Carla Bruni, devastada en el adiós a su marido, Nicolas Sarkozy, ante su ingreso en prisión: en silencio y sin soltarle la mano
Este martes 21 de octubre, el expresidente francés ha ingresado en la cárcel de La Santé, donde cumplirá una condena de cinco años
Nicolás Sarkozy entra en prisión: así es la celda del expresidente de Francia, que tendrá mejores condiciones que otros presos
Ha llegado el día. Este martes 21 de octubre quedará marcado en la historia política francesa. En las primeras horas de la mañana, el expresidente francés Nicolás Sarkozy ha abandonado su domicilio en el distrito XVI de París acompañado de su esposa, Carla Bruni, para ingresar en la cárcel de La Santé, donde comienza a cumplir una condena de cinco años.
De la mano, en silencio, visiblemente devastados y bajo la mirada de decenas de fotógrafos, la pareja ha protagonizado ante una multitud de cámaras su último 'adiós' antes de su entrada en prisión. Por primera vez, un antiguo jefe de Estado entra en prisión por un delito de corrupción política y, en concreto, la financiación ilegal de su campaña presidencial de 2007.
La despedida
Bruni ha querido estar al lado de su marido en sus últimas horas de libertad, las que parecen un adiós anticipado, consciente de que una separación física se convierte ahora en una realidad.
En torno a ellos, simpatizantes del expresidente han agitado banderas francesas y pancartas con mensajes de apoyo, mientras algunos vecinos han observado desde los balcones cómo la comitiva ha abandonado lentamente la calle, escoltada por motocicletas policiales.
La modelo, vestida de oscuro casi emulando un luto y sin hacer declaraciones, ha sostenido la mano de Sarkozy hasta el último momento.
También ha estado presente su única hija en común, Giulia, que cumplió 14 años el pasado 19 de octubre.
A través de la red social X -antes Twitter- Sarkozy ha publicado un mensaje antes de abandonar su casa: "En el momento en que me dispongo a cruzar los muros de la prisión de La Santé, mis pensamientos se dirigen a las francesas y los franceses de todas las condiciones y opiniones. No es un expresidente el que está siendo encarcelado esta mañana, es un hombre inocente".
El texto, difundido apenas unos minutos antes de su salida, resume la postura que mantiene desde hace años: la de declararse víctima de una persecución judicial. Su defensa insiste en que presentará un recurso ante el Tribunal de Casación y solicitará la suspensión de la pena.
La despedida de esta mañana culmina una etapa que comenzó hace más de una década, cuando los tribunales franceses abrieron una serie de investigaciones sobre la financiación de la campaña que llevó a Sarkozy al Elíseo en 2007.
La condena de Sarkozy y su futuro en la cárcel
Según la sentencia dictada el pasado 25 de septiembre, el expresidente es declarado culpable de "asociación de malhechores" por su implicación en una red de intermediarios que habría facilitado la entrada de fondos procedentes del régimen de Muamar el Gadafi.
El tribunal considera probado que parte del dinero libio fue utilizado para sufragar los gastos de su campaña electoral, en violación directa de las leyes francesas de financiación política.
La condena establece cinco años de prisión, de los cuales dos son firmes, y una multa de 100.000 euros. Sarkozy, de 70 años, se convierte así en el primer expresidente francés que entra en prisión de manera efectiva por delitos relacionados con su mandato.
A diferencia de condenas anteriores, como la del caso 'Bygmalion' de 2021, esta vez el tribunal determinó que no procede la suspensión ni el arresto domiciliario, y ordenó el ingreso inmediato en el centro penitenciario parisino de La Santé.
En la prisión, el exmandatario ocupa una celda individual de aproximadamente nueve metros cuadrados, con ducha privada, escritorio, televisión y línea telefónica controlada, así como con un régimen de aislamiento parcial debido a su perfil político y mediático.
La historia de Sarkozy y Carla Bruni
Carla Bruni, que ha permanecido al margen de los procesos judiciales, ha publicado en las últimas semanas varios mensajes en sus redes sociales en los que expresa su apoyo al expresidente. Uno de ellos, compartido el pasado 20 de octubre, incluye su canción 'Les Séparés' y un vídeo con imágenes de ambos.
Su historia, una de las más mediáticas de la política francesa, comenzó en 2007, y formalizaron su relación apenas unos meses después, el 2 de febrero de 2008, convirtiéndose en marido y mujer en el palacio del Elíseo.
Durante su mandato, Bruni ejerció el rol de primera dama, aunque fue discreta y sus apariciones y declaraciones medidas: compareció junto a su marido en eventos públicos, evitó declaraciones directas y se refugió en su carrera artística, manteniendo una actitud de apoyo incondicional.