Emily le pone cara al asesino de su padre

telecinco.es 17/06/2012 17:30

Durante una de sus visitas a la mansión Grayson, Charlote le muestra a Emily una foto de David Clarke tomada el día que murió. El padre de ambas luce visiblemente desmejorado y parece asustado. Sin embargo, lo que más le llama la atención a nuestra protagonista es una agenda que el reo sostiene y de cuya existencia no tenía conocimiento.

Su sorpresa es mayúscula al descubrir que Nolan le ha escondido tan importante documento, dice, para salvaguardar la memoria de su padre. Lo que su socio quiere ocultar en realidad es la identidad de su tía, Carole Thomas, quien, al parecer, estuvo reuniendo pruebas para exonerar a Clarke.

Carole trabajó como secretaria en Grayson Global para investigar la empresa y tuvo que fingir su propia muerte para proteger su vida. Le habla a Emily de un hombre de pelo blanco y fríos ojos azules al que hasta Conrad teme. Thorne sabe quién es: le ha visto en la foto de Charlotte y en las grabaciones de Treadwell. Y piensa matarlo.

Daniel concede una entrevista

Mientras tanto, tras la ‘confesión’ de Lee, Daniel queda por fin el libertad ante la indignación de un sector importante de la opinión pública. Emily le recomienda que salga al paso de rumores en uno de los muchos medios de comunicación que pugnan por entrevistarle, algo que Conrad considera una fantástica idea.

Precisamente, el magnate de Grayson Global necesita desesperadamente mejorar la imagen de su empresa tras el escándalo por el asesinato de Tyler. Por si esto fuera poco, su mujer le ha denunciado a la Comisión de Seguridad de Mercado.

En esta tesitura, y con unas copas de más, Conrad llama a su hijo al despacho para contarle, a puerta cerrada, que su madre fue la responsable de la paliza que le dieron en la cárcel, que fue él quien organizó el ‘suicidio’ de Lee y todo lo referente a la traición y asesinato de David Clarke. Una vez más, Emily lo registra todo con los micros que tiene instalados en la mansión.

Finalmente, Daniel accede a hacer la entrevista en una importante cadena de Televisión. Emily alberga la esperanza de que su prometido denuncie a sus padres, pero su decepción no puede ser mayor cuando el muchacho hace una encendida defensa de su progenitor, al que define como la víctima en una caza de brujas.

Paralelamente a estos acontecimientos, Declan denuncia a Charlotte por consumo de estupefacientes al director del elitista colegio en el que ambos estudian. Tras ser expulsada del centro, la chica, promete que conseguirá que su familia retire los fondos para que Porter siga estudiando allí. Sin embargo, Nolan se ofrece a sufragar la matrícula del joven.