Las tareas pendientes de la princesa Leonor a sus 20 años: un sueldo, un asistente personal y su nula relación con otros 'royals'
La nueva década de la hija de los reyes Felipe y Letizia implica que muchos retos para su futuro ya están en marcha, y otros aún por definir
El rey Felipe y la princesa Leonor, a sus 20 años: diferencias y semejanzas que han protagonizado padre e hija a la misma edad
La princesa Leonor ha cumplido 20 gloriosos años este pasado viernes 31 de octubre, cerrando por todo lo alto este antepenúltimo mes del año.
Esta fecha no solo marca el comienzo de una nueva década, en su caso también implica que muchas de las fases de preparación para su futuro como heredera al trono de España ya están en marcha, y otras aún están por definir.
La incógnita de la universidad
Uno de los grandes 'pendientes' de su situación actual es saber cuándo y dónde estudiará una carrera universitaria. Hasta ahora, el plan oficial publicado por la Casa de S.M. el Rey señalaba que Leonor realizaría tres años de formación militar tras su Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales en vez de inscripción inmediata en la universidad.
En agosto de 2023 comenzó en la Academia General Militar, en Zaragoza, como parte del primer año. En 2024 y mediados de este 2025 le tocó la fase en la Escuela Naval Militar de Marín, y ahora, y la primera mitad de 2026, culminará su instrucción en la Academia General del Aire en San Javier.
Esa ruta hacía que la 'entrada' tradicional en un centro universitario quedara aplazada. Hasta la fecha, no hay ningún anuncio oficial todavía de la universidad, la carrera o la fecha exacta de matriculación de Leonor.
Podríamos deducir que después de concluir la formación militar será cuando se contemple su ingreso universitario, tal y como ocurrió con su padre, el rey Felipe, que arrancó su etapa universitaria a los 20 años.
Esto hace de la universidad una incógnita: ¿Irá en el curso 2026-27? ¿Qué estudiará? ¿Se tomará un año sabático? Habrá que esperar a junio del año que viene para desvelar esa incógnita.
Su sueldo
Como heredera al trono, Leonor ya ostenta títulos como el de Princesa de Asturias, de Girona, o de Viana, entre otros. También acude a numerosos actos institucionales y, año tras año, su presencia es más visible y más deseada. Pero todavía tiene un aspecto que tachar en su lista como futura reina de España: percibir un sueldo.
Hasta ahora, la hija de los reyes Felipe y Letizia no recibe ningún tipo de salario, ya sea por su papel institucional o por su rango militar.
Zarzuela mantiene una política tradicional y prudente sobre este asunto. Como ya ocurrió con Felipe VI, la princesa no recibirá un salario hasta que no finalice su formación militar y universitaria y comience una agenda institucional como princesa de Asturias plenamente activa. El rey no empezó a percibir asignación hasta los 30 años, un indicativo de que su primogénita, de seguir la misma regla, no accedería a ella hasta dentro de una década.
Aunque podría percibir como alférez alumna alrededor de 575 euros mensuales, ella ha renunciado voluntariamente a este ingreso. También al de heredera.
Se desconoce la cifra exacta que cobrará cuando llegue el momento, aunque siguiendo el modelo del actual soberano cuando todavía era príncipe, es probable que Leonor reciba el 50% del sueldo que gana el rey. Como ejemplo, este año, Felipe VI ha percibido 277.361 euros, por lo que, en este sentido, su hija ganaría poco más de 135.000 euros anuales.
Desde Zarzuela, que Leonor todavía no pueda acceder a esos beneficios lo valoran como una muestra de compromiso institucional y de alejamiento de cualquier percepción de privilegio económico prematuro.
Un asistente personal, sin fecha a la vista
¿Cuándo contará la hermana de la infanta Sofía con un asistente personal o equipo propio para el apoyo institucional? En el caso de muchos jóvenes miembros de familias reales europeas, una vez comienzan a asumir funciones institucionales se les asigna un equipo.
Cabe destacar la situación de Amalia de Holanda. La hija de los reyes Guillermo y Máxima contó, hasta 2024, con una asistenta personal, Eveline van den Bent. Se desconoce el motivo real por el que, tras años de estrecha relación, desde Casa Real decidieron dejar de contar con su labor.
Por su parte, el príncipe Guillermo también cuenta con una mano derecha, Ian Patrick. El propio Felipe VI también contó con un tutor, el teniente coronel José Antonio Alcina, que estuvo a su lado desde que cumplió 16 años hasta 1993.
En el caso de Leonor, aunque participa en actos y realiza formación militar, no se ha anunciado una "oficina de la princesa" con estructura. Así que, dentro de sus tareas pendientes, también figura la transición de 'aprendiz' a 'miembro activo con presupuesto y equipo' en la Casa Real española.
Relaciones con otros 'royals'
Como futura reina de España, Leonor también tiene un papel diplomático e institucional: establecer relaciones de compañerismo y colaboración con otros herederos europeos e incluso reyes.
Pese a que la nieta del rey Juan Carlos ha dado pasos agigantados en su papel institucional, desde Zarzuela parece que hay un reto que se les escapa, o que han dejado de lado: su nula relación con otras monarquías europeas.
La princesa de Asturias es una de las cuatro mujeres designadas como herederas -junto a Victoria de Suecia, Elizabeth de Bélgica y Amalia de Holanda- de los 22 herederos de casas reales reinantes que hay en total en la actualidad. También forma parte de una de las cuatro monarquías europeas que cuenta con cuatro herederos royals -contando a Leonor- que tienen una edad parecida a la suya -Christian de Dinamarca- y que ostentan el primer puesto en la línea de sucesión al trono.
Hasta ahora, Leonor todavía no conoce -o al menos no hay constancia de ello- a numerosos herederos de otras casas reales. No acude a banquetes ni cenas de gala mientras otros herederos como Elizabeth, Christian o Amalia se han dejado ver juntos en varias ocasiones.
Este es uno de los grandes retos que la Casa Real debe afrontar. La eficacia con la que se realicen estas transiciones puede marcar la imagen y la funcionalidad de la monarquía española en la próxima generación.