Los cinco perfiles de compañeros "tóxicos" en el trabajo que deberíamos identificar y poner límites

  • Las personas tóxicas se pueden encontrar en cualquier ámbito de la vida, ya sea el familiar, el de amistad o el laboral

  • Estos días, ahora que hay de vacaciones de Semana Santa, se puede identificar mejor un entorno de trabajo tóxico y ponerle freno

  • Desde el compañero impulsivo al manipulador o agresivo, según un estudio, hay cinco tipos de perfiles a identificar

Las personas tóxicas se pueden encontrar en cualquier ámbito de la vida, ya sea el familiar, el de amistad o el laboral. Estos días, ahora que muchos están de vacaciones de Semana Santa, quizás se puede identificar mejor un entorno de trabajo tóxico e intentar ponerle freno. Desde el compañero impulsivo al manipulador o agresivo. Según un estudio, hay cinco tipos de perfiles a identificar:

Los cinco tipos de compañeros "tóxicos" a los que poner límite

El agresivo o la agresiva

  • Disfruta cuando intimida. Es arrogante y quiere dominarlo todo. Así se define a este compañero ante el que no hay que mostrar sumisión.

El impulsivo o la impulsiva

  • El que es incapaz de decir lo que siente si no vocifera o da un golpe.

El negativo o la negativa

  • El que se queja de todo en su entorno laboral.

El criticón o la criticona

  • Aquel que tiene por hobby el criticar.

El manipulador o la manipuladora

  • Aquel que intenta crear mal ambiente y que no aguanta el bien ajeno.

Identificar personas tóxicas y cambiar la relación

Perfiles tóxicos que generan mal ambiente en el trabajo donde pasamos tantas horas. "No dudan en tratar mal, o maltratar incluso, a personas que están a su cargo o compañeros", explica al respecto la coach María Fontal.

Es importante identificarlos y ponerles límites. "Tú nunca vas a cambiar a la persona,cambias tu relación con la persona", señala Mario López, director de Relaciones Laborales. Y cuando se está teletrabajando es más difícil gestionar ese trato. "Acaba siendo invasivo, ya que no tengo ese espacio para desahogarme con un compañero", añade Fontal. En esos casos hay que solicitar que la empresa medie en el conflicto.

Cabe destacar la diferencia entre quienes pueden ser tóxicos para una persona en concreto, pero no para otra (nosotros también lo podemos ser para alguien), de los que tienen un trastorno de personalidad por haber sufrido un daño en la infancia. En este caso, no tienen plena conciencia de cómo actúan y del daño que causan sobre las personas que están a su lado. Lo importante es saber identificar y lidiar de la mejor manera.