Los motivos de la pelea entre Carol e Indhira

TELECINCO.ES 27/11/2009 16:57

Cuando Indhira escuchó su nominación no se sorprendió, porque lo había pedido; pero cuando escuchó que Carol no lo estaba, su cara expresaba sorpresa y rabia. Las reacciones no se hicieron esperar. Indhira se reunió en la habitación con sus confidentes, Arturo y Toscano y el vasco reconoció que sólo había dado un punto a Carol, "¡Ay Arturo!", decía una Indhira con aire frustrado.

Ya en el confesionario, Indhira se mostraba traicionada, "Todo el mundo me ha dado la espalda, a la hora de la verdad no quieren nominar a Carol", decía y remarcaba la 'traición' de Arturo quien le prometió nominar a su rival con dos puntos pero finalmente tan sólo le adjudicó uno. Cree que todos se compadecen de Carol, "Es muy buena niña, muy linda y yo soy celosa y me monto películas, pues nada", decía resignada.

Mientras Indhira se desahogaba en el confesionario, Carol se daba cuenta de la estrategia de su enemiga: A pesar de que le había asegurado que le diría todo a la cara,había pedido a sus compañeros que las nominaran a ambas para someterse juntas al veredicto de la audiencia, saber esto acabó con su paciencia "Y ahora, de repente, lo que está pidiendo a la gente es que me nominen", decía a Laura y Arturo. Carol se mostraba convencida de que Indhira jugaba con un arma de doble filo, "¿Qué cojones te he hecho a ti para que me des uan cara y luego estés dando otra?", preguntaba al aire.

En ese punto, Arturo rompió una lanza a favor de Indhira asegurando que a ella le da igual irse a la calle o que se marchara su rival. Pero en ese momento el silencio se apoderó de la habitación ya que Indhira estaba haciendo su aparición y, apreciando el silencio, dijo "Podéis seguir hablando", es en ese preciso instante cuando comienza la gran pelea.

Falsa tú, zorra yo

"Podéis seguir hablando", decía una desafiante Indhira al entrar de pronto en el habitáculo, sin contar (o contando) con que la cántabra le siguiese el ritmo. "¿Ah sí?. Pues sigo: Resulta que me dices esta semana que hagamos las paces y que lo que me tengas que decir me lo dirás a la cara y me tengo que enterar ahora que has dicho a todo el mundo que me nomine", respondía, airada.

A partir de la réplica, los decibelios no hicieron sino aumentar. Tanto, que Tatiana decidió ponerse en medio mientras Arturo seguía tumbado en la cama, observando el debate sobre el Estado de la Nación. "¿Por qué siempre quieres el protagonismo?", argumentaba Carol. "Tú te estás haciendo la protagonista ahora", seguía Indhira. "Yo si te digo las cosas a la cara, tú vas diciendo por la espalda. Haces lo que se sale del rabo, que no tienes pero lo mismo te sale", lanzaba Carol, dando el pistoletazo de salida a la impulsividad máxima.

Regadío en Guadalix

"¡Mira la educada!. ¿Te enseño el rabo? ¿Quieres que te lo enseñe?", rebotaba Indhira mientras Tatiana hacía verdaderos esfuerzos por mantenerla alejada. Mientras, Carol se plantaba en seco frente a ella. En décimas de segundo, Indhira arrebataba el vaso que Tati tenía en la mano y le lanzaba a su contrincante el agua y los hielos del interior. Un par de "zorras" acompañaban el ademán.

Tras varios minutos de desconcierto, la organización llamaba a todos al salón. Indhira desaparecía hacia el confesionario y el resto, visiblemente nerviosos, seguían hablando en corro. Las elucubraciones iban en todas las direcciones, pero la mayoría en una posible represalia. Y no se equivocaron, el programa decidió expulsar a Indhira, tal y como en su día ocurrió con Gonzalo. Tras pasar varias horas hablanco con el psicólogo del programa, la malagueña abandonó para siempre la casa de Guadalix.

Acto seguido, todos se arremolinaban alrededor. Saray se ponía también en medio. Indhira salía disparada hacia el salón. Carol se quedaba de piedra. Tatiana lo flipaba, primero por la rapidez del robo de su vaso y luego por el suceso en sí. Gerardo se quedaba boquiabierto y Arturo, el fecundador, seguía tumbado en el lecho.