Homenaje a los héroes del incendio de la residencia en Moncada: "Salvar a todos los que pudiésemos, no pensamos nada más"

Este viernes se ha celebrado un homenaje a los héroes que salvaron a 38 ancianos de las llamas en la residencia de Moncada donde un incendio, provocado por una “anomalía eléctrica” en una regleta, provocó la muerte de seis residentes.

Los agentes de la Guardia Civil que pusieron en riesgo sus vidas para liberarlos del fuego han sido alabados por su rápida respuesta, que salvó a muchos mayores de morir asfixiados por el humo.

"No se podía respirar"

La situación que se encontraron al entrar en la residencia era crítica, y tuvieron que actuar antes que pensar, tal como han relatado:

“Andabas 15 metros y te tenías que echar al suelo… No se podía respirar”. “Se veían las llamas, había muchísimo humo”. “Todas las personas eran impedidas y había que sacarlos en brazos, con la propia sábana de la cama…” “Con cualquier cosa que se tuviera se cogía. Era sacar al máximo número de personas”. “A salvar a toda la gente que pudimos, no pensamos nada más”, han contado Juan Olivares, sargento de la Guardia Civil de Moncada; Coromoto Souta y Jairo Aldonza, también de la Benemérita.

"Tuvimos que utilizar todo tipo de recursos para evacuar al mayor número de personas"

Los tres participaron en el rescate de los ancianos y han destacado la coordinación y rapidez del dispositivo para evitar que la tragedia fuera a más: "Salvamos vidas, y con eso nos tenemos que quedar porque lamentablemente no pudimos salvar a todas", ha expresado Juan Olivares, quien junto a sus compañeros ha sido recibido por la delegada del Gobierno, Gloria Calero, como reconocimiento a su labor en el incendio del miércoles.

Los guardias civiles han señalado que les dieron el aviso enseguida y llegaron "lo más rápido" que pudieron. Se encontraron la cortina de humo en el ala derecha de la residencia, donde era "imposible acceder" y había unos 40 residentes.

Entonces, pudieron sacar a las primeras personas de esas habitaciones, tras lo que esperaron a la llegada de los bomberos con equipos especializados de oxígeno y procedieron a evacuar a los residentes de la segunda planta, también afectada por el humo. La mayor "desgracia", han lamentado, es que todas las personas de la primera planta eran impedidas.

"Tuvimos que utilizar todo tipo de recursos e inventiva para evacuar lo más pronto posible al mayor número de personas. Era nuestra única fijación", ha subrayado Souto, agente gallega destinada al puesto de Tavernes Blanques (Valencia). De hecho, llegaron a sacar a los residentes de la cama con las propias sábanas, en silla de ruedas, en brazos, entre dos agentes o "cargando como se podía con cualquier cosa".

"No estás pensando en tu vida ni en tu familia, piensas en esas personas"

Emocionado, el sargento Olivares ha recordado que lo más complicado fue el rescate en las habitaciones cercanas al foco del incendio: "En ese momento, la adrenalina se dosifica de tal manera que no estás pensando en tu vida ni en tu familia, piensas en esas personas".

En esta línea, ha destacado también la colaboración y el "sentido común" de la Policía Local, los efectivos de bomberos y "un par de celadoras de la residencia que hicieron más de lo que les correspondía".

El agente Aldonza ha añadido que la cantidad de humo era "considerable" y les dificultó muchísimo el rescate, aunque "no se paralizó en ningún momento". "Nos motivó para sacar cuanto antes a esas personas", ha aseverado, para celebrar la rapidez y el resultado de la cadena humana que se formó y "ayudó muchísimo".

"Lo volvería a hacer una y mil veces"

Del mismo modo, los agentes de la Benemérita han puesto en valor la buena colaboración de los residentes que no se podían valer por sí mismos, ya que muchos de ellos "tampoco eran muy conscientes de lo que estaba sucediendo". "Lo volvería a hacer; por supuesto, una y mil veces", ha recalcado el sargento Olivares.

Jairo Aldonza, por su parte, tras 13 años en el instituto armado, ha reconocido que esta actuación siempre será "especial" para él: "Al final hubo muchas vidas que se salvaron; por desgracia hubo otras que no, pero se hizo una gran labor".

A su vez, Souto ha hecho notar que a cualquier persona le pasaría, "no por ser guardia civil, porque ves una situación así y te lanzas". "Es como una madre que tiene que salvar a su hijo: para la Guardia Civil toda la sociedad son hijos", ha afirmado.

Tras remarcar que no siempre son "tan afortunados" de salvar a tanta gente en un suceso así, Coromoto Souto ha agradecido el reconocimiento tanto de sus compañeros como de su familia y sobre todo del resto de la sociedad. "Es verdad que la Guardia Civil siempre estamos, pero si no se nos nota es precisamente porque lo hacemos", ha señalado, porque aunque se diga que es "heroico" para ellos es su "forma de ser".

Por su parte, la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Gloria Calera, ha alabado la intervención de los efectivos: "Todos somos conscientes que, sin su actuación tan loable, posiblemente estaríamos hablando de una tragedia mucho más grande", ha dicho, recalcando que es de justicia reconocer el trabajo bien hecho.

Investigan si hubo irregularidades más allá de la regleta

Respecto a la investigación, la delegada del Gobierno ha puntualizado que la Policía sigue trabajando y "parece ser que tienen más o menos claro de dónde viene el incendio": una regleta en la habitación de la residencia donde se originó.

No obstante, ha remarcado que "se está investigando todo" y, preguntada por posibles irregularidades en la residencia, ha señalado que "la investigación está investigando más allá de la regleta y ya dirá qué fallos ha habido".Además, ha garantizado que se pondrán medidas para que "no vuelva pasar".