El padre Yaiza, la niña asesinada por su madre en Barcelona dice que ella también es un "monstruo"

  • Afirma huir de lecturas políticas de ningún tipo

  • Asegura que "no le importó que solo tuviera cuatro años"

  • Afirma que el machismo "es una lacra que debemos seguir combatiendo"

El padre de Yaiza, la niña de 4 años asesinada por su madre en Sant Joan Despí (Barcelona) el pasado 31 de mayo, ha expresado "todo su apoyo y solidaridad" a Beatriz, la progenitora de las dos menores desaparecidas en Tenerife, y ha denunciado que su exmujer "también es un monstruo".

El padre de la menor, Sergio, ha enviado una carta abierta a los medios de comunicación, recogida por EFE, después de que la semana pasada su exmujer ingresara en prisión provisional por orden del juez, acusada de matar a su hija, tras lo que intentó suicidarse.

"Ella también es un monstruo"

En la carta, el padre de Yaiza reprocha a su expareja que no tuviera "ningún respeto" por la vida de su hija y que la matara con el "único objetivo" de hacerle "daño" a él. "No le importó que solo tuviera cuatro años y toda la vida por delante", lamenta.

"Ella también es un monstruo. Todos lo son. Ahora me pregunto cómo no pude verlo", añade la carta, en la que Sergio afirma huir de lecturas políticas de ningún tipo. Si alguien quiere utilizar a los niños para hacerlas tendrá todo mi desprecio", insiste.

"Ahora me pregunto cómo no pude verlo. Me dicen que asuma que no había nada que yo hubiera podido hacer para evitarlo. Pero yo no puedo dejar de pensar en que le he fallado a mi hija. Perdóname, cariño, lo hubiera dado todo por protegerte de cualquier peligro", dice el padre.

Sergio expresa que "desde casa cruzaba los dedos como seguro hacían millones de personas deseando que ese monstruo no hubiera llegado a hacer lo que lamentablemente se confirmó la semana pasada". Para él, "nadie y mucho menos un padre puede creerse en el derecho de poder decidir cuando acaba la vida de sus hijas. Los niños deberían ser felices".

La misiva también hace una serie de reivindicaciones para tratar de dar todo el calor posible a Beatriz. "La infancia debería ser sagrada. Pero el machismo no lo entiende e incluso utiliza a las personas más inocentes que existen para hacer daño a las madres. Es una lacra que debemos seguir combatiendo como sociedad. Sin relajarnos. Hasta conseguir erradicarlo. Hasta que todas las mujeres, hasta que todos los niños puedan sentirse seguros", escribe.

Minuto de silencio

El escrito se abre con una referencia al caso de la niñas de Tenerife Anna y Olivia y mantiene que la infancia "debería ser sagrada", aunque "el machismo no lo entiende e incluso utiliza a las personas más inocentes que existen para hacer daño a las madres". "Es una lacra que debemos seguir combatiendo como sociedad. Sin relajarnos. Hasta conseguir erradicarlo. Hasta que todas las mujeres, hasta que todos los niños puedan sentirse seguros. Pero el machismo no lo entiende e incluso utiliza a las personas más inocentes que existen para hacer daño a las madres".

"Su madre no mostró ningún respeto por la vida de Yaiza y se la llevó con el único objetivo de hacerme daño. Me lo ha hecho, sin duda. Nunca había sentido tanto dolor. No creo que deje de sentirlo", prosigue. "No le importó que sólo tuviera cuatro años y toda la vida por delante. Todavía tenía que aprender a nadar sin manguitos o a montar en bicicleta sin los ruedines. Tenía que soplar tantas velas de cumpleaños".

"Huyo de lecturas políticas de ningún tipo. Si alguien quiere utilizar a los niños para hacerlas tendrá todo mi desprecio. Ojalá no le vuelva a pasar nunca a nadie. Que ninguna otra niña sufra a manos de su padre o de su madre. Y que ninguna otra víctima caiga en el olvido", sostuvo, haciendo un llamamiento a la unidad en contra de este tipo de casos. Además, pide respeto a los medios y que eviten "primeros planos e imágenes incómodas" en la despedida que se dará a la niña este mismo jueves. "Mi vida por volver a hacer un puzle a tu lado. Te quiero y te querré siempre", termina.

El padre de Yaiza subraya que en los últimos días se ha sentido arropado por su familia, amigos y vecinos, que hoy recordarán a la niña con un minuto de silencio convocado por el Ayuntamiento Sant Joan Despí.