la poca implicación de las autoridades locales y la embajada española.
Desde su entorno, dicen “que en este hotel pasaban cosas, que habíamos mirado reviews en Google y que había habido más robos", cuenta su amiga Olga Marín.
A partir de ahí todo ha ido rápido con pesquisas que apuntan a que los detenidos entraron en la habitación de su hotel por la ventana para robar y acabaron matando a Mati, se cree que estrangulada. Los detenidos han reconocido que cuando intensificaron la investigación cambiaron el cadáver de sitio: de un vertedero junto al lugar del crimen al fondo de un barranco en la playa más cercana.
Las sospechas de la familia se centran en el entorno del hotel
Su entorno cercano siempre sospechó de la implicación de personas del entorno del alojamiento, teoría que parece confirmar el hecho de que uno de los detenidos era trabajador del hotel y el otro extrabajador. “Más que sospecha, es que es alguien del hotel. ¿En colaboración con alguien de fuera? Puede ser, pero para nosotros, hotel culpable 100%”, dice Marín.
Además, hay otros indicios que apuntan al establecimiento como un supuesto whatsapp facilitado por el hotel a la familia en que la víctima decía que se iba a Laos con un inglés repleto de errores, algo impropio de alguien que había sido azafata de vuelo y profesora de inglés.
“Decimos que raro, porque ese mensaje era raro y ya cuando hablé con Nacho, el sobrino, dice: ‘¿Tú crees que ese mensaje es de mi tía?’. Y digo: ‘La verdad es que no’”, comenta Ana Jorbe, otra amiga de la familia.
Maite de 72 años era de Ferrol pero tenía su residencia en Mallorca aunque apenas pasaba tiempo en su casa porque la alquilaba para costearse los viajes una de sus pasiones junto al yoga. Llevaba años viajando por Asia. El 29 de junio felicitó a su hermano y el 1 de julio mandó un mensaje a unos amigos. Desde entonces no se supo nada más.
La investigación tendrá que determinar si hubo alguien más implicado y qué ocurrió realmente en la habitación de hotel.