El castillo hinchable en el que murieron dos niñas en Mislata en 2022 era una feria ilegal en terreno privado

El castillo hinchable en el que murieron dos niñas en Mislata: una feria ilegal en terreno privado
Agentes de la Policía investigan la atracción hinchable de Mislata. Europa Press
  • Con todas las irregularidades que disponía la feria, no se hubiera puesto en marcha

  • La feria no se encontraba en el espacio aprobado por el Ayuntamiento, ni siquiera el castillo hinchable se ubicaba en el lugar pactado

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ValenciaLa investigación del caso en el que murieron Vera, de cuatro años, y Cayetana, de ocho, en un castillo hinchable de la feria de Mislata, sigue su curso. La jueza de Instrucción 4 de Mislata que investiga el caso confirma que la feria no se encontraba en el espacio aprobado por el Ayuntamiento, ni siquiera el castillo hinchable se ubicaba en el lugar que recogía el proyecto de los feriantes. Así lo recoge en sus informes el grupo de Homicidios y la Policía Científica de la Policía Nacional de Valencia.

El 25 de junio de 2024 informó la Gerencia del Catastro a través de un escrito solicitado por el penalista Jorge Carbó, abogado de la familia de Vera, que la mayor parte de la feria estaba montada en suelo privado, cuando debía realizarse en suelo público.

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Los terrenos pertenecen a dos empresas constructoras, Vía Célere Desarrollos Inmobiliarios S. A. y Makati Directorship S. L. U. Actualmente, se desconoce, tres años y medio después, si dichas empresas habían otorgado algún permiso al ayuntamiento o a los feriantes para permitir las las atracciones en sus parcelas. Carbó ha pedido a la jueza que oficie a las dos empresas para que lo aclaren. De momento, no hay respuesta del Juzgado.

La tragedia

La tarde del 4 de enero de 2022 acogió un suceso traumático para la localidad, cuando el castillo hinchable de su feria, en el que jugaban nueve menores, salió volando por una ráfaga de viento, dejando dos víctimas mortales.

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Falta de documentación

El único documento que podría reflejar una presunta autorización es, hasta el momento, la declaración responsable firmada por el ingeniero contratado por los feriantes y una licencia de ocupación de vía pública del Ayuntamiento de Mislata.

Carbó ha acreditado que el ingeniero no está dentro del registro de personas con acreditación OCA, es decir, su declaración no avalaba la apertura de la feria. El ayuntamiento tendría que haber enviado personal municipal para revisar las instalaciones. La feria nunca debió ponerse en funcionamiento sin la licencia municipal de actividad.

Una inspección a tiempo podría haber destapado las irregularidades

Con esa visita municipal obligatoria y la inspección de las instalaciones se hubieran podido comprobar varias cosas: los cambios en la ubicación y su afectación del viento, la ausencia de elementos de anclaje, la falta de mobiliario urbano donde anclar el castillo, la inexistencia de contrapesos homologados y la falta de piquetas, y no haber precisado del certificado de instalación y montaje. Con todas esas irregularidades, la feria no se hubiera puesto en marcha, por lo que se podría haber evitado la tragedia.

Según una investigación impulsada por los padres de Vera, se sabe que el castillo cambió de ubicación porque se encontró la parcela en la que debía montarse perimetrada con una valla. Al parecer, la empresa Makati Directorship, habría vallado su parcela, lo que llevó a los feriantes a ocupar un espacio diferente al pactado.

El espacio inicial para el castillo se encontraba entre el Tren de la Bruja y los coches de choque, un lugar encajonado donde el viento posiblemente no habría actuado de la misma forma.