Tú ya lo sabes, tienes que ponerte algo encima del vestidito de tirantes, ahora te toca elegir: puedes arriesgar mucho o ser algo más contenida. Una capa, un abrigo estampado, uno hasta los pies, un mini plumas, un chaquetón de pelo e incluso una gabardina pueden convertirse en tus grandes aliados
Abrigo largo del color del vestido
Es la mejor manera de mantener el secreto de tu estilismo hasta el momento en que decidas quitarte el abrigo y una de las apuestas seguras para alejar el frío de tu cuerpo. Puedes ir a lo seguro y elegir uno negro, aunque lo más actual es coordinar en un solo color todo tu estilismo. Tejidos tienes para dar y regalar, elige el que más te guste, ya sea terciopelo, paño, lana, cuero…, pero no olvides que largo quiere decir largo, o al menos que no deje asomar demasiados centímetros del vestido.
Una capa de lana
Si estás dispuesta a arriesgar un poco más, tienes la opción de la capa. Es una prenda que por sí sola ya te viste y si el tejido es de lana, pues además abriga bastante. Tiene mucho de tradición, aunque se haya renovado hasta la médula, y a pesar de ser un clásico necesita a alguien con personalidad que sepa llevarla con estilo y soltura.
Estampados descoordinados
Si te gusta jugar al despiste tienes la opción de elegir un abrigo e incluso una gabardina estampada que no coordine en absoluto con el vestido que llevas debajo. Aquí vale todo, desde flores a cuadros pasando por todo el animal print del mercado, que hay mucho. Pero recuerda que la clave para sacar de fiesta un abrigo estampado y que no te ponga años es precisamente que los estampados no sean exactamente iguales, es mucho mejor combinar liso y estampado o que el abrigo no tenga nada que ver con el resto de tu look.
Un abrigo de pelo sintético
Combinar un estilismo de fiesta con un abrigo de pelo es un clásico y este año lo tienes muy fácil porque están por todas partes. Hay imitaciones tan bien hechas que pensarán que te has colocado el abrigazo de tu abuela y otras tan divertidas que ayudan a crear un estilismo más completo, así que lánzate a por este combo abrigadito con el que es imposible fallar.
Un jersey por debajo del vestido
No es ninguna locura, es un invento que usan muchas chicas cuando bajan las temperaturas y quieren seguir llevando su ropa de verano. Aquí vale todo, desde volverte loca y mezclar lentejuelas, estampados y colores, a ser comedida y elegir un suéter de un solo color. Y si entras en calor, siempre tienes la opción de quitártelo.